Por si no os daís cuanta, no soys bienvenidos

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22/06/2020

Me levanté con el pelo enmarañado, la conciencia venía poco a poco, mierda, derrepente vino de golpe. Hoy venían los indeseados como me había dado por llamarlos, Mary llegaría en media hora, y las dos, junto con mi padre, Oliver, mi madre, Ann y mis dos hermanos, el de diecisiete, James y mi mellizo, Garreth. Garr y yo teníamos una relación especial, siempre habíamos sido cómplices de travesuras y en general no llevábamos genial. James era harina de otro costal, era superprotector conmigo, yo solía pasar desapercibida, pero no me iba a poner un saco para ir a las fiestas a las que íbamos por obligación, de hecho siempre he pensado que soy una chica muy guapa, para qué decir lo contrario, poco social, sí, pero guapa también. Soy rubia, pelo largo, normalmente recogido en una cola de caballo, con los ojos del color del chocolate y con chiribitas negras dentro. Alta y con mis curvas sexys como decía Garr, más bien el decía que era mejor que me pusiese sudadera porque si no, tendríamos la casa llena de testosterona. Comentario que a Jem no le hacía mucha gracia. El caso es que de cuerpo también restaba bien, y de pecho igual, pero yo no era una guarra de aquí te pillo aquí te mato, y luego dicen que las rubias somos tontas, alguna que otra no lo niego pero yo soy rubia y no tengo ni un pelo de tonta.

Pero a diferencia de muchas chicas guapas, a mi la atención de los demás no me atraía.

Me fui al lavabo y me cepille el pelo, acto seguido me duché y me puse mi sudadera de McGregor rosa unos vaqueros azules y mis Converses azul vaquero también. Me seque el pelo y me hice una coleta. La sudadera era holgada, a si que no había problema alguno.

Sonó el timbre y yo ya estaba abajo, corrí a abrir la puerta. Era Mary, se puede decir que corría a la vez que daba saltitos, que no fuese social no significaba que con mi única amiga no fuese como cualquier otra adolescente alocada, de hecho estaba muy mal de la cabeza cuando había confianza. Ella me devolvió el abrazo igual de efusivamente. Nada más entrar nos empezamos a poner al corriente de todo.

- ¿Qué tal te va todo?- Pregunté ansiosa de que me contase todo.

- Bueno - su gesto se tornó triste - corté con Max...

- Si tengo que matarle sabes que a ti te sale gratis.

- No me importaría, el muy subnormal tuvo los huevos suficientes para ponerme los cuernos, con una fulana del tres al cuarto ¡Hombres! No te preocupes Jane, todo está superado.

»Aunque, me vengué. Haciendo como que no me había enterado le invité a mi casa, mis padres no estaban, el creía que nos acostaríamos. Le ofrecí una copa de tequila en el que había como cuatro pastillas para el sueño. Me disculpé y le dije que necesitaba preparar una cosa de mi ropa interior. Cogí creó a depilatoria y me la llevé a la habitación, el esta igual de dormido que un oso cuando hiberna. le puse crema depilatoria en las cejas y en el flequillo, diez minutos, al grifo y ¡listo! Después de la sesión de fotos le pedí a mi hermano Fred que me ayudase a llevarlo a casa, él estaba enterado del plan, pero no le llevé a su casa, le llevé a casa de Cendy, con la que me ponía los cuernos. Al día siguiente estaba hecho una furia, cuando me vio hizo un amago de pegarme pero yo fui más lista y le dije que cuando engañase a una chica era mejor que lo hiciera con una de esas guarras, porque las chicas inteligentes son inteligentes por algo muy importante, no son tontas.

- Esa es mi chica, si llego a estar yo no tendría tiempo ni para rezar un padrenuestro. O mejor, le hubiese dejado sin carnet de padre.

Mary río y hablamos de trivialidades, También hablamos sobre el bachillerato y sobre el futuro. Llegaron las once y montamos en el coche que mi padre usada para estos casos, un preciso Volvo, también dispuso otros 7 coches más, en uno de ellos iría Jem y en el resto, un chofer encargado. La cara de perro que puse debía de ser percibible porque Garr me miró y dijo:

El Amor es una drogaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora