Mi Corazón es Tuyo [Talon x Kassadin] [League Of Legends]

Capítulo 21

Narra Kassadin

Ya puedo mover mis brazos y piernas, pero aún así tengo una sensación de pesadez lo cuál me impide que los mueva con mayor frecuencia. No se cuanto tiempo habré pasado inmerso en mi subconsciente y haber olvidado la clase de persona que era, esa clase que se había dedicado hora enteras para que mi amado pueblo prosperara después de haber estado sometido por rufianes injusto y aprovechadores. Pero algo me preocupaba y era que no me podía quitar de mi mente la imagen del vacío llamandome y reclamandome, era algo agobiante y hacía que me sintiera con miedo, ¿Con miedo?, no era algo usual en mi, pero desde que abandoné a Icathia y de haber vuelto al mundo de los humanos la poseía.

Unos pequeños rayitos traviesos del sol atravesaron por la cortina, dejándose caer por mis párpados y en ese momento, aunque me sintiera pesado comencé en abrir mis ojos después de mucho tiempo y cuándo lo hice, observé a mi alrededor detalladamente. Primero, comencé por la izquierda y en mi campo visual, se podía distinguir el color rojo colonial de mis cortinas, una fuente de agua sobre un mueble y varios pequeños frascos que desconocía de sus contenidos. Enseguida giré la cabeza hacia la derecha y observé a un hombre sentado en una silla a mi lado, pero con la parte superior de su cuerpo apoyado sobre mi cama, al parecer se encontraba durmiendo y tenía todo su pelo desordenado, en ese momento no pode evitar en rebosar una pequeña sonrisa en la comisura de mis labios, con sólo pensar que aquel hombre se pasaba todos los días a mi lado, velando se esa forma si seguridad. - Te lo agradezco mi mayordomo - me decía en mi mente, mientras observaba su rostro, aquel pálido rostro que yacía tranquilamente sobre las suaves frazadas de mi cama y esos finos labios que tantas ganas que tenía el volver a besar, pero al observarlo detenidamente, pude darme cuenta que poseía pequeñas cicatrices sobre su rostro, algunas por su mejillas y otra por su frente, cuyas que no tenia anteriormente, dudo que después de que perdiera el conocimiento hubiera alguien que me quisiera muerto, pero aún así se debió haber enfrentando con alguien después.

Después de encontrarme varios minutos embozado mirado al chico que tanto quería y anhelaba, decidí en acariciarle su cabello, pero a penas pude levantar mi mano y dirigirla hasta su cabeza y cuando lo hice, una sensación de agradable se sentía por mis dedos cada vez que jugueteaba en su cabello, de esa forma llenando una paz en mi interior como el agua en un baso trasparente. Sin embargo, mi pequeño hombre al sentir que alguien le estaba acariciando su cabello, comenzó a despertar de su sueño y de a poco comenzó a darse cuenta de mi presencia y para cuando lo hizo, unas lágrimas le comenzaron a salir de sus ojos hasta deslizarse por su mentón. - Kassadin- pudo pronunciar, sin darse cuenta que se había abalanzado hacía mis brazos.

Narrador omniciente

El joven noxiano se encontraba despertando lentamente al sentir un tacto extraño sobre su cabello y cuando abrió sus ojos, instintivamente su mirada se dirigió al cuerpo inmóvil que yacía a su lado, pero se había llevado una gran sorpresa, que ese supuesto cuerpo se encontraba con los ojos abiertos y mirándolo detenidamente ¿acaso fue un milagro? Se preguntaba para si mismos y no podía evitar que salieran por sus ojos unas traviesas lágrimas, - Kassadin - alcanzó a pronunciar antes de lanzarse hacía sus brazos, en ese momento su corazón se encontraba agitado y una agradable sensación se abastecía en su interior mientras miraba a los ojos a su amado jefe. Los dos hombres se miraban atentamente y él que se encontraba tendido sobre la cama, con una de sus manos le comenzó a limpiara
una de las mejillas al chico noxiano, con una sonrisa en sus labios  y no pasaron ningún segundo hasta que ambos unieran sus labios de forma desesperada y apasionadamente, de esa manera dando forma a un anhelante beso.

Después que ambos se quedaran sin aliento y separados por una hilera de saliva entre sus lenguas, el joven noxiano se dejó caer sobre el cuerpo del caminante del vacío y éste, lo envolvió con sus brazos - No sabes como han sido estos angustiosos  meses, Señor Kassadin - comenzó hablar Talon, mientras que sus mejillas se encontraban ruborizada, - Lo sé, mi amado mayordomo -  decía el caminante del vacío mientras que unas de sus manos le acariciaba la espalda, en ese momento Kassadin se dio cuenta que habían pasado "meses" desde que había perdido la conciencia y sabía que la mano de Noxus y la pelirroja se habían estado encargando en los deberes de su querido pueblo, así que con ninguna preocupación en su mente se dejó consumir por sus emociones.

- Talon - susurró el caminante del vacío, de esa forma llamando la atención de su amado, - Si Señor Kassdin - respondió enseguida el joven noxiano levantando su rostro hacía su jefe y de un movimiento, se forma imprevista Kassadin le agarró el mentón y lo jaló hacía su rostro para darle otro beso, lo cual se transformó nuevamente en un beso largo y apasionado. Sin embargo, ese beso no solamente se limitó en el jugueteó de esas lenguas, sino también por las caricias realizada en ambos cuerpos, que cada vez eran consumidos por la pasión del momento.

Con la yema de los dedos acariciaba kassadin en la espalda desnuda del joven noxiano recorriendo a cada centímetros de su suave piel y dándole pequeños agarres para escuchar gemir a su amado, mientras que el caminante del vacío estaba inmerso en las caricia que le daba, Talon no podía evitar en ruborizarse al sentir el tacto lento y suave por la mano de su jefe, en ese momento cada tacto, cada agarré era un afrodisíaco para su cuerpo que cada vez le pedía a gritos que fuese penetrado. Enseguida, con los ojos cerrados y disfrutando el placer, Talon no se dio cuenta que su amado jefe comenzó a besarle el cuello y recorriendo con sus manos en su torso antes de pasar por la zona prohibida. Luego, Talon instintivamente comenzó a desnudar en la parte superior al caminante del vacío con pequeños caricias, además acompañado de profundos besos, en eso momento el contrario comenzó a sentir placer cada vez que sentía los labios del noxiano sobre su pecho y abdomen y de un movimiento cambiaron de posiciones, quedando el amo y señor arriba.

Entre juegos y juegos de caricias y besos, ambos jóvenes se encontraban disfrutando el placer mundano de la carne y sin todavía fortalecer su unión, hasta que luego de varios minutos intercambiando tactos y con sus miembros viril erectados estaba listo para iniciar la segunda fase.