Pip tiene pesadillas todas las noches, que mas que eso son recuerdos de una experiencia traumática, a pesar de todo trata de vivir una vida normal, eso claro hasta que un nuevo profesor de filosofía llega y esta dispuesto a enseñarle a sus alumnos...
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-"hasta que la muerte los separe"...que frase tan celebre y falsa al mismo tiempo, pero claro, cuando uno se casa estando estúpidamente enamorada le encuentra el significado más romántico posible ¡vaya mierda!-
La mujer sonrió de medio lado con cierta amargura y dio un sorbo a su taza de café, Pip la siguió atónito con la mirada, viendo lo pálido de su piel, sus ojos azules ya sin brillo, las marcas de la soga alrededor de su cuello y brazos -y posiblemente todo su cuerpo- estaban sentados en una mesa en Tweak Bross, bebiendo un café mientras la mujer le contaba sus penas, esa mujer a la que reconocía como la ahora difunta Laura Tucker
-te lo digo...le di los mejores años de mi vida a ese imbécil, me entregue en cuerpo y alma para criar a nuestros hijos y formar un hogar ¿pero cómo me lo pago? ¡acostándose con cualquier puta que se le atravesaba!-
-lo...lo siento mucho señora Tucker-
-yo lo siento más, y ya no me digas "señora Tucker"...no quiero tener nada que ver con ese idiota, desde ahora seré otra vez Laura Steilsson, como antes de casarme-
-está bien-
-de cualquier forma ya ni siquiera estamos casados, el plazo era "hasta que la muerte los separe" y bueno, yo ya estoy muerta-
-Pip...Pilliph, despierta-
-¿Pip?-
Los ojos azules de Pip se abrieron lentamente para encontrarse con el rostro preocupado de la señora Tweak, la mujer lo observaba con una preocupación maternal y eso por un momento hizo sentir bien a Pilliph, ya que al ser huérfano nunca había recibido esa mirada antes
-¿ya despertó?-
Pregunto el señor Tweak por la puerta de la oficina, solo hasta en ese momento Pip se dio cuenta de que estaba recostado en el sillón de la gerencia de Tweak Bross, de inmediato Pip quiso levantarse pero aún se sentía ligeramente mareado
-sí, cariño -respondió la señora Tweak a su esposo- solo fue un desmayo-
-¿me desmaye?-
-así es Pip -respondió Richard- justo cuando estábamos despidiendo a los últimos clientes caíste desplomado a media cafetería, te trajimos aquí mientras despertabas-
-oh...lo siento, no quise causarles molestias-
-no es ninguna molestia -respondió la mujer- en parte nos sentimos responsables de que ahora estés trabajando más del doble porque Tweek no está-
-¿te has estado alimentando bien?- pregunto Richard- si no es así y estas esforzándote de mas podría llegar la anemia-
-estoy bien- respondió el ingles con una sonrisa
Pip había comenzado a ocupar todo su tiempo libre ayudando a los Tweak en su cafetería, desde hace ya casi un mes que Laura Tucker había sido asesinada, su familia termino de romperse por completo, Thomas había intentado estar con sus hijos, pero ellos se negaron rotundamente a que su padre regresara y Ruby se había mudado con su abuela materna a Denver desde hace dos semanas atrás, por lo cual solo quedaba Craig en esa casa que antes se supone era un hogar, y aunque el chico parecía frio e indiferente por fuera, los Tweak sabían que se encontraba fuertemente dañado por los problemas familiares y la muerte de su madre, así que tanto Richard Tweak como su esposa, no se opusieron en nada cuando su hijo les informo que se iría a vivir con Craig un tiempo, mientras pasaba su duelo
