Saint Seiya: Legend Of Axelia [Libro 1]

Capitulo 2: Los jóvenes, una presentación poco casual

Ya era receso y me encontraba en el dilema, un rico emparedado o una rebanada de pizza.

— ¿Alguien sabe por que todo mundo esta fuera de la cafetería?.— Me interrumpió Mili

— Casualidad...— Dijo Vincent

Me decidí por una rebanada de pizza, la tomé con una mano y la coloqué sobre mi plato.

— ¿Podemos ir a ver?.— Pidió Mili

— Chismosa.— Lanzó Vincent tomando una manzana.

— Soy curiosa, es todo.— Dijo Mili

— Bien, me pongo en el lugar de Mili, vamos.— Dije comenzando a caminar en dirección a la salida de la cafetería.

— Serán chismosas. — Exclamó Vincent y nos dirigimos afuera

Caminamos hasta llegar la cancha de fútbol con las bandejas en mano, nos hicimos espacio entre la gente que estaba por los alrededores siendo que también algunos tenían sus bandejas entre sus manos. Cuando llegamos a el frente de la cancha, de nuevo me llegaron esos escalofríos.

Dos chicos de la mansión se encontraban jugando, el peli-verde y  ese tal Seiya.

El peli-verde corría con el balón a toda velocidad, luego realiza un pase largo a Chris, este se burla a dos chicos y al ver que viene un tercer chico pasa el balón a Seiya, este a unos metros de la portería, sin temor a fallar patea el balón con bastante fuerza y logra entrar a la red.

Todos comenzaron a gritar y aplaudir, unas chicas suspiraban al ver a el peliverde y otras solo miraban a los demás que aún permanecían en la cancha.

— ¿Tanto alboroto para esto?.— Se quejó Vincent alejándose unos pasos.

— ¿Celos?.— Se burló Mili.

— Te han quitado la popularidad, capitán.— Me burlé.

— No importa preciosa, ya veremos por quién suspiran las linduras en el partido del viernes.— Después de eso pasó una mano por encima de mi hombro.

Mili y yo nos reímos y en ese momento, Seiya voltea a verme de nuevo, después mira a Vincent y niega con la cabeza... Esperen, ¿Negó con la cabeza?,¿Por que?.

Después se va con su amigo peliverde para reunirse con los otros dos chicos.

— ¿Ya nos podemos ir?, Muero de hambre. — Habla Vincent.

— ¡O Dios mío!— Exclamó Mili

— ¿Que?.

— Sigue biología, ¿No?

— Si.— Contesté

— Olvidé su ensayo, mierda.

— Mili...Date por muerta. — Le dije siendo sincera comenzado a caminar de regreso a la cafetería.

— Bien, debo irme lindas, me toca Español...— Dijo Vincent tomando la manzana entre sus manos y dejando la bandeja en la entrada de la cafetería, justamente encima del compartimiento de basura.

— ¿Y?.

— La profesora Harris.— Contestó.

— Ya dile que si.

— Muy graciosa... Pero si, es linda...y joven.— Dijo Vincent bromeando y se fue.

— ¿Crees que si me voy corriendo a la biblioteca lo termine?.— Dijo Mili refiriéndose a el ensayo.

— Con suerte, dí que terminas la introducción.— Respondí tomando la rebanada de pizza y dandole una mordida para después dejarla en el mismo compartimiento.

Después de eso se fue corriendo y yo me dirigí a la cafetería de nuevo, pero escuche algunas voces por los vestidores de hombres, terminé mi rebanada de pizza y me escondí detrás de un árbol para ver y escuchar:

— ¿Como pueden jugar fútbol en momentos como este?.— Preguntó enfadado un chico de cabello largo, estaba de espaldas.

— Cálmate Shiryu, fue para relajarnos un poco.

Seiya estaba frente a él, trataba de calmar a ese tal Shiryu.

— ¿Quieren dejar sus juegos y poner atención?.— Habló un tercer chico, era rubio y tenía ojos azules... Estaba de pie a un lado de Seiya.

— No es para tanto, Hyoga.— Aquel peliverde del partido que anteriormente ví posaba a un lado del de cabello largo, también dándome la espalda.

— ¿Enserio Shun?, ¿Quieres que te recuerde lo que esta en juego?.— Habló Shiryu.

— Les informo que esta conversación ya no es privada.— Dijo Hyoga

Después de eso ya no escuché nada, pues me escondí un poco mas entre el árbol con nervios.

¿Me descubrieron?.

— Oye tu pelirroja, ya puedes salir de ahí...— Hyoga me habló. Ay no.

— Sabemos que estas ahí escuchando.

Me paralice.

— Por lo menos dejen que salga antes de asustarla. — Reconocí aquella voz, se trataba de Seiya.

Poco a poco salí detrás del árbol y los pude ver a los cuatro con mucha vergüenza en mi rostro.

De nuevo, Seiya no me quitaba su mirada, eso me causaba escalofríos.

— ¿Que hacías allí?.— Preguntó Shiryu.

— Contesta.— Amenazó Hyoga

— Y-yo... – Buen momento para ponerte nerviosa, Aileen.– P-pasaba por aquí... Iba a mis clases de biología.

Y en cierto modo era verdad, esa era mi siguiente clase.

El timbre sonó, me he salvado.

— Bueno... Me despido, un gusto conocerlos, espero se sientan cómodos aquí, bienvenidos, sayonara.— Dije y rápidamente me largue de allí.