-¡oye chico, detente ahí!-
Pip detuvo su andar justo frente al edificio donde vivía, la patrulla que iba detrás de él se puso a su lado, bajando los vidrios polarizados y dejando ver a dos hombres dentro, uno regordete y castaño con lentes negros y otro pelirrojo de mirada seria, Pip los reconoció como el oficial Barbrady y el comandante Yates, aunque dudaba que ellos lo recordaran
-¿qué haces a estas horas en la calle? el toque de queda se timbro a las ocho en punto, son casi las ocho quince-
-lo...lo siento señor -se disculpó Pip- se me hizo tarde en el trabajo, pero ya llegue a mi destino-
-¿vives aquí?- pregunto Barbrady
-sí, les prometo que no volveré a retrasarme-
-no prometas nada chico -hablo Yates- es por tu propia seguridad que debes estar en casa a estas horas, un asesino anda suelto y cualquiera podría ser su siguiente víctima-
-lo entiendo, señor-
-muy bien, ahora entra a casa y si ves algo raro o a alguien sospechoso no dudes en llamar a la policía-
-lo hare-
-bien-
Sin más que decir Yates espero a que el chico entrara al edificio y después arranco el auto para seguir haciendo su ronda de patrullaje, apenas avanzaron unas calles Barbrady hizo su pregunta
-creí que amonestaría más al chico-
-no es necesario, ya estaba afuera de su casa y además aun no es tiempo de que nuestro asesino se aparezca-
-¿qué tan seguro esta de eso?-
-las muertes ocurren cada mes, han pasado tres semanas desde que Selastraga fue asesinada, siguiendo la forma de actuar de nuestro bastardo, falta una semana-
-¿entonces qué fin de poner el toque de queda y los patrullajes?-
-¿estabas dormido cuando lo explique?-
-solo un poco-
-el fin es advertir a la gente que no deben confiarse y ver si hay posibles sospechosos-
-¿el chico de hace un momento le parece sospechoso?-
-su nombre es Pilliph Pirrup, lo recuerdo por ser uno de los que interrogamos tras el deceso de Gary Harrison, además de que creo haberle conocido de niño-
-¿de niño?-
-si... -Yates entrecerró los ojos haciendo memoria- si no mal recuerdo fue hace años cuando yo solo era un uniformado, los bomberos nos solicitaron como apoyo cuando el orfanato que estaba a las afueras del pueblo se incendió-
-lo recuerdo, más de ochenta murieron calcinados, la mayoría niños-
-así es, solo un niño se salvó resultando ileso pero completamente traumatizado, casi no comía ni dormía, se hacía pis en la cama y murmuraba cosas inentendibles mientras miraba a la nada, yo mismo trate de hablar con ese niño, pero parecía perdido en sus delirios...ese niño era Pilliph Pirrup-
ESTÁS LEYENDO
L.D.A.Y.M.
FanficPip tiene pesadillas todas las noches, que mas que eso son recuerdos de una experiencia traumática, a pesar de todo trata de vivir una vida normal, eso claro hasta que un nuevo profesor de filosofía llega y esta dispuesto a enseñarle a sus alumnos...