Rebelión ||Enigma 2 Temporada || Narry || Zouis|| AU||CANCELADA/NO LA CONTINUARÉ

Capítulo 2: Negocios y placer

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Liam no quería hablar ni saber nada de Scott.

Así había sido durante toda la semana.  Estaba fuera de sí respecto a él. 

Había querido irse, romper el contrato, hacer de todo pero Britt le había convencido de que pensase en su bienestar y de que cuando todo estuviese más tranquilo, se parase a escuchar a Scott.

Sin embargo acababa de encontrárselo frente a frente en la cocina de la casa.

-Liam...

-No.  No, no.  No quiero hablarte...

-Liam.

-Niall está otra vez en manos de esos hijos de puta.  Tú tenías en tus manos evitarlo... de hecho... pudiste salvar a más sum.

-Joder, Liam, yo... traté de salvarle. 

-No lo trataste con mucha fuerza.

-Yo también tengo muchos ojos puestos sobre mí.  Tengo amenazas, tengo espías, para mí tampoco es fácil.

-Es como mi hermano.

-Liam...

-No.

Scott se frotó la cara.  Todo apestaba.

Esa tarde se había citado con Louis y esperaba que también fuese Harry.  Iba a hablar con los abogados que le habían ayudado a tramitar los papeles de Liam y Zayn. 

-Ven conmigo.  Por favor.

-Estoy tratando de liberar a mi sum.

-Harry -Louis le apretó el hombro – Ven conmigo.  Vamos a hablar con una persona que puede ayudarnos.

Harry esperaba un despacho de abogados.  No esperaba la oficina de un alto cargo del gobierno, uno de los encargados del Ministerio de Familia, y dos abogados a su lado.

-Scott me ha hablado de su caso -el subsecretario del Ministerio de Familia le dio la mano – No le voy a mentir, es complicado pero posible.

-Pagare lo que haga falta -dijo Harry.

-Estupendo porque voy a tener que pagar muchos sobornos  -le respondió el hombre.  – pero necesito pruebas de su relación.

-Nosotros somos testigos -dijo Scott.

-¿Algún otro testigo?  Van a solicitar una entrevista.  Además Horan tiene un tipo sobre el, obsesionado.

-Hay un doctor.  Nos conoció como sum y dom.  La chica de la farmacia que nos vende los anticonceptivos.  El joyero donde compre el anillo...

-Quiero el teléfono de todos.  Y esto. 

Escribió una cifra vergonzosamente alta en un papel. 

-Se lo ingresaré en cuenta hoy mismo -dijo Harry.

-Haré todo para que tenga a su sum consigo para el final de la semana.

Louis llegó a casa y dejó sus llaves y su teléfono.

Si el club no podía abrir... no sabía que hacer.  Sus ahorros no durarían siempre.

Abrió el cajón donde guardaba la marihuana.  Abrió el váter y la echó toda.  Tiro de la cadena.

-Gracias a Dios -dijo entonces Zayn.

Louis le miró con una sonrisa nerviosa.

Zayn se acercó para besarle.

-Me gustaría ser completamente tu sum.

Louis le levantó y le sujetó con la fuerza de sus brazos.

-Y yo ser tú dom.

-Hazme tuyo.

Harry estuvo visitando a las personas que podían dar fe de que Niall era su sum.  Su otro abogado, las personas que le habían visto junto a Niall.

Era difícil caminar por la calle.  Estaba llena de gente y había muchos enfrentamientos.  La mayoría de las tiendas estaban cerradas y con falta de suministros.

Mientras, el gobierno trataba de poner parches reprimiendo las protestas callejeras.

Y Harry, como cada día, iba a la peor zona de la ciudad, detenía su coche y se quedaba mirando el centro número 3, donde estaba su hombre.

De donde iba a sacarle.

Louis estaba decidido.

No había más dudas.  No había más esperas, no había nada más que el presente, él y Zayn en ese apartamento. 

Zayn era su anclaje a la vida en esos momentos. 

Se acostó sobre el cuerpo de Zayn, en la cama.  Ambos vestidos.

-Zayn, la noche que te emborrachaste...

-Lo sé.  Lo recordé después, lo que me hiciste... y llevo desde entonces deseando más.  Mucho más. 

-Dios... me vuelves loco.   Apareciste en mi vida como un regalo y no se como agradecerlo...

-Estoy un poco nervioso.

-La verdad... yo también.

-Tú has hecho esto muchas veces...

-Nunca contigo.  Nunca por amor. 

Zayn gimió cuando Louis volvió a besarle el cuello, mientras le desnudaba para revelar su cuerpo delgado y ansioso.

Ambos cuerpos se enredaron, frotándose y acariciándose.  Zayn suspiró. 

-Tenemos que usar preservativo.  No estás tomando anticonceptivos. Y quiero hacerme pruebas para asegurarme de que estoy sano del todo.

-Me cuidas mucho.

-Eres demasiado valioso como para no hacerlo. 

Zayn jadeó.  Louis le había quitado ya toda la ropa y se sentía extraño y vulnerable pero también excitado.  Su respiración se hizo entrecortada cuando Louis acarició con la mano la base de su pene.  Le masturbó delicadamente, subiendo y bajando su mano, masajeandole hasta que su sum estaba tan excitado como para no necesitar más preparación.

Se colocó el preservativo y con los dedos untados de lubricante acarició introduciendo el gel en el estrecho y virgen pasaje de su hombre.

Le colocó de lado y entró muy despacio, dando leves empujones, abriéndole para él.  Suspiró y Zayn gimió.

-Sigue.

-¿Te duele?

-Muy poco.  Sigue.

Louis se metió del todo y se movió.  Zayn gimió y con el siguiente empujón se desencadenó su orgasmo.

Louis se salió y se frotó contra su espalda hasta correrse.

Zayn cerró los ojos, respirando suavemente. 

Estaba dormido.

-Te amo...

-Te amo -respondió Zayn sin abrir los ojos.

Y eso era todo lo que importaba en ese momento.