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Capítulo 2; "Oficialmente vivo en Canadá"

Alexandra;

Ya es lunes, y tengo la junta super hiper mega importante con el presidente de la otra compañía, honestamente jamás lo he visto en persona y además creo que no vive aquí en Canadá, lo único que sé es que se apellida Cooper, wuao cuánta información, pero bueno, los nervios siempre hacen hablar de más.
Hoy en la mañana pase a dejar al pequeño Ash al prescolar que está cerca de la empresa, todos los días de entresemana salgo a comer con el y lo llevo con mi mamá para que lo cuide en lo que yo salgo de aquí.
Manejo un rato por las calles transitadas de la ciudad hasta al fin llegar a mi empresa.
Estacionó el coche y voy hacia el elevador oprimo el último botón ya que mi oficina está hasta la cima.

-¡Disculpa!.-Veo que grita alguien mientras apresuradamente viene hacia aquí, paro el elevador ya que las puertas estaban por cerrarse.- Muchísimas gracias.-dice el, es un hombre muy guapo, y sus facciones son tan perfectas, ¡Dios mío! Se me alteran las hormonas.

-Mucho gusto, soy Dylan.-dice el hombre muy amable mientras extiende su mano para tomar la mía, al roce siento un toque eléctrico, ¿Qué carajos?.

-Mucho gusto, Alexandra, pero puedes decirme Alex si quieres.-le digo muy amablemente.

-Esta bien, Alex.-dice y extiende una hermosa y perfecta sonrisa que está para derretirse, por favor hormonas no me traicionen.
Le sonrió y él se baja, ¿Será que venga a buscar trabajo?, Vestía demasiado elegante, con mucho gusto lo contrato. Ok, ya ¡Cálmate Alexandra!.
Escucho el pitido indicándome que llegue a mi piso.

-Buenos días señorita Alex. La junta empieza en 10 minutos.-dice mi secretaria Alice.

-Asi Alice, muchas gracias por favor lleva los documentos de la junta que voy a ocupar y apóyame en poner todo en su lugar por favor.-le digo rápido, ya que creo que estoy retrasada de tiempo.- ¡Oh! Y Alice por favor puedes conseguirme un café con tres de azúcar y 2 de crema.-le digo rogando ya que como mi secretaria no es su deber traerme eso.

-Claro señorita en un momento se lo llevo.-dice y se va, entro a mi oficina y busco en mi laptop el documento que presentaremos para la exposición, esto tiene que quedar bien. Es importante esta negociación ya que si esto resulta como yo espero ambas empresas crecerán muy bien, el beneficio es para ambos y a decir verdad ninguno podemos decir que no, esto haría que contratemos mas personas y las empresas sean las mejores, a demás podría tener mas tiempo para Ash.

-Señorita, la están esperando.-dice la voz de Alice.

-De acuerdo, gracias.-le digo y agarro los documentos.

-Señorita, su café.- me dice mientras me entrega una taza humeante.

-Muchísimas gracias Alice, no se que haría sin ti.- le digo honestamente mientras me retiro. Espero que Andrew ya este ahí, no quisiera comenzar si el. atravieso el largo pasillo que lleva a la sala de juntas y veo a todos excepto a dos personas, al señor Cooper y al inepto de Andrew, genial que falta de profesionalismo paso y me dirijo a mi lugar habitual que es al frente de todos y a mis costados dos asientos vacíos, el de Cooper y Andrew..

-Buenos días, me temo que tendremos que empezar la junta.-digo mientras Alice pasa y reparte una carpeta a cada quien con documentos y el contrato.- Como sabrán, esta junta es para al fin poder formalizar el asociamiento de las empresas.-digo y tomo un poco de aire.- esto se hace con un fin de favorecer ambas empresas y apoyar el incremento de empleos, que benefician a todos, como verán en los documentos están las graficas de ambas empresas tanto como los números y las tazas de ingreso.-Esto se esta tornando interesante, estoy hablando por el señor Cooper y mi hermano, arreglando sus problemas. todas las personas presentes revisan los documentos atentamente mientras yo espero a contestar alguna pregunta o duda que tengan.

Ellos toman su tiempo y no los apresuro, tienen que ver bien todo y leer hasta lo mas mínimo para asegurarse de que no haya trampas o estafas, no me ofendo puesto que hasta el mejor de los empresarios pasan por esto, es cuestión de política. En cierta pate me da nostalgia estar aquí, sentada, en donde mi padre estuvo sentado. escucho la puerta abrirse y veo a mi hermano. terminando la junta juro que voy a matarlo.

-Disculpen la demora.-Dice disculpándose con todos y mirándome a mi.- Había mucho trafico.- mentiroso, mentiroso, mentiroso, eres un vil mentiroso, de seguro te quedaste dormido maldito desgraciado. el pasa y se sienta a mi lado derecho ya que ese es lugar, el me voltea a ver y lo estoy fulminando y matando con la mirada, el solo me sonríe tímidamente y pasa su vista a la carpeta y empieza a revisar los papeles. mas te vale Andrew. Llego uno falta uno, quien sabe donde esta Cooper, el debería estar aquí ya, es el presidente de su empresa y por ende tiene mayor responsabilidad aquí, pero bueno no soy quien para juzgar, de seguro tuvo alguna complicación, o que se yo.

Dylan;
Genial, se me hizo súper tarde para ir a la junta, ¿Lo peor? Que llegue a la empresa antes de que la junta empezera, pero me hablaron del prescolar de mi hija y agh, un caos. Veo el reloj que está en mi muñeca, son 9:25 la junta empezó hace veinticinco minutos. Estacionó lo más rápido que puedo el carro y me voy hacia el elevador. Marcó el último piso ya que ahí está la sala de juntas. Las puertas se abre y salgo apresuradamente, paso 3, 4, 5 puertas y al fin llegó, me acomodo la corbata e intento planchar mi ropa con las manos, me preparo para entrar y pedir disculpas y entonces... Escucho una voz, una voz tan suave pero a la vez tan firme, igual a la que escuché esta mañana. Decido entrar de una vez por todas y la veo, está ahí parada a espaldas de mi enseñando unas gráficas en la pantalla, es Alex la chica que me encontré hoy en el elevador, para ser sinceros pensé que la dueña de la empresa iba a ser una señora de unos 50 años, pero no, es ella.

-Buenos días, lamento demasiado la demora, tuve unas complicaciones en el camino.-me disculpo y paso a mi asiento que es al lado izquierdo de dónde está Alex.- mi nombre es Dylan.-digo y rectifico mi voz.- Dylan Cooper. En ese momento Alex se voltea a verme y puedo notar un brillo en sus ojos y algo de impresión.

-Tarde, señor Cooper.-dice y ella sería y se sienta. ¿Acaso es de esas mujeres amargadas por el trabajo?, Genial.

-Como dije, tuve unas complicaciones, lo lamento.-volvi a repetir ya que creo que no escucho.

-Si, escuché.-dice ella con cautela.-Pero aún así, es una junta importante para ambos, tiene que mostrar un poco más de profesionalismo.-dice ella y sonríe.- ahí está la carpeta con documentos y el contrato.- está mujer es bipolar.

-Solo falta su firma y que esté de acuerdo con lo que se llevará a cabo.-habla ahora un joven no mayor que yo con una voz angustiada y voltea a ver a Álex, ¿Le tiene miedo?. Ignoro mi pregunta y reviso los documentos y el contrato, esto está perfecto, ambas empresas salen beneficiadas y nada afectadas, es algo que necesitaba, a ver si así paso un poco de tiempo con mi pequeña. Agarro la pluma que está en mi bolsillo de la camisa y firmo. Ya está, oficialmente vivo en Canadá.