Internado De Vampiros Y Lobos *Terminada*

capitulo 3

Observé hacia fuera del Taxi y nos encontrábamos en medio del bosque.

¿A quién se le ocurre construir un Internado en medio de un bosque?

Miro hacia adelante y ahí se encontraba un edificio enorme de cuatro plantas.

Tenia un estacionamiento privado, supongo que para los profesores y un gran jardín.

Arriba de la puerta de entrada bastante grande tenía un cartel que decía "IDVYL".4

La verdad que pensé que iba a ser bastante feo el lugar, pero pensé demasiado mal.

El chico detiene el auto y se gira a mirarnos.

-¿Cuanto es?-pregunto buscando en mi mochila el dinero para pagarle.

-Diez dolares.6

Tomo mi cartera sacando el dinero y se lo entrego.

En ese momento veo que Kattia saca 0.5 dolares de su cartera y se los entrega.2

-De propina-le sonríe y el taxista le devuelve la sonrisa.

-Gracias chicas, fue un gusto viajar con ustedes-baja del Taxi, se dirige a la parte trasera y empieza a sacar nuestro equipaje.

-Es extremadamente sexy-susurra Kattia hacia mi.

-Si, es lindo.

Bajamos del Taxi y caminamos hasta él.

-¿Podrías darme tu número?... Por si necesito un taxista-le pide mi compañera de viaje.

El chico mira a Kattia con sorpresa, creo que no se esperaba eso.

-¡Kattia!-la regaño aguantandome la risa.

El chico sonríe y asiente con la cabeza.

-¿Me tendría que extrañar si recibo mensajes de un número desconocido que no sean para un taxi?-dice el chico sacando una tarjeta de su bolsillo trasero y entregandosela a Kattia, quien sonríe y se pone roja.

Río por lo bajo y gesticulo un "Eres de lo peor" hacia Kattia, recibiendo como respuesta una burla de parte de ella.

-Tal vez-dice al fin y el chico le sonríe nuevamente.

-Gracias...-lo miro para que me diga su nombre y al parecer entiende.

-Grayson.5

-Gracias Grayson.

-No hay de qué-sube al auto y enciende el motor.

Agarro mis maletas, al igual que Kattia y tomo de su brazo, ya que al parecer no iba a moverse de su lugar.

-Vamos Kat-le digo y ella al instante me mira y me sigue.

-¿Kat?-me pregunta con una sonrisa y una ceja arqueada.

-Si, un sobrenombre, lo pensé y me gustó ¿A ti no?-le pregunté mirandola.

La observo mirar hacia el Internado.

-Sí, me gusta-me dice y me sonríe sin mostrar los dientes.

Cuando por fin llegamos a la entrada del Internado, las puertas se abren y entramos sin pensarlo una vez más.

Estando dentro, una señora que aparentaba tener unos 30 años se nos acerca, es castaña oscura, de tez blanco pálido, alta y con unas curvas exelentes.

Cuando ya casi estaba a nuestro lado sonríe.

-Kattia, es un gusto poder tenerte una vez más como alumna este año-frunzo el ceño y miro a Kat sin entender nada. -Y usted señorita Bianca, es un gusto poder tener una alumna nueva en este año y esperamos poder tenerla en los que le quedan.