Una vida rutinaria, un tanto ordinaria.
Sus mañana iniciaba un tanto despeinada.
Sus ojos llenos de lagañas, y bostezó seguido de quejidos.
Para ella la única forma de arrancar el día era con su taza de café negro sin azúcar.
"Peculiar gusto el de ella"
Siempre caminaba al trabajo por la avenida Florida.
Ella ahorro durante sus últimos 4años de vida.
Siempre soñaba con ese viaje a París.
Su arquitectura, arte, música gastronomía y su idioma la tenían facinada.
Al llegar a su oficina, siempre intercambio miradas con su compañera desde esa misma esquina.
Trabajar 8 horas para luego ir a su casa comer dormir y volver a empezar.
Día tras día semana tras semana, la rutina se hacía más larga, y eso ya la estresaba. Ese pelo negro que antes miradas robaba, hoy ya gris ceniza es. Esos labios que más un hombre deseaba besar
Hoy fríos están.
Esos ojos café que toda reflejaban hoy cerraron por última vez.
Y ese sueño de viajar a París se convirtió en su único motivo para vivir, olvidando como era vivir, dejándose llevar por una rutina que ya la estresaba, y de a poco la envenenaba. Y hoy forma parte del cementerio en el cual solo un pedazo de mármol con su nombre en el la identificaba.
Rodeada por cuerpos, que tuvieron como propietarios a mentes que al igual que ella,
olvidaron como era vivir, para establecer una menta como razón de su existir.
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Mi otro yo
PoetryMi otro yo es el medio por el cual me excuso para poder escribir lo que siento, todos mis sentimientos. Muestro mi otra cara, la que nadie ve. A medida que escribí este rostro desfigurado vuelve a ser operado. Y al final de este libro ya quedará rec...