—Hoseok, acompáñame y agarra tu mochila, nos vamos de aquí, no sé que pueda pasar si nos quedamos mucho tiempo afuera —Jiwoo caminó hacia el carro, abrió la cajuela, agarró las mochilas y le entregó una a su hermano.
—Jiwoo-nonna, deberíamos entrar al hospital para ver si se encuentran mamá y papá... —susurró el menor viendo con temor el bosque que se encontraba a lado de ellos, no se veía muy confiable; ya era algo tarde por lo que ya se veía oscuro y se podían escuchar ciertos sonidos inquietantes. Sin duda era más confiable entrar a un lugar con luz, pensó Hoseok nervioso.
—Hoseokie, es peligro entrar ahí, ¿Qué tal si hay de esas cosas que había en la calle? —no muy convencida la mayor tomo la correa de su mochila y la ajusto viendo con desconfianza la entrada del hospital, había la posibilidad de que sus padres sí se encontraran ahí pero también podrían encontrar algo desagradable y no se permitiría arriesgar a su hermanito.
—B-bueno... Aunque sea deberíamos revisar si hay medicina, puede ser útil —la mayor considero ahora esa propuesta y suspiro rendida.
—Está bien, pero no te apartes de mí, ¿De acuerdo? —Jiwoo agarro una tabla con clavos que convenientemente se encontraba cerca de su pie y se acercó a la puerta de la entrada al hospital.
—De acuerdo, nonna —el menor le sonrió dulcemente y se colocó atrás de ella, miró a través del cristal que los separaba del edificio, notó que las luces parpadeaban, eso le causo algo de desconfianza pero no se podía retractar.
Jiwoo miró por última vez al menor detrás de ella, respiró intentando tranquilizarse y abrió la puerta con delicadeza, le hizo una señal de espera a Hoseok y entró al hospital con cuidado, al ver que la recepción era segura dejó entrar a Hoseok. En cuanto ingresaron lo primero que pudieron notar era que todo estaba en completo silencio, el lugar estaba un poco desordenado pero nada alarmante, solo las sillas y unas cuantas manchas de dudosa procedencia, la mayor caminó hacia la barra de recepción para revisar si había algo útil para ellos, entre los papeles y documentos encontró algunas aspirinas, fósforos y lo que más la sorprendió, había una pistola pequeña escondida en un cajón junto a una foto de una pareja y al lado una caja con sus respectivas balas.
—Hoseok, ¿Puedes venir un momento?, necesitó que metas esto en tu mochila —en cuanto el menor escucho la voz de Jiwoo dejó de observar las luces y fue rápidamente a donde se encontraba la chica, se dio la vuelta y se quedó estático esperando a que metiera lo que fuera que tenía en las manos la mayor.
Jiwoo metió todo lo que encontró excepto la pistola a la mochila del menor, exploraron toda la recepción y después fueron a una habitación, pero sucedió algo que no se esperaban; se encontraba un señor de al menos unos 60 años tirado en medio del piso desangrándose mientras hacía unos ruidos algo extraños.
—¡Debemos ayudarlo, nonna! —Hoseok iba a pasar para socorrer al señor desangrado pero Jiwoo lo detuvo y lo llevo afuera de la habitación, la mayor cerró con delicadeza la puerta y después se inclinó para estar a la altura de su hermano, lo miró algo dudosa pero al final se dignó a hablar.
—Hobi... Quiero que te quedes aquí y no te muevas, en caso de que sea necesario quiero que te escondas. Yo iré a ver si el señor se encuentra bien pero quiero que no te metas, por favor no te muevas, no me tardaré mucho —después de decirle eso, la mayor besó dulcemente la frente del menor e ingresó a la habitación y entre cerro la puerta. Hoseok miró la puerta, a los pocos segundos suspiró aburrido y se fue a sentar a unas sillas que se encontraban a su lado.
—Jiwoo-nonna se está tardando demasiado... Ya pasaron siete minutos, buah, estoy aburrido... —susurró para sí mismo el menor, miró su reloj y ya marcaba las 19:47, miró con un puchero la puerta y se levantó de la silla, caminó hacia la ventana pero un estruendoso ruido lo detuvo haciéndolo saltar y dar un pequeño grito, se asustó e inmediatamente se volvió a sentar, le habían dado ganas de llorar.
—¿Qué demonios fue eso?, Hobi, ¿Estás bien? —Jiwoo salió alarmada, al ver al menor sentado y temblando levemente corrió hacia él y lo abrazo, Hoseok la miró feliz pero su sonrisa se esfumó cunado vio que había sangre en la camisa de la mayor, el miedo que apenas unos segundos se había ido regreso de forma brusca.
—Estoy bien... N-Nonna... ¿P-Por qué tienes sangre en tu camisa?, ¿Qué pasó adentro? —preguntó asustado el chico viendo la cara de la mayor, ella rio algo nerviosa y miró a otro evitando la mirada que le daba su hermano.
—Sobre eso... el señor me quería atacar pero logré evitarlo, estoy bien, no hay nada de que preocuparse, vamo-... —Jiwoo no logró terminar la oración, ya que una explosión mucho más fuerte y cerca que la anterior había caído. Los hermanos por inercia se abrazaron con miedo intentando calmarse, al pasar algunos minutos se separaron y suspiraron agotados.
—T-Tenemos que irnos de aquí, Hoseokie. Registraremos una última habitación y nos saldremos por la ventana por si hay alguien en la recepción —tomó la mano del menor caminaron unos cuantos pasos hasta que se detuvieron en una puerta que se encontraba totalmente abierta.
Entraron con cautela y revisaron por encima si había alguien ahí, al ver que estaba completamente vacío cerraron la puerta y con más tranquilidad se centraron en buscar cosas útiles, Hoseok se encargaba de buscar cosas que les sirvieran en un futuro y Jiwoo de buscar provisiones y medicamentos que les pudieran servir o alguna arma, al cabo de veinte minutos ya habían terminado de inspeccionar toda la habitación, abrieron una ventana y salieron con mucho cuidado, al estar afuera pudieron notar de inmediato el frío clima pero a lo lejos se observaba una luz que podría llegar a cegar si la veías lo suficiente cerca, por precaución se fueron al lado contrario que era en donde se encontraba el bosque.
Cuando estuvieron un poco lejos del hospital unas personas los empezaron a seguir, al principio los hermanos creyeron que era normal, aunque al ver que ya llevaban tiempo siguiéndolos decidieron pararse para hablar con ellos no obstante al estar más cerca notaron que sus ropas y caras estaban cubiertos de sangre y que emitían unos ruidos raro, eso alteró a los hermanos y empezaron a correr alterados sin alguna dirección especifica.
—N-No creó que podamos escapar de aquí, nonna —susurró desesperanzado el menor cansado y a punto de llorar, ya que no podía correr, sus piernas ya no soportaban ni un paso más.
—Tranquilo Hoseokkie todo estará bien solo sigue corriendo, ¿sí? —murmuró frustrada Jiwoo intentando darle ánimos a su pequeño hermano, le sonrió con cansancio.
—E-Está bien nonna —dijo Hoseok intentando sonreír como siempre y siguió corriendo junto a su hermana.
Fin del flashback
Hola~, sé que actualizo de forma muy lenta pero espero que les guste el capítulo. Si hay faltas de ortografía no duden en corregirme, byebye~ ^^♡
![](https://img.wattpad.com/cover/125799114-288-k329152.jpg)
ESTÁS LEYENDO
WAR OF ZOMBIE
FanfictionHoseok es un pequeño de 12 años que vivía pacíficamente con su familia hasta que un día sus padres llegan manchados de sangre y diciendo que la gente había enloquecido y tenían que marcharse de ahí Hoseok bottom BTSxHoseok