Si tu me amaras

Capítulo 5

No pude aguantar las lágrimas, leer ese mensaje de jhon me puso aún peor, sólo quería que estuviera aquí y me dijera que todo estaría bien.

Lloraba Cómo una niña, quería que todo se arreglara, escuché unos pasos y por un momento pensé que. ... quien se acercaba era una enfermera,

-usted es Alice woldy?

-Sí, dije luego de soltar un sollozo

- hay un señor buscandola, creo que dijo que su nombre era jhon.

Me pare enseguida y salí a buscarlo, peleaba con la chica de recepción, le he dicho que necesito pasar a verla.
Corrí hacia el y le abracé por detrás;
Pero me derrumbe.

- Alice porque simplemente no me dijiste que pasaba? Hubiera llegado antes, y me hubiera ahorrado ir a todos los hospitales del pueblo.

-Es que.. Las lágrimas no me dejaban hablar, el limpiaba mi rostro y besaba mi frente. Tranquila todo estará bien.

-Alice dónde estás? Se escuchaba la voz de una loca voceando. Estoy aquí
-Era mi fiel amiga yani.

-Lo siento no pude llegar antes. Les traje algo de comer. Ya mandé a tu hermana a la casa tu también vete a descansan yo me quedaré a cuidar a mamá.

Yani había crecido con nosotras y era como si fuera parte de la familia.

Por más que reuse a irme ellos me obligaron a que me fuera a la casa a descansar.

-yo te llevaré dijo jhon muy serio.
quise negarme a que me llevara pero no me sentía bien para conducir
Así que tuve que aceptar.

Mi cansancio era tanto que tan pronto nos montamos Me quedé dormida en el auto.

~Jhon

-Era maravilloso verla dormir
A pesar de sus ojeras y su cara roja
Tenía una cara angelical.
No había notado un sexy lunar que tenia cerca de los labios; El cual me invitaba a una sola cosa, a besarla
Pero sabía que no podía hacerlo.

Llegamos a su casa y no quise despertarla. Me las ingenie para abrir la puerta aún con Alice en brazos.
Estaba tan rendida que ni se despertó
Busque la llave en su cartera, y entré camine con cuidado pues todo estaba oscuro.
la llevé a su cuarto, Supuse era el de ella pues era el único que estaba vacío.
La acosté, le quite los zapatos y la cubrí con una manta.

Me deleite unos minutos mirando su cara y por supuesto la hermosa figura que tenia Alice.

Miré mi reloj y era tarde hubiera podido amanecer viéndola dormir pero debía marcharme.

Cuando ya me iba escuche que unos pasos que me seguían, era la hermana de Alice me dio las gracias por traer a su hermana, platicamos un poco, pero pronto nos despedimos y me fui.