One of Them

Donde me Encuentro

Estaba allí.

A las afueras de lo que suponía ser una ciudad o pueblo viejo por los restos de roca o quizás cemento en forma de bloque dispersos a su alrededor, donde a lo lejos se podian distinguir arboles altos de lo que parecían ser parte de un bosque.

Eran las altas horas de la mañana. Lo sabia por la cantidad de la espesa nieblilla que lo rodeaba, la cual era común que se formara en ese horario, no lo entendia por algún conocimiento sobre meteorología o geografía. Aunque, todos sabemos que en los biomas  como estos, los bosques, presentan características como estas, o al menos el tío Luke lo entendería.

Estaba sentado en medio de un descampado, no tenia ninguna posesión mas que las prendas con las que la noche anterior iba dormir. Además de eso, solo contaba con la esperanza de que acabe de una vez por todas.

Eran pesadillas.

Siempre las mismas. Generalmente similares, sin contar ciertos minúsculos detalles que variaban.

De vez en cuando cambiaban las estaciones del año. Por lo que su paradero era mas cálido o a veces mas frío, cada vez mas de día ya que el verano se acercaba o de noche si era invierno. Pero aun así, era todo similar.  Tanto la posición de su cuerpo, desde sus pies hasta la forma en la que su desprolijo pelo estaba enmarañado. Como la sensación de todos y sus sentidos se ponian alerta al oir como los gritos de su tío se acercaban a su posición hasta que llegaban a el, suplicándole a una bestia para que esta que dejase de lastimarlo, y no poder siquiera mover un simple musculo para ayudarlo.

Lo siempre se modificaban eran las ultimas palabras de su, difunto tío. A veces acababa con palabras de apoyo, para lo que según este afirmaba que "se vendría ". O advertencias, sobre su vida futura o lo que el destino tiene para el.  Aunque esas palabras de apoyo nunca le venían mal, su tío aun no había acertado en cuanto sus advertencias. Ya que, al dia siguiente simplemente un mísero detalle cambiaba su ordinaria rutina. Por lo que aquellas advertencias eran casi insignificantes para la vida de Thomas, o al menos es lo que el cree por ahora.

Desde aquel, "ataque animal"  que su tío Luke sufrió, acabando con su vida. Todo al rededor de Thomas dio un giro de 360°, desde su casa por las obvias razones de perder un ser querido, hasta si mismo. Se sentía distinto, todo para el había cambiado, o esa era su sensación: que alguna parte de el se había transformado, gracias a aquel suceso reciente. El sentimiento de perdida aún cesaba, ni siquiera luego de las vacaciones de verano.

Dos semanas habían pasado, Thomas volvería a retomar la rutina escolar luego del receso. Solo que esta segunda mitad de semestre debia afrontarla sin quien le ofreia su tutela como una buena herramienta para el estudio de vez en cuando.

Aunque tenga a sus personas amadas a su alrededor, familia amigos, sentía que alguien/algo faltaba, y que ese algo o quizas alguien le iba a ser, a partir de lo sucedido, indespensable.

Pero ese, probablemente, alguien no resultaba ser Luke, ya que, ya hace un buen periodo de tiempo este le faltaba, incluso antes de su muerte este se habia distanciado casi por completo de toda relación familiar. 

Con su pesadilla finalizada, las advertencias de su tío dadas. Miedo corriendo por sus venas, desperación justo frente a el, y una agitada respiración provocando que su cuerpo se manifieste en forma de bruscos, y ahora frecuentes escalofrios gracias a el sudor que siente como lo rodeaba tal como una capa invisible unida a su piel.

Thomas, con gran pesadez abre sus ojos, sintiendo como si un camión de unas cuatro toneladas le pasó por ensima, una otra, y otra vez. O como si acabara de de despertar junto a el famoso precio de una "gran" noche de fiesta y alcohol: resaca y un monton de cansancio corporal. Si bien, a menudo le sucedia eso de despertarse con sensación de clima helado por sudar en frio o sintiendo su cuerpo pesado y tosco sin mucha capacidad de movimiento, sin contar su rapidas respiraciones.