Prólogo

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El pequeño rizado tenía aún lágrimas en sus pequeños ojos de tan sólo doce años, el aire hacía que sus rulos rubios dé movieran, mientras que el pequeño moreno de nueve lo  abrazaba. Ambos lloraban en sielencio.

Aquel rubio que abrazaba al moreno, era Ashton Fletcher Irwin, un Alfa de doce años, su padre había muerto hace algunos días, su madre había decidido, que lo mejor era dejar Sídney, he ir a Estados Unidos, no queria perder ha su otra persona favorita, no queria perder al moreno, su pequeño niño de mejillas regordetas, que lo único que hacia era decir cosas extremadamente infantiles. Su padre estaba muerto, al parecer lo habían encontrado muerto, aunque no sabían las causas, el tenía que aceptarlo,así como también el que su madre quisiera irse, el debía preocuparse más por ella, ya que podía caer en depresión, sus padres tenían un lazo, esto podía llevar a su madre, hasta el que ella intentase, quitarse la vida, no la queria perder.

El pequeño de nueve años es Calum Thomas Hood,  había conocido a Ashton en el mismo parque en el que estaban, se habían hecho más  cercanos, ambos estaban seguros que se atraían, aunque siempre el menor se la pasara sólo, en ese parque,  sus padres siempre estaban de viaje, ellos querían un hijo Alfa, pero su hijo mayor no lo era, siempre lo evitaban, incluso lo excluían.

—Ashy.—El pequeño de nueve años, lo miro a los ojos.—No quiero que te vayas, quiero que estés aquí.

—Yo también Calum, prometo volver.
—El mayor veía a su pequeño, sabía  que el era su pareja destinada. Estaba demasiado atraido hacia el menor.—Y tu y yo nos casaremos y viviremos felices por siempre.

—¿Lo prometes?.—Preguntó el menor con sus mejillas rojas.—¿Por el meñique?

—Por el meñique.—Contesto el mayor, envolviendo su meñique junto  con el del menor.—Prometo rescatarte de aquí mi princesa.

—Te quiero Príncipe.—Calum tenía sus mejillas rojas y se había acercado más a Ashton.—Ashy...

—¿Si bebé?.—El rubio aún tenía sus brazos alrededor de la cintura del moreno.

—¿P-puedo b-besarte?.—El omega tenía las mejillas rojas cual tomate, había bajado la mirada.

—Eres adorable bebé, claro que puedes besarme.

El alfa había tomado las mejillas de su pequeño , acercandolo más  y más besando dulce y cortamente los labios del moreno.

Una extraña sensación en sus estómagos dé había hecho presente.
Aún tenían los ojos cerrados.

—Ashy.—El mayor abrió los ojos.—Quiero más  besitos.—Murmuró el menor.

—Ven aquí cariño.—El ruloso había palmeado sus piernas, el pequeño de nueve asintió con las mejillas rojas, haciendo lo que el rubio le había dicho.
El menor dejó su pequeña carita el hueco del cuello de Ashton, dejando cortos besitos.

—Tengo que ir a casa bebé.—Dijo Ashton aún abrazado al moreno.—Bebé.

—Un minuto más.—Dijo el menor en sus brazos.—Quiero aún tenerte cerca mío, por unos momentos más, mañana te irás.

—Okay.—El mayor suspiro.—Mañana nos despidiremos, jamás  me olvidaría de ti.

—No quiero que  lo hasgas jamás.—El moreno se había separado del regazo del menor, sus ojos volvieron a cristalizarse.—N-no quiero.

—No no no, bebé, mirame.—Ashton había abrazado al menor —Otra vez—, volveré , te dejaré mi pulsera.
—El mayor se había quitado una hermosa pulsera negra con algunos colores amarillos y la había puesto en la muñeca del menor.

King And King》 CashtonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora