Asesino (NaruHina) (PAUSADA)

Capítulo 25

<<Naruto>>

-Naruto, si me vas a apuntar con una arma, es mejor que sea para dispararme, y no para preguntarme acerca de tu madre muerta -había dicho eso tan tranquilo, que había provocado que mi ira aumentara aún más-. ¿Y?, ¿vas a dispararme?

-... ¡Carajo!, no puedo -exclamé con furia-, Pero créame tengo muchas ganas de dispararle, pero no lo haré. Necesito respuestas, y solo usted puede dármelas -Había recuperado un poco la compostura, y nuevamente había puesto el auto en marcha.

- ¿Solo es por eso?

-Sí.

-No será por mi hija, ¿verdad?

-No, y ahora si no le molesta podría cerrar la puta boca, y contestar la pregunta que le hice.

-Eso es muy confuso Naruto -dijo fingiendo confusión-. Quieres que me calle, pero quieres que hablé, eso es simplemente...demasiado confuso para mí.

-Está bien -dije intentando tranquilizarme-. Necesitó respuestas...por favor.

- ¿Y?

-Lo siento -repuse con resignación.

De verdad tenía ganas de darle un tiro, Hinata era lo único por lo que no lo hacía, pero también era porqué necesitaba respuestas.

-Bien Naruto, aceptas tus errores, esa es una de la cualidades que necesitas si quieres ser mi yerno -exclamó feliz mientras asentía con la cabeza una y otra vez-, Ahora bien, te contaré lo que paso con tú madre -de un momento a otro había vuelto su tono severamente serió-. Hace 5 años, yo era un simple empleado de la mujer que te conté, aún no estaba ni cerca de ser su mano derecha, en aquel tiempo yo era desechable, lo de tu madre fue algo que yo no sabía, sin ser tan exactos, ni siquiera sabía que tenía que asesinar a alguien, la única información que me dieron fue, el lugar, la hora y la frase, "no te detengas".

- ¿Y porque cuando te diste cuenta...

- ¿No me detuve?

Asentí.

-Porque no podía hacerlo, ese era mi trabajó Naruto, y al igual que el tuyo...sabía que ya no tenía forma de volver.

-Pero... ¿Por qué mi madre?

-Nunca lo supe...supongo que fue porque tu padre era dueño de una empresa muy grande.

- ¿Supones? -volví a frenar el auto, y dirigí de nuevo mi vista hacía Hiashi-, Tengo 5 años, ¡5 putos años! teniendo pesadillas con mi madre siendo arrollada por un auto -mi ira iba en aumento-. Ni siquiera estuve ahí cuando paso, y tengo pesadillas con ello, y cuando por fin pensé que podía obtener respuestas, obtengo más preguntas.

-Estas desesperado Naruto, eso provocó que esperaras demasiado de mí, pero yo ya contesté las preguntas que pude contestarte, e incluso aunque quisiera no puedo resolver todas tus dudas.

Era verdad, esperaba demasiado de él, y eso era sumamente frustrante, porque una parte de mi lo sabía, sabía que no podía esperar demasiado, pero cuando te has pasado tanto tiempo buscado respuestas, no puedes evitar buscarlas en cualquier lugar.

-Bueno, y ahora que te conté lo poco que se sobre tu madre, quiero que tu contestes mi pregunta -dijo Hiashi cruzándose de brazos-. ¿Protegerás a Hinata?

Estaba recargado en mi asiento mirando el techo del auto, necesitaba tranquilizarme un poco si quería contestar esa pregunta sin estar cegado por mis emociones. Hinata no tenía la culpa de lo que su padre había hecho, y yo le había prometido a ella que la protegería, no me podía dejar llevar por mis emociones, no esta vez, pero de igual forma si aceptaba, y la mujer que Hiashi me había dicho era tan poderosa, no tenía mucho que hacer al respecto.