[Narra Yoongi]
Levanté con pereza, como siempre.
Me dirigí al baño que se encontraba al lado de mi habitación, mientras caminaba/arrastraba, escuché unas voces en la sala, reconocí a dos de ellas, mis padres pero había otra voz, era la voz de una chica.
No le tome mucha importancia y seguí mi camino al baño.
Al terminar de ducharme y lavarme regresé a mi habitación a cambiarme, cuando terminé bajé al encuentro con mis padres.
Al llegar los vi, estaban conversando con una chica parecía de mi edad, pero no la conocía, nunca en mi vida la había visto.
— ¡Oh! Yoongi que bueno que despertaste— saludo mi padre — ven siéntate, tenemos que hablar— golpeteó el asiento libre al lado de él. Tenemos que hablar esa frase no me da buena espina.
— ¿Sobre que?— pregunté sentándome donde me pidió mientras lo miraba dudoso y con algo de miedo.
— Hijo ya estás grande, es momento de que empieces a salir, ya sabes, con chicas — trague duro— quiero que conozcas a Minji, Kim Min Ji— no, no, no.
— Papá... no hagas esto, por ahora necesito concentrarme en mis estudios, esto de las salidas no es algo que yo quiera aún— susurré para que solo él pueda escucharme.
— Yoongi no seas descortés, saluda a Minji— me codeó mi padre.
— Hola, mi nombre es Yoongi, Min Yoongi— dije asiendo una pequeña reverencia en mi sitio.
Si, era descortés de mi parte, la tal Minji debía tener claro que yo no estaba interesado.
— Hola, soy Kim Minji, pero ya lo sabes— dijo sonriéndome.
— Chicos por qué no salen y dan un paseo, luego regresan para que coman con nosotros pero mientras salgan, disfruten de las calles de Seúl— ¿POR QUÉ?
¿¡POR QUÉ ESTABA HACIENDO ESTO!?
— Papá, yo aún no he desayunado— traté de evitar una incómoda salida.
— Minji tampoco ha desayunado, vayan a algún café y coman algo luego regresan— insistió.
— Pap-...—
— Nada Yoongi, vas a ir y punto— dijo audible solo para mí.
No tuve opción salí de mi departamento junto a Minji, esta sería una larga mañana.
[...]
Estaba aburrido, no podía negarlo Minji era bonita pero, era una molestia, su voz era chillona, era muy engreída, la detesto.
Estábamos en el centro comercial, pasamos por un establecimiento donde vendían discos de música, quería entrar, le dije a Minji y está rodó los ojos y siguió de frente haciendo caso omiso a lo que le dije.
Quise dejarla y que se vaya sola pero tenía que acompañarla debido a mi padre, la maldita ya me había amenazado con decirle todo lo que pasara a mi padre.
Estuvimos caminando por todo el centro comercial hasta que sentí un peso sobre mi brazo, Minji se estaba colgando cual mono de mi brazo.
— Ahora que te pasa— la mire extrañado.
— Yoongi vamos allá— señaló un puesto de maquillaje.
— Ve tu— me soltó y me miró levantando una ceja.
— ¿Que dirá tu padre sobre esto Yoongi?— dijo haciéndose la pensativa.
Gruñí. Maldita perra.