Relato 8 /ruta Secreta / Una Primera Vez

863 53 49
                                    

Las cosas no eran tan fáciles como me gustaría, la pila de libros llegaba hasta el techo y los papeles tapizaban la habilitación, despeinado mi cabello con evidente frustración, quería terminar lo más pronto posible y correr al castillo, pero si quería ese título tan esperado, necesitaba dejar huella en este reino.

Tiendo a actuar con confianza pero la realidad es que me sentía preocupado, mi posición se sentía amenazada por dos personas, no, tres en realidad.

Por qué Si, a pesar de volver en el tiempo para seguir al amor de mi vida, de pelear hasta la muerte por acabar con mi propio padre y rescribir mi propia historia, sigo estando en el cuerpo de un joven inseguro y hormonal.

El primer problema se trataba de un joven príncipe, un porte llamativo, modales, un caballero que se ganaba fácilmente el cariño de las personas su alrededor, a pesar de ser el prometido de la loca de Chara, podía percibir esas miradas que dirígia a la princesa heredera, así es, Asriel estaba interesado en Frisk, MI Frisk.

Parece que no importa que se rescriben las líneas de tiempo, algunas cosas no cambian del todo, mi princesa me asegura que no piensa irse con el, que esta firme en su desicion de estar conmigo, eso hace latir mi corazón con fuerza y recupera mi confianza, pero en el fondo se que ella aun lo observa desde lejos con un brillo de nostalgia en sus ojos, ve en el a aquel príncipe que sacrifico su vida por ella, este chico era una persona completamente diferente, por todas las vivencias que te definen, ese príncipe que tanto la amo ahora estaba muerto.

Los años transcurridos de manera pacífica gracias a la muerte de mi padre hacen que viviéramos en una ruta tan diferente que las cosas se salen un poco de nuestro control.

Lo más notorio, el plan del Rey Clio de juntar a su hija Frisk con su consejero más joven, ese niñato rubio lleno de ego, no puedo creer que el Rey contemple la idea de darle el título de heredero a un chico con nombre de flor.

Y el es el tercer problema en mi vida, nunca pense que no le agradaría al Rey, ahora la situación es diferente, antes nuestro principal problema era mi padre pero parece que nuestro problema ahora era el suyo.

Solté un largo suspiro y apoye de un golpe mi frente contra un libro en mi escritorio, ya estaba acostumbrado de nuevo a ese cosquilleo en mi piel al cual llamamos dolor, casi me parecía iré al pensar que durante mi otra vida fui un esqueleto.

Creo que ese sería otro problema a mencionar, lo primero que sentí cuando entré a mi cuerpo de niño con mi conciencia anterior, fue la sensación del frío, el calor, el hambre y el cansancio, el fuerte latino que sentí cuando vi a Frisk de nuevo y pude abrazarla, incluso llegué a pensar que mi corazón se saldría de mi pecho.

Ahora mi problema es volver a vivir una juventud normal, los cambios de emociones solo pueden ser culpa de mi sistema hormonal, los celos son aun más intensos que antes, el dolor de verla sonreírle a ese príncipe es aún peor que antes y las ganas de enterrarle una espada en el cuello cuando el se sonroja y le regresa la sonrisa son incontrolables.

De nuevo levantó mi cabeza y la dejó caer con fuerza, una, dos, tres veces más, tenía que sacar esos pensamientos de mi cabeza, por que no solo son los pensamientos de odio a mis enemigos, en realidad mi mayor y más grande problema es resistirme a los encantos de Frisk.

El tiempo le favorece rápidamente, pronto se parece más a esa hermosa señorita con la que estaba casado, un matrimonio que jamás fue consumado, por que jamás me atrevería a tocarla siendo un esqueleto, no existía mucho que pudiera hacer para complacerla después de todo.

Mentiría si dijera que algunas ideas creativas no pasaron por mi cabeza en aquel entonces pero mi orgullo de hombre y falta de confianza me impedían llevarlas a cabo sin un cuerpo completo.

Ragnartale historias extraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora