Semidioses y mortales

La pareja perfecta

☇Jasper☇

Amy pov.

Me llamo Amy y tengo dieciseis. Hace poco empecé a trabajar en un café para conseguir algo de dinero. Era muy aburrido y monótono. La verdad lo sigue siendo, ya que sigo trabajando aquí. Pero un día captó mi atención ÉL.

Era perfecto: guapo, alto, atlético, rubio y de ojos azules. Estaba metiendo el dinero en la caja registradora cuando le vi. Si hubiera estado bebiendo agua, creo que la habría escupido. Se acercó a mi y con una sonrisa me pidió amablemente una Pepsi.

-Lo siento, no tenemos Pepsi, pero si Coca Cola -respondí también sonriendo e intentando no perderme en sus bonitos ojos.

-Oh, pues entonces ponme un Kas de naranja.

Estaba un poco extrañada, ya que ambas bebidas saben igual, pero le di su Kas. Le dije el precio y me pagó lo que costaba.

-Gracias -dijo sonriéndome mientras se dirigía a una mesa.

-De nada.

Menos mal que no tartamudeé. Creo que fue amor a primera vista. Me di cuenta de que el chico misterioso tenía una cicatriz en la parte superior del labio. ¿Se la habría hecho en alguna pelea defendiendo a alguien, tipo película?

Unos diez minutos después entró una chica de pelo moreno, mal cortado, con trencitas, plumas y de ojos caleidoscópicos. Se notaba que no se preocupaba por su ropa y no llevaba maquillaje, aun así estaba preciosa. Cuando se acercó a mí albergaba la esperanza de que tuviera algún grano, pero no. De cerca era incluso más guapa. Me sentí como un trozo de mierda al lado de una Top Model.

-Hey, ¿me pones una Coca Cola, por favor?

-Claro -dije intentando no ponerme borde. Era una clienta. Además, por que fuera guapa no significaba que tuviera que tratarla mal. No se lo merecía.

Le dí la Coca Cola, pagó y para mi sorpresa se dirigió a la mesa del guapísimo chico de ojos azul cielo. Alcancé a escuchar lo que decían.

-¡Hola, Jason! -saludó la morena.

-¡Piper! Has tardado, ¿dónde estabas?

-Pues da la casualidad de que me secuestraron unos extraterrestres para estudiar mi cerebro. Dijeron que era un espécimen más desarrollado que tú -contestó sarcásticamente Piper.

-Ja, ja. Has estado demasiado tiempo con Leo -dijo poniendo los ojos en blanco pero sonriendo ligéramente -. Ahora en serio, ¿has tenido algún problema?

-Nada que no haya podido matar con mi daga.

¿Matar? ¿Daga? ¿Qué?

-Piper... -dijo Jason con el ceño fruncido por la preocupación.

-Jason... -contestó imitandole.

-Piper -le habló molesto.

-¿Jason? -preguntó con una sonrisa inocente.

¿Amy? Vale no.

-¿En serio, Piper?

-¿En serio, Jason?

-Que madura -fue ahora su turno de usar el sarcasmo.

-Madurar es para frutas -contestó la Top Model bebiendo un sorbo de su Coca Cola.

Debo reconocer que en el interior de mi mente estaba sonando "Turn down for what", pero no me iba a poner a cantarla. Quedaría como una loca meticona, aunque creo que es lo que soy.

-¿Pero estás bien, no? ¿Te han hecho daño?

¿Quiénes?

-Cálmate, Chispitas. Estoy bien -contestó sonriendo tranquilizadoramente.

¿Qué clase de apodo es ese? ¿Será que alguna vez metió un dedo en un enchufe y le pegó un calambre? No lo digo por esperiencia ni nada...

-De acuerdo -cedió Jason rejándose un poco. Entonces se fijó en la bebida de su acompañante-. ¿En serio, Coca Cola?

-Tú serás romano, pero yo soy griega y prefiero Coca Cola a Pepsi -dijo Piper riéndose.

¿Matar? ¿Daga? ¿Romano? ¿Griega? ¿Qué? Demasiadas preguntas, me iba a explotar la cabeza. Menuda pareja más rara. Un momento... ¿Eran pareja?

-Como tú digas, Reina de la Belleza -contestó el rubio sonriendo divertido.

-Tú también has pasado demasiado tiempo con Leo -dijo riendose y Jason se unió a ella.

¿Quién es ese famoso Leo? Si es tan sexy como ellos dos quiero que me lo presenten.

Y así pasaron toda la tarde: hablando, riendo y besandose. La primera vez que se besaron sí que estaba bebiendo agua y, por si os lo preguntais, sí, la escupí. Bastante gente se quedó mirandome, pero ellos no parecieron darse cuenta ya que estaban un poco ocupados ahogandose con la saliva del otro. Me dio un poco de rabia porque me habría gustado estar con ese chico, pero se veían bien juntos. Eran tal para cual. Ojala algún día encuentre a alguien que me quiera como se quieren ellos dos.