Si recibiste esta invitación, considérate súper afortunado,
tu miserable vida dejará de serlo por al menos una noche.
Soy Mindy Curly; eso obviamente ya lo sabías.
Es lógico que alguien tan linda y popular como yo, esté en boca de todos.Has sido bendecido por los Dioses y tenido el gran privilegio de ser un invitado de mi gran y fabulosa fiesta de cumpleaños.
Por un día, sal de tu asquerosa casa y preséntate en el gimnasio de la escuela preparatoria Colton Hills.
La celebración se llevará a cabo el día 17 de abril del presente año, a las 9:30 pm,
y si no sabes qué día, revisa tu calendario, flojo.Fin de mi comunicado, espero... ¡No!, te exijo pongas tu fea cara en mi fiesta.
XOXO, Mindy.
¡Mwah, mwah!
Lápiz labial, bálsamo y más.
Frunce los labios y mira hacia atrás.El condado de Colton Hills, donde cualquier persona podría tener una vida pacífica, era diminuto. Estaba alejado de la ciudad, donde el ajetreo de las personas y el ruido de los coches, no sería problema para un habitante del lugar. Con una reducida población y un cálido ambiente, nadie podría quejarse de vivir ahí. Y por si eso fuera poco, hacía años que se cometían crímenes mayores en ese lugar. Tanta era la tranquilidad, que el número de empleados de la comisaría se redujo en más del 50%.
Pronto la invitación de Mindy comenzó a circular por todo el condado. Su fiesta era el tema de hablar de todo el mundo. ¡No era para menos! Sería la más grande celebración que se habría hecho en la historia de Colton Hills. Mentiría si les dijese que no hubo un enorme conflicto ante semejante festejo. Los alumnos de secundaria y grados inferiores se mostraban furiosos con Mindy. El mismo día que las invitaciones fueron repartidas, tenían un poco de mentira en ellas. No todos podrían considerarse "afortunados y bendecidos por los Dioses", ya que solo alumnos de preparatoria fueron invitados.
Hubo una revuelca contra los padres de Mindy. Todo el mundo quería ser partícipe de tan gran festividad. Aunque el condado fuese pequeño, no habría lugar para que cupieran todos los habitantes en una fiesta. Mucho menos en el gimnasio. Que además de contar con una capacidad máxima de 500 personas, no habría uno que otro que quisiera colarse al evento. De tal modo que la excéntrica y extravagante Mindy, no podría moverse a sus anchas a gusto. Y cuidado con eso, que una diva furiosa, es peor que el mismísimo diablo.
Los días fueron pasando. Uno a uno hasta que el día llegó. Pero, para ese entonces: el pueblo era un caos. Nada podía calmar a las personas. Parecían completamente fuera de lugar. Sus actitudes imprudentes e infantiles contra la familia Curly, habían llegado a los extremos. Tanto, que un par de días antes de la fecha, pensaban cancelar la festividad. Reacios ante esa decisión, no se conformaban con ello; exigían ser parte de los invitados de la fiesta. Y ahora, ya no solamente eran estudiantes. No. Adultos y niños se les habían sumado al pequeño levantamiento que habían hecho. Suena absurdo que por una simple fiesta la gente estuviera fuera de sus cabales. Pero, para una persona en un condado tan pequeño, sin ningún rastro de extravagancia, una gran y excéntrica fiesta, era como llegar al paraíso.
Los padres de Mindy habían cambiado muchísimas veces de planes, pero nada parecía convencer a los irreconocibles habitantes de Colton Hills. No fue hasta un día antes de la fiesta, que al señor Curly se le ocurrió una gran idea. La cual consistía en que, todo mundo sería invitado, por supuesto. La fiesta se llevaría a cabo en un campo, que era más grande que todo el condado. Éste, se encontraba cruzando los muelles por un camino estrecho entre dos inmensas montañas. El lugar era perfecto, porque en ese entonces, no pertenecía a nadie. Claro que semejante belleza, tendría una condición. Para el señor Curly, la más adecuada fue: ser elegido próximo-alcalde-del-condado-de-Colton-Hills. Todos habían estallado ante semejante barbaridad. Para la señora Curly, sería espléndido. Pasaría de ser una pueblerina con riqueza limitada, a nada más y nada menos que: la-esposa-del-alcalde-del-condado. Bien dicen que de tal palo tal astilla, Mindy y su madre eran exactamente iguales. Igual de egocéntricas, igual de mezquinas, pero sobretodo, igual de venenosas.
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The Shadow Of Crime
Mystery / ThrillerEl simple hecho de no asistir a una fiesta superficial, puede hacerte sospechoso de la muerte de una joven. Ese día, fue la fiesta de Mindy Curly, quién festejaba su décimo séptimo cumpleaños. Entre discusiones, revuelcas y levantamientos por parte...