Dangerous Obsession TERMINADA

Capítulo 16

Susan se acercó a nosotros con la libretita para anotar lo que íbamos a tomar. Cuando lo hizo miró fijo a Karol.

—Hola mucho gusto, soy Susan —le dijo y estiró su mano para que ella la tomara. Karol sonriéndole amablemente tomó su mano.

—Soy Karol—dijo ella.

—Eres nueva —habló Susan asintiendo.

—No Susan —le hablé al reaccionar sobre aquello. Pero fue demasiado tarde. Ella giró y se dirigió a todos en el lugar.

—¡Muchachos, tenemos una integrante nueva en la taberna! —gritó contenta. Todos comenzaron a aplaudir y silbar —¡Hay que darle la bienvenida!

—¡No, no, no claro que no! —dije poniéndome de pie.

—Ven Karol—dijo Susan y le tendió la mano para que ella la tomara. Con un poco de duda Karol la tomó y caminó detrás de ella hasta la barra. Mike, Agus y yo fuimos detrás de ellas, con todo el mundo detrás de nosotros también.

—Susan, por favor no lo hagas —le rogué.

—¿Por qué? Solo quiero darle la bienvenida al lugar —me dijo ella. Mientras iba llenando un gran vaso con cerveza. Miré a Karol.

—Vamos cariño, no tienes que hacer esto —le dije. Karol me miró bien, y luego miró a Susan que estaba frente a ella.

—Ruggero, no seas aguafiestas —me regañó Susan. Susan colocó el gran vaso frente a Karol. Ella lo miró bien —Tienes que hacer fondo de este vaso, y luego te giraremos sobre la silla, para que estés más feliz.

—No lo hagas, Karol. Así no eres tú —dije casi desesperado.

Karol miró a Susan y volvió a mirarme a mí.

—¿Acaso crees que no puedo hacerlo Pasquarelli? —me preguntó.

—No, no es eso. Sino que puede hacerte mal...

—Karol, mejor escucha a Ruggero Tiene razón —le dijo Mike.

—No hace falta que lo hagas Karol—dijo Agustín. Ella nos miró a los tres consecutivamente, y miró de nuevo a Susan.

¡Maldita seas, Susan! ¡No debiste hacer eso!

—¡Vamos linda, hazlo! —algún imbécil gritó por ahí. Todos comenzaron a gritar que lo hiciera, y todos esos incentivos maliciosos.

—¿Vas a hacerlo Karol? —preguntó Susan.

—¡No! —dije.

—¡Si! —dijo ella firme. Todos festejaron alegres.

Varios de ellos se pusieron alrededor de Karol para girarla cuando terminara de tomar, haciendo que los chicos y yo nos alejáramos un poco.

—¿Por qué la única vez que tengo razón no me escucha? —les pregunté a mis amigos.

Escuchamos como todos empezaron a decir: 'Fondo' 'Fondo' 'Fondo'
Les hice un gesto a los chicos para que nos sentáramos en la mesa. Ella no iba a hacerme caso. Pues ni modo, nada podía hacer. Todos se alejaron de la barra, y pude verla riendo con Susan. La cerveza ya había hecho efecto en ella.

—Será mejor que la cuides —me dijo Mike.

—Normalmente, eso me molestaría —dije mirando hacia Karol.

—Pero en este caso te encanta la idea —me habló Agus —Lo sabemos suripanta, ahora ve a cuidarla.

Me empujó para que fuera hacia allí. Me acerqué a ellas me senté en la silla de al lado de Karol. Ambas se giraron a verme.