Interrogó el rubio a Hoseok. Luego de haber huído de la casa que compartía con Yoongi, este se había ido con uno de sus amigos más "cercanos".
—¡No Yugyeom! No estoy celoso de esa manera, solo qué... Conozco a Jin, conozco su historia y obviamente, conozco el daño que le hizo a Yoongi. Solo quiero protegerlo de ese ser tan malo.
El rubio soltó un pesado suspiro, no era la primera vez que Hoseok acudía a él cuando ocurría un problema con Yoongi pero si era la primera vez que vio tan irritado a Hoseok por una persona. Siempre consideró que en el pelinaranja no existía el mal y que éste solo se encargaba de repartir flores y amor.
Por eso la imagen de un Hoseok irritado nunca se le pasó por la mente.
—Deberías hablar con él, decirle que no vuelva a caer por ese chico. Que su atractivo solo es una farsa, pero Hoseok... -Hizo una pausa haciendo que el contrario abriera sus ojos como platos, no estaba listo para enfrentar lo siguiente. —Si ellos regresan; tienes que entenderlo y soportarlo. Tú lo aconsejaste, sí el hizo caso omiso a lo que le dijiste es muy su problema.
Hoseok entrecerró los ojos mientras su semblante se endurecía. Luego de unos minutos de un silencio incómodo, negó con su cabeza, no podía aceptar de nuevo esa relación tan tóxica.
No podía perder a Yoongi, de nuevo.
—Gracias por escucharme, Yugyeom. -Dicho esto, Hoseok se paró y se fue sin dejar que el rubio se despida de él.
Tenía un dolor en el pecho y el ceño fruncido, en la cabeza del pelinaranja miles de escenarios pasaban por su cabeza luego que abandonó la casa.
"De seguro se están besando."
"De seguro se están acostando."
Esos pensamientos hacían eco en su cabeza, mientras que la ira se apoderaba en él.
—No te saldrás con la tuya, Seokjin. Si tengo que matarte para que estés lejos de Yoongi, lo haré.
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"¿Dónde mierda estás Hoseok?"
Aunque le doliera admitir a Yoongi, el repentino cambió de humor del pelinaranja le preocupaba, más si su cambio se trataba de Seokjin.
—Car... Yoongi, es tarde, debes descansar. Él volverá a la casa, regresemos por favor.
El pelirosa le suplicaba a Yoongi, eran las 3 de la madrugada y estar deambulando por las calles no era una buena idea. Seokjin siempre le tuvo miedo a las películas de terror, y a las calles con poca luz aún cuando le gustaba correr riesgos, pero había un miedo especial que nunca podría superar; le tenía miedo a Yoongi.
—Jin Hyung, tengo que buscarlo. Por favor, solo un rato más. -Le dirigió una rápida mirada asustada a Jin, transmitiendo su pesar por su amigo perdido.
