Un dulce té

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Como regla de etiqueta social, los Takashi no pudieron  evitar que los Higurashi invitaran a los Taisho a la fiesta.

Ese día, Inuyasha se encontraba en un  maldito kimono tradicional gris, odiaba esas cosas, pero no podía faltar a la vestimenta de ese día. Si ver  a Kagome significaba usar eso, se vestiría así todos los días.

La mansión Higurashi, era contraria a la Takashi, se notaba el gusto exquisito, se notaba que la señora Higurashi invirtió tiempo y dinero para que su casa mostrara lujo sin rayar en lo excesivo.

Al entrar, sus padres se dirigieron a saludar a los Higurashi, los padres de Kagome eran buenas personas, no sabia que vieron en Hoyo para ella.

- Inuno, Izayoi, Inuyasha ¡es un placer contar con su presencia!- exclamo Kamui

- el gusto es nuestro, se ve que están felices por el regreso de Kagome- dijo Inuno cordial

- si, fue una bendición que ella volviera-

- pero no creen que es pronto para casarla, la acaban de tener de vuelta y la perderán- dijo Izayoi

- bueno la verdad es que lo pensamos y al principio pensamos, eso, no queríamos presionarla, ya habíamos aceptado eso, pero de pronto ella cambio de opinión y hemos decidido apoyarla en todo, además..-

Naomi no termino de hablar cuando los Takashi llegaron. Se notaba la mirada que Tsubaki dirigía a Inuyasha, ella no aceptaba que el estubiera cerca de Kagome.

Por su parte Suikotsu se veía indiferente, parecía que ese hombre no tenia sangre en las venas

- Inuno, Izayoi, Inuyasha es un gusto verlos- saludo el patriarca Takashi, indiferente como siempre

- vaya, veo que Inuyasha viene solo, creo que ya esta en edad de casarse y sentar cabeza, debería ser mas responsable, además un soltero siempre crea escándalos, o no Inuyasha- dijo la víbora de Tsubaki

- para tu información, nuestro hijo ha cambiado, además, dejamos que ellos decidan no imponemos a la fuerza- contraatacó Izayoi

- bueno, bueno, calmemonos, este no es momento de decir esas cosas- trato de relajarlas Naomi

- tienes razón, estamos aquí para celebrar a mi futura nuera, es grato ver que nuestros hijos, creen una de las mejores fusiones de empresa y familia- rió Tsubaki

Los Taisho y Higurashi decidieron no continuar con la conversación, todos sabían que Tsubaki siempre era así, pomposa y presumida, pero se tendrían que aguantar.

De pronto la pareja bajaba por la escalera, Hoyo venia con un kimono negro, los ojos de Inuyasha se posaron en Kagome se veía hermosa.

El kimono tenía rayas verticales rosas, el obi rojo, su cabello recogido, sus rizos caían alrededor y flores de cerezo adornando su cabeza. Se veía como una muñeca de porcelana.

Una tierna, hermosa y perfecta muñeca de porcelana fina.

Como siempre los Higurashi eran los mejores anfitriones, Kagome era idéntica a sus padres, no eran presumidos y trataban a los invitados  muy bien, Kagome de pronto llego a donde estaban los Taisho y ofreció un poco de té, al estar cerca de Inuyasha el le susurro un "necesitamos hablar", ella no le dijo nada y se fue.

Se sintió decepcionado, se dirigía al baño cuando una sirvienta lo jaló

- ¡que le pasa!- exclamo enojado
- no tenemos mucho tiempo, solo sera un momento, la señorita Kagome lo espera en su recámara- dijo ella llevándolo a la parte trasera de la mansión - suba por esta escalera y vera una ventana abierta es la de la señorita-

- gracias- dijo Inuyasha subiendo

- no hay de que, no tarden mucho- dijo Ayumi guiñándole el ojo.

Inuyasha trepo hasta que dio con la ventana abierta, al entrar el olor del cuarto lo hizo sentir en las nubes. El cuarto perfectamente decorado en tonalidades pasteles, lo que mas llamo la atención, fueron las fotos de la pared, todas de Kagome, desde una de bebe en brazos de su madre, una practicando equitación, en ballet y una grande en brazos de un joven de su misma edad.

- es Sota fue la ultima foto que nos tomamos- dijo Kagome sacándolo de su sitio - bien que me querías decir-

- te ves hermosa-

- Inuyasha-

- perdón, lo olvidaba, creo que Sota fue asesinado para llegar a ti- dijo el neutro

- que dices, ¿tienes pruebas?-
- si, pero los testigos están muertos, creo que fue Hoyo, los únicos que podrían corroborarlo están muertos-

Ella se derrumbo en sus brazos y lloró

- entonces mi hermano murió por mi culpa- hipeó ella

- no Kagome, no fue tu culpa, pero obtendremos lo necesario para encerrar al culpable, pero para eso necesitó que obtengas los registros de pagos de esos nombres y unas cuantas cosas más- dijo él

- esta bien, pero tu también cuidate, Hoyo te vigila-

- no le tengo miedo-

- por favor Inuyasha, no estaré tranquila, si se que estas en peligro-

- sabes que te amo, además, se que tu también
- Inuyasha ¿de que hablas?-

- se que te casabas con Hoyo por que mi familia no quedara en la ruina-

- tenia que hacerlo, no permitiría que sufrieras-

- me lastimas más, estando separados-
dijo el para acercarse y besarla, ya no lo resistía, por su parte Kagome al principio se resistió pero comprendió que no podía ocultarlo más

- te amo Inu- dijo ella para hacer que el chico llorara de felicidad

- hermosa,no sabes como he deseado escuchar eso- dijo para continuar besándola

las caricias empezaron a subir de tono, las manos de ambos empezaron a recorrer sus cuerpos,las de Kagome recorrían la espalda de Inuyasha mientras que las de el, gracias al kimono que usaba ella, subían por su muslo, se fueron recostando en la cama mientras la observaba tenia los labios hinchados y las mejillas teñidas de un lindo rubor, de pronto, la voz de Ayumi y Hoyo se escuchó por el pasillo y Kagome se apuro a meter a Inuyasha en su armario, desde adentro Inuyasha escuchó como Ayumi le decía a Hoyo que la señorita se sintió mal y decidió descansar un poco, Hoyo no parecía convencido pero al final tuvo que marcharse, asistido por Ayumi.

- Inuyasha debes irte prometo buscar las cosas, mañana cenaremos en casa de Hoyo y los encontrare, prometo marcarte en cuanto los tenga-

- te amo- dijo el besándola

- yo también, prometo que ya nada nos separara- lo besó rápido y lo hizo bajar la escalera, espero un rato cuando sus padres subieron para avisarle que despedirían a los invitados ellos, para que ella descansara y asintió.

Más tarde, su teléfono sonó, era un mensaje de Inuyasha deseándole buenas noches, suspiro enamorada, cuando una llamada entró

-Kagome tus sospechas son ciertas, hay alguien tras de él y creemos que es Hoyo-

- gracias Jack nos mantendremos en contacto, pero necesitó saber que investigues un par de nombres y que tuvieron que ver en la muerte de mi hermano-

- esta bien Banky, San y Koga mandan saludos, te extrañamos-

- yo tambien- dijo para cortar la llamada. El día siguiente seria agitado y nesesitaba pruebas, el asesinato de su hermano no quedaria impune.

Mientras en la mansion Takashi

El hombre veia a travez de la ventana la luna, en su mano tenia una foto de su amada azabache

- pronto mi hermosa Kagome estaremos juntos y nadie interferira, ya una vez elimine a los estorbos, solo queda Inuyasha y por fin serás, solo mía rió él hombre



Kien es el hombre?
Jakotsu es kien ayuda a kagome.
Ya falta poco para el final.

Gracias por leer.

Unidos por un cambioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora