El nombre de esa chica...

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-Oye que fue lo que te dijo Ryota? Por qué saliste corriendo? Preguntó Hiraga con cara seria.

Roberto suspiro y luego empezó a hablar; bueno... es algo gracioso en realidad cuando estábamos hablando de... ti, el... dijo que estaba feliz de que fuéramos amigos y que si tú te tuvieras que casar con alguien le gustaría que fuera alguien como yo... bueno.. más bien yo- dijo mientras sonreía.

-Ahhh e-el dijo eso? vaya... pero eso no es posible jejeje- dijo nervioso por lo que acababa de oír.

-Está bien no le digas nada, de todos modos no importa, incluso si alguno de nosotros fuera una mujer no sería realmente posible así que no le des importancia- dijo Roberto regalándole una tierna sonrisa a Hiraga.

-... si tienes razón- dijo sin más.

-Disculpe- se escucho una pequeña voz aproximarse -Oh usted es familiar de Ryota, verdad? dijo una muchacha empujando un carrito con varias cosas.

-Ahh si, soy su hermano, qué pasa?- Dijo Hiraga gentilmente.

-Oh nada, solo le traje su comida y medicamentos-

-Bien muchas gracias es muy amable- Hiraga iba a abrir la puerta mientras decía eso.

-Está bien es mi trabajo y lo hago con m- de pronto se detuvo y se quedo viendo a Roberto -E-ehhh- las chica se puso roja y de repente empezó a tartamudear -p-perdón no lo... también es familiar de R-Ryota? dijo con la cabeza un poco baja pero si apartar completamente la mirada.

-Eh? No, yo sólo soy un amigo- y sonrió.

-Oh bien y-yo entrare je si eh voy- ella abrió la puerta y entró sin más.

Al día siguiente, por la mañana estaba Roberto parado frente a la habitación de Ryota, de pronto el sonido de unas llantas acompañado de el rechinar de unos zapatos se aproximaban al sito -Oh hola, e-s decir buenos días- dijo con una leve reverencia que salió casi automáticamente.

-Buenos días señorita- contestó tranquilamente Roberto.

-Ahhh si bueno yo le traje el desayuno a Ryota c-compermiso señor- dio la vuelta para entrar pero Roberto la detuvo.

-Espera no tienes que decirme señor eh en realidad me parece que no nos hemos presentado, disculpa- dijo con una leve sonrisa -Soy Roberto Nicolas mucho gusto, gracias por cuidar de Ryota- luego de eso extendió su mano.

Luego de titubear un momento -eh oh si si perdón y-yo yo soy Linda Krumm- lo dijo y enseguida tomo la mano de Roberto y se le quedo viendo... definitivamente se quedo ensimismada en el hermoso azul de sus ojos.

Por la derecha dando una vuelta entró Hiraga al pasillo -Listo Roberto perdón por la - vio la escena un momento y luego se acercó -espera-

Roberto volteo a ver a Hiraga sin soltar a Linda, pero ella seguía viendo a Roberto.

-Eh? Señorita... señorita- como ella no le ponía atención volvió a llamarla pero esta vez puso su mano en su hombro.

-Eh?- ella reaccionó luego de el leve tacto de Hiraga -pe-perdón que qué pasa?- dijo esta vez mirando a Hiraga.

-Bueno... está bien?- dijo Hiraga -que hace aquí?-

-Este yo.. a si mm? Oh perdón- soltó la mano de Roberto - si yo le traje el desayuno y la medicina a Ryota, bueno ya que está usted aquí no quiere pasar a ayudarme?- dijo con una sonrisa.

-Por supuesto!- dijo Hiraga emocionado y abrió la puerta.

-Oh usted no va a entrar?- se dirigió a Roberto.

-No, está bien, creo que ustedes lo pueden manejar muy bien yo daré una pequeña vuelta-

Hiraga observó un momento a Roberto -de acuerdo- y después volvió su atención al interior de la habitación.

-Buenos días Ryota!- lo dijo bastante animada.

-Buenos días Linda, buenos días hermano que gusto poder verte tan temprano! Pero... que sucede? esta vez no vino Roberto contigo?-

Linda se impresionó un poco -Eh? te agrada Roberto.... Ryota?- dijo con una adorable sonrisa.

Hiraga se le quedo viendo con cara seria pero en seguida reaccionó con la voz de Ryota.

-Si, el es muy amable conmigo y más importante aún, con mi hermano!-

-Que dices Ryota? Jjejej Roberto es bueno con todos- dijo dedicándole una sonrisa un poco nerviosa.

-Ya veo, eso es bue- Antes de terminar fue interrumpida por Hiraga.

-Está bien Ryota Roberto fue a dar una vuelta mientras te daban tu medicina y terminas de comer él vendrá aquí pronto así que no te preocupes- dijo mientras suavemente acariciaba el cabello de Ryota.

-Si, tranquilo... bien ya termine asegúrese de que se termine todo, volveré en un momento a llevarme lo demás, con permiso- y así salió de la habitación.

Un momento después entró Roberto, pasó un buen rato hasta que fue el momento de volver a casa, cerca de la salida se encontraron con Linda.

-Oh perdón estuve muy ocupada y ya no pude subir... ahora mismo voy-

-Esta bien gracias señorita, con permiso- dijo pasando rápidamente entre Linda y Roberto.

Roberto sólo hizo un gesto acompañado de un bajo -con permiso-

Llegaron a casa, que era más bien un modesto hospedaje -Ryota se ve bastante bien, me alegra mucho, porque eso también te deja más tranquilo, eso me gusta...-

-Ahh si- dijo Hiraga con aire pensativo.

-Oh disculparme esto ya casi está- Dijo con una sonrisa mirando a Hiraga, pero este no lo estaba viendo.

-Mmm Hiraga?- dijo un poco dudoso.

-Mmm que?- volteo despacio a verlo.

-Estabas escuchándome?- dijo con una cara disgustada.

-Ahhh si, si Ryota el... está mejor... - Dijo forzando una sonrisa -Esa enfermera hace un... un buen trabajo...-

-Oh... te refieres a Linda? Si creo que su nombre le va bien si es tan buena con todos sus pacientes- Jajaja

Hiraga se sobresaltó un poco -T-Tu sabes su nombre?- dijo un tanto disgustado, Roberto iba a hablar pero Hiraga lo interrumpió -Pero ella no dijo su nombre... bueno Ryota lo dijo pero tú no estabas ahí y no pudiste escuchar desde afuera porque fuiste a dar una vuelta... - de un momento a otro parecía que Hiraga estaba hablando solo -pero en la mañana ustedes... claro...-

-Hiraga, que estás diciendo?- Ahora fue Roberto el que lo interrumpió.

-Tu hablaste con esa chica- dijo viendo a Roberto.

-Si nos presentamos en la mañana justo antes de que llegaras, es una buena chica, parece simpática- Dijo Roberto mientras servía la comida.

-Jummm si... una buena chica- dijo un poco irónico mientras se recargaba en la mesa.

-Aquí está- dijo poniendo el plato frente a Hiraga.

-Wow esto se ve delicioso- -...- En sus pensamientos sólo pudo decir una cosa... Roberto podía ponerlo de buenas pero... para empezar por qué estaba enojado?

Las circunstancias que despiertan sentimientos (RobertoxHiraga) VKCDonde viven las historias. Descúbrelo ahora