The Finn's sister | jack grazer.

« s o r r y »

Me quería marchar de ese estúpido parque. Era lo que deseaba.

Pero wyatt me lo negó.

– ¿Dejarás que lo logre? – arqueó una ceja.

– ¿qué? – pregunté confundida.

– Estás dejando que Ellie cumpla su plan; estás logrando que se lleve a jack de nuestras vidas. No solo tu vida, la nuestra – pausó. – ¿dejarás que lo logre? – repitió.

– p-pero si nosotros..

- ¡A la mierda el plan de ayuda! – me interrumpió. – a la mierda fingir esto para que él sea feliz, ¿por qué el puede ser feliz y tú no? es injusto. Él no merece esa felicidad, no si no eres tú la que está a su lado.

Limpié las lágrimas derramadas y respiré hondo.

– y.. ¿que quieres que haga? – le pregunté con timidez.

Jamás creí que Wyatt sería el primer hombre en darme un consejo.

– Yo tengo un plan –sonrió.

(...)

Yo y Wyatt hacíamos la fila para la rueda de la fortuna y como mala-fortuna atrás de nosotros estaba Jack y Ellie. Ellie habla y habla diciendo estupideces.

¡Ay, que coincidencia! jajaja

Muérete luego.

Cuando llego nuestro turno también pasó Ellie y Jack. Yo me iba a un carrito azul y ellos al que estaba atrás, cuándo miré a atrás mío Wyatt se había salido de la fila distrayendo a Ellie.

Jack se subió conmigo, yo rápidamente me puse en pie para irme de aquí pero jack me agarró de la cintura haciendo que me siente.

Wyatt te odio.

Incómoda, me volví a sentar. Me orillé viendo como el suelo quedaba cada vez más lejos. Mordí mi labio nerviosa, ¿de que diablos hablaremos? ¿cuantas nubes hay? pf

– Te vas a herir – habló. Arqueé una ceja confundida. – Tu labio, lo romperás.

como tú rompiste mi corazón jaja

– oh, está bien – susurré dejando de morder mi labio.

Nos mantuvimos en un silencio incómodo hasta llegar a la cima, el juego se había trabado.

Les juro que deje de respirar.

VOY A MORIR, MAMI.

Miré a abajo asustada y me encontré con un Wyatt alzando los pulgares y una Ellie hechando humo por las orejas.

– Vanessa, ven – pidió jack algo tímido.

Si no fueras tan idiota me lanzaría a comerte, dios santo.

– Ya sé que tramas, ¿que quieres oír, jack? – agachó su cabeza apenado.

– perdóname..

LO DICES UNA VEZ MÁS Y QUEDAS SIN HIJOS.

– ¿por qué?

– por todo – murmuró. – y por esto.

Juntó rápidamente nuestros labios, puse una mano en su pecho alejándolo rápidamente.

Díganme tonta, pero se sintió bien sentir sus labios un segundo.

– eres un idiota – solté. no se lo dije como en broma como cuando le decía así finn, se lo dije con toda la sinceridad. – realmente lo eres – susurré.