Mi Primer Amor ~•Destiel•~

1.

Dean:

Yo solo quería que Castiel Novak me dejara en paz. Todo comenzó en el verano del 57, antes de empezar el segundo año.

– ya llegamos –dijo mi padre mientras se estacionaba frente a nuestra nueva casa, la cual tenia un aspecto un tanto lujoso, desde fuera se notaba que el lugar era espacioso. No estaba mal. baje del auto dispuesto a entrar cuando mi papá me llamo.

– oye Dean, ¿por qué no me ayudas a bajar las cosas?.

– claro –le respondí entusiasmado entrando al camión de mudanzas. Pero para mi, ese solo fue el comienzo de mas de media década de estrategias de evasión e incomodidad social.

– Hola soy Castiel Novak –entro al camión un chico de cabello castaño y ojos azules mientras tomaba una de las cajas mas cercanas sin permiso, lo que irrito a papá.

– oye, ¿qué estas haciendo? –dijo mi padre con un claro tono de molestia.

– ¿no quiere ayuda? –menciono con amabilidad y un deje de curiosidad mientras ladeaba la cabeza.

– no –le respondió papá cortante– ahí hay cosas valiosas.
En cuanto dijo eso, Castiel soltó la caja para tomar otra mas pequeña.

– no, no, no, no, no –negó mi papa alterado– ¿por qué no te vas a tu casa?, tu mamá debe estar muy preocupada.

– no, sabe donde estoy, ella me dio permiso.

No tarde en darme cuenta de que él no entendía indirectas.

– tres personas aquí son demasiadas –respondió mi papá aun intentando que aquel chico se fuera.

–no me molesta –dijo el con ingenuidad.

No entendía ninguna indirecta.

– ¿empujamos esta juntos? –Castiel me miro señalando la caja, se agacho y antes de que pudiera siquiera tocarla papá puso un pie sobre esta.

– Dean ¿no deberías ir a ayudar a tu madre? –papá me miró.

– ¿eh? –le respondí confundido, ¿acaso no quería que le ayudara a bajar las cosas?, en cuanto vio mi reacción mi papá me guiño el ojo y entendí inmediatamente– ¡oh! Claro –respondí siguiéndole la corriente.
Baje del camión, Castiel siguiéndome por detrás mientras me jaloneaba un brazo y yo trababa de quitarmelo de encima.
El era imparable, iba a decirle que se largara cuando sucedió la cosa más extraña. En un movimiento nuestras manos terminaron unidas. No podía creerlo estaba tomado de la mano con este extraño niño ¿cómo termine así?

– vaya, veo que ya conociste a mi hijo –interrumpio mi mamá sonriendo.

– aja –respondió Castiel sin tener la mínima intención de soltar mi mano, entonces, hice lo único masculino que podía haber hecho a la corta edad de siete años. Como pude me solté de su agarre y corrí hasta esconderme detrás de Mamá.
Sin embargo, mis problemas no habían terminado allí. En cuanto entre a la clase de la maestra Yelson...

– ¡¿Dean?! –escuche esa voz que ahora tenía tan presente en mi cabeza: Cas gritándome y eso no fue lo peor, él me abrazo provocando la burla de todo el salón. Estaba claro que la escuela no iba a ser un refugio.
Estaba marcado de por vida, provocando que cada estudiante de la primaria hiciera estúpidas preguntas como: "Dean, ¿y tu novio?" u "oye Dean, ¿cuando se van a casar?" y jamas falto esa terrible canción: "Dean y Castiel sentados en un árbol, besándose en la boca ¡si señor!".
Mi primer año en el pueblo fue un desastre y los tres siguientes no mejoraron, pero finalmente en sexto grado, decidí actuar, tenía un plan.

– ¡Lisa! –caminé a la entrada de la escuela tratando de alcanzar a Lisa, una chica de cabello negro muy bonita– ¡Lisa espera!.

– hola Dean –se detuvo volteandome a ver mientras sonreía.

Invite a Lisa Braeden a salir a ver una película. Para apreciar lo brillante de mi plan deben entender que Castiel siempre odio a Lisa Braeden. Nunca entendí por qué, era linda, amigable y...tenia mucho cabello.
La idea era que Lisa almorzaría conmigo, tal vez caminaríamos y con suerte Castiel perdería el interés.
Mi plan parecía ir muy bien hasta que mi supuesto mejor amigo, Crowley se intereso en ella también. La lealtad cedió ante el deseo y el traidor de Crowley le contó a Lisa lo que planeaba, no se lo tomo bien porque me dio una bofetada sin piedad llamándome "cretino".
Castiel se entero de todo y muy pronto volvió a verme con esos ojos, pero ahora era peor, empezó a olfatearme  ¿por qué hacia eso?. Mi único consuelo era que el siguiente año iba a ser diferente, la secundaria, escuela mas grande, tal vez nos iba a tocar en salones diferentes y finalmente se terminaría.

¡Hola pequeñas criaturas de Chuck!
Este fanfic en realidad ya lo tenia hasta publicado pero no me gusto mucho como estaba siendo redactado así que lo borre para poderle hacer algunas mejoras.
Si llegan a ver que Castiel esta descrito como una mujer pueden decirme y yo haré esa corrección.