capitulo 12 El primero de nuestro clan: Uchiha Itachi

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Ya habían pasado tres meses desde la boda de Sasuke y Sakura, en ese tiempo ambos chicos tuvieron su luna de miel, para desgracia de Sasuke solo duro un mes. También todos se mudaron a la casa principal del barrio Uchiha la cual ya estaba muy bien arreglada y pintada, Sakura logro convencer (N/A: más bien fue por medio de amenazas) a los demás para que los dejaran vivir solos, así que a regañadientes los demás se mudaron a otras de las casas del barrio (que Sasuke les había dado y dejado escoger la que quisieran con tal de que no vivieran con ellos), el pelinegro estaba muy contento al saber que ya no viviría con esos gorrones, pero la felicidad se le fue al ver que los muy malditos escogieron las casas cercanas (Yuun, Shiki, Yumi y Juugo se mudaron a la casa de lado derecho de la de Sakura y Sasuke, esa casa la escogió Shiki gracias a las sugerencias de Yuun, Suigetsu y Karin decidieron vivir juntos y escogieron la casa de lado izquierdo del matrimonio Uchiha).

Aunque Yumi viviera en otra casa aun así seguía preparándole la comida a todos y los seguía atendiendo ya que Sakura jamás había entrado a la cocina para cocinar y la única vez que lo intento exploto la cocina de la casa donde vivían antes y casi los envenena con la comida, y Karin era casi igual de mala que Sakura para cocinar así que la castaña para evitar envenenamientos decidió seguir atendiéndolos, así que prácticamente todos iban a la casa de Yumi parea que los alimentara. También en ese tiempo Yumi y Juugo se hicieron novios aunque eran mucho más reservados que Suigetsu y Karin, ya que a este par le encanta exhibirse como pareja de la misma forma que Sakura y Sasuke (N/A: ósea que mantenían una relación muy fogosa o.O)

Por otro lado Sakura ya estaba por cumplir los nueve meses, en cualquier momento daría a luz y Sasuke estaba al pendiente de ella, de hecho no la dejaba sola ni para ir al baño, y no solo Sasuke la seguía a todos lados sobreprotegiéndola y estando al pendiente de ella si no que también Naruto, Suigetsu, Shiki, Yuun, Yumi e Ino... la peli-rosa estaba fastidiada de que la siguieran para todos lados, pero trataba de ignorarlos o a veces (por lo general siempre) les hacia bromas muy pesadas pero para su desgracias no dejaban de seguirla.

Era una tranquila mañana del viernes, los pájaros cantaba y alimentaban a sus crías, los niños iban a la academia, los ninjas hacían misiones, Tsunade se dormía sobre su escritorio y Shizune la despertaba, Jiraiya recolectaba información para sus libros en las aguas termales femeninas, Ebichu le hacía compañía a Jiraiya, Kakashi leí su icha icha, Lee y Gai recorrían por toda la aldea de manos mientras gritaba los fuertes que los hacia el poder de la juventud, ¡si todo normal y tranquilo en la aldea de Konoha! Sasuke estaba sentado tranquilamente en la cama de su recamara viendo televisión esperando que su hermosa esposita saliera de bañarse.

-¡SASUKE, ES HORA! – la peli-rosa salió exaltada del baño ya vestida y Sasuke rápidamente se puso de pie acercándose a la peli-rosa mirándola nervioso y exaltado. -¡Recuerda lo que dijo Tsunade Saku! ¡tu respira hondo y suéltalo, yo me encargare de llevarte al hospital, tu solo dedícate a respirar y a pujar! –hablo de forma rápida y exaltada mientras la tomaba de los hombros y la miraba asustado. A Sakura le salió una gota de sudor en la nuca y sus ojos se convirtieron en puntitos. -Sasuke. –llamo suavemente. -¡Sé que te duele Saku, pero todo pasara, yo estaré a tu lado! –seguía diciendo exaltado sin dejar de agitarla levemente de los hombros y a Sakura le dio un tic nervioso en la comisura de su boca. -Sasuke. –volvió a llamarlo solo que esta vez subió el tono de su voz un poco. -¡¡Vamos Saku, respira hondo! –Sasuke respiro hondo mirando a Sakura y después soltó el aire, lo volvió hacer haciendo que sus mejillas se inflaran y lo soltó de golpe, el tic nervios de Sakura se hacía cada vez más notorio. -¡¡SASUKE!! –el pelinegro ante tremendo grito reacciono y la miro interrogante. –no voy a dar a luz Sasuke. –explico fastidiada y el pelinegro la miro mas extrañado. -Entonces ¿de qué es hora?

Renazcamos Nuestros ClanesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora