death lover

Haciendo el amor

—Eres tan hermoso —jadeó Wang Yeo

—No —respondió Kim Shin

— Tú si que eres impresionante — Wang Yeo deslizó sus manos bajo la camiseta de Kim Shin, arrastrándola hasta la altura de los pezones.

—¿Necesitas que te toque? —jadeó Wang Yeo —Vamos a quitarnos la ropa, cariño.

Wang Yeo prácticamente arrancó la camiseta, mientras que Kim Shin miraba los movimientos de su amante, a regañadientes separó sus dedos de la suave piel de Wang Yeo para desenganchar el resto de los botones de sus pantalones. 

El miembro de Kim Shin saltó de su encierro desafiando la gravedad mientras bajaba los ajustados jeans sobre las caderas hacia sus tobillos.

Wang Yeo se detuvo mientras se desnudaba y miró a El miembro de Kim Shin con una expresión agradecida en su hermoso rostro

—me encanta y no puedo esperar a que esté en mi boca —la voz de Wang Yeo era áspera y oscura con el deseo.

Mientras el gran hombre acercaba , Kim Shin dio un paso alrededor de él y se recostó en la cama con sus piernas abiertas. Su corazón latía frenéticamente dentro de su pecho.

—Ven aquí —jadeó Kim Shin . Levantando su mano libre hacia Wang Yeo y haciéndole señas para que se acercara.

Desde los pies de la cama, Wang Yeo movió sus manos y rodillas para acoplarse sobre el cuerpo de Kim Shin como un elegante jaguar acercándose a su presa. Sus ojos oscuros brillaban con pasión, mientras recorrían lentamente toda la silueta de su joven amante mientras su guardián se acoplaba hasta que su cuerpo se cernió sobre él.

Se inclinó y comenzó a delinear los labios de Kim Shin con su lengua. Él deslizó su lengua fuera y comenzaron a explorar lúdicamente sus lenguas fuera de sus bocas. Necesitando más, Kim Shin tiró de Wang Yeo hacia él. Desesperadamente quería sentir el cuerpo desnudo del gran hombre presionándolo contra sí mismo.

Wang Yeo se alejó de su boca y meneó la cabeza

— todavía no, mi amor... sé paciente —la profunda voz de su guardián sonó como una seductora alabanza y Kim Shin se sintió estremecer con las palabras de su amante y el sonido de la misma. Wang Yeo descendió sobre su cuerpo. 

Él gimió cuando su amante le dio a cada pezón un suave toque. A continuación, chupó uno con su boca, tirando fuerte de él, moviéndolo hacia atrás y adelante contra de endurecida punta de su lengua húmeda.

 Con ambas manos, Kim Shin cogió la sábana a los lados de él y la apretó para evitar el acaparamiento de su amante mientras hacía el amor con él en ese momento. Wang Yeo liberó su enrojecido y sensible pezón, lamiendo su camino hacia abajo hasta el estómago de Kim Shin continuó hacia la base del eje. Wang Yeo entonces se acercó y remplazó a su húmeda boca por un firme agarre de su mano.

Kim Shin vio a Wang Yeo lamerse los labios justo antes de que él pusiera su boca sobre el húmedo miembro y le dio una fuerte lamida. La succión de la caliente boca de Wang Yeo llevó a Kim Shin rápidamente a su orgasmo.

Kim Shin apartó las manos de la sábana, colocándolas en la parte superior de la húmeda y sedosa cabeza de Wang Yeo , guiando la boca de su amante en un ritmo más rápido de lo que su mente pudiera alcanzar

— Wang Yeo ... —le advirtió antes de expulsar chorro tras chorro de su semen en la caliente boca de su amante.

Kim Shin sintió que la boca de Wang Yeo se contrajo un poco mientras tragaba su semen. Él liberó suavemente su pene y lo miró con una apasionada intensidad que hizo que su polla se llenara de nuevo por la pasión