Capítulo 5

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Hoy era sábado, día de relajación.

Estaba en mi cama leyendo cuando un mensaje de Caitlyn me despista.

"Paso a recogerte a las 8:30 ponte guapa vamos a una carrera no tardes pequeña zorra"

Sonreí.

"No creo que pueda ir" - le escribí.

"Si iras y también irá Rose y nada de contradicciones" - contestó.

Yo bufé.

Le mande un mensaje a Rose para decirle que se prepare conmigo.

-Cariño ya estoy en casa- grito mi padre desde la planta baja.

Yo mire la puerta.

-Es hora de comer - volvió a decir.

Yo baje las escaleras le di un beso en el cachete y me senté frente a él.

-Papa- dije, el me miro- como tenemos tanto dinero? - le pregunté y pude ver como se tensaba.

-Soy un empresario, y con los dos bares que tengo consigo dinero y eso sin contar con el alquiler de nuestra antigua casa- dijo el.

Yo asenti, parecía que lo tenía bien estudiado.

-Porque la pregunta? - me pregunto.

Yo hice un encogimiento de hombros.

-Te noto rara desde ayer- me dijo.

Yo hice una sonrisa.

-Estoy bien.

El asintió.

-Voy a llamar a John- menciono.

-Va a venir a las 5 a hablar unas cuantas cosas conmigo en mi despacho, te importaría estar con sus hijos? - yo lo mire.

-Te refieres a los de anoche - dije y el asintió- esta bien.

(...)

Tras la comida, me lave los dientes y me senté en mi cama para preparar la ropa que me pondría, después de haberla elegido me senté en mi cama y comencé a leer la historia que había intentado leer antes.

Después de tres capítulos y medio escucho el timbre, miro la hora y son las cinco menos cinco.

-Cloe! - oigo como grita mi padre.

Yo baje las escaleras y saludé a los tres.

Iba vestida con una sudadera y unos pantalones cortos.

Una vez que mis padres se fue al despacho junto con el señor Black yo me senté con ambos chicos en el salón.

- Que tal? - me pregunto Nicolás.

-Bien y vosotros?

-Bien - dijo Nicolás.

Su hermano se me quedo mirando fijamente.

Rose vendría a las 17:30 para ver pretty little liars ya que esa serie nos encantaba.

-Me aburro- dijo Nicolás.

Yo asenti.

-Quieren algo de beber? - dije yo.

Los dos me miraron.

-Alcohol no- aclare.

Nicolás esbozo una sonrisa y su hermano hizo el amago de esta.

-Cualquier refresco está bien - respondió el hermano de Nicolás y la verdad es que tenía la voz rasposa pero bastante sensual.

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