love you

Capitulo 4: "El regreso".

Dylan:
Sigo sin creer que Alexandra tenga un hijo. Eso no me lo esperaba, y creo que lo mejor de eso es que no tiene esposo, cuando el niño se presentó note que tenía el apellido de Alex, pero no sabía si el otro igual era de ella o si tenía esposo y debo admitir creo que me alivie cuando me enteré que Alex no tiene tal esposo.

-¿A dónde vas Papi?.-pregunta Brook, contraté una niñera para que cuide a la pequeña cuando tenga asuntos que atender, esto de ser presidente de la empresa y padre a la vez, no es fácil.

-Papi tiene una pequeña celebración por el trato de hoy mi amor.-le digo y le planto un beso en la frente.- prometo llegar temprano.-le sonrió y la arropó para que se duerma. Apagó la luz de su cuarto y salgo, divisó a Margaret, la niñera de mi pequeña.

-por favor, asegúrate de que se duerma, puedes quedarte en el cuarto de huéspedes si te da sueño, cualquier cosa me llamas a mi celular.-digo antes de salir.

-Si señor, no sé preocupe.-y con eso cierro la puerta, no me gusta tenner que dejar a mi hija pero es una celebración, y además de que se aburrira, con las pláticas que tendré y todo lo demás.

No puedo negarlo, creo que hay algo en Alex que me intriga, quisiera saber más de ella, más de lo que hace, su familia, sus intereses. Genial, me escucho como un psicópata. Son las 7:30 de la noche, me hago veinte minutos de mi nuevo departamento hacia el salón de eventos. Hoy me vestí con algo simple, un traje azul metálico y la camisa blanca.

Alex:
Super, súper tarde.
Es lo único que pasa por mi mente, son las 8:15 y el evento empezaba 8:00. Trato de manejar lo más rápido que puedo, claro respetando los límites de velocidad, no quiero ser multada. Mi retraso tiene nombre y un nombre que jamás pensé volver a escuchar.

~Flashback~
Levantó las cosas del pequeño para meterlos en su maleta ya que se quedará a dormir con mi mamá, no sé a qué hora terminará la dichosa fiesta, y Ash se duerme temprano. Me echo un último vistazo en el espejo y me gusta lo que veo, mi cabello lo ondule ligeramente, me maquille natural y me coloque un vestido que es blanco hasta mi cintura, pegado y el resto que es suelto de rojo vino, coloco mis zapatillas y voy hacia la habitación de Ash, reviso la hora y son 7:20 p.m. llegó con buen tiempo a la celebración, observo que Ash ya está dormido así que lo cargo en brazos para llevarlo al auto, aún no sé cómo puedo levantarlo con mis tacones puestos. Agarro su mochila donde hay ropa, zapatos y unos cuantos juguetes y me dispongo a salir.
"Ding dong"
Escucho el timbre y como voy a salir que se note por qué tengo prisa. Abro la puerta y no puede ser.
Maldita sea, jure que jamás lo iba a volver a ver en toda mi desgraciada vida. Pero ahí está, parado con unos jeans desgastados y una polera blanca, ¿Que carajos quiere?.

-¿Qué demonios haces aquí?.-le escupo con desagrado a Matt. ¿Cómo se atreve a venir después de tanto tiempo?, Agradezco que mi pequeño Ash este dormido, el no está listo para esto, y yo menos.

-A-Alex... Ha pasado mucho tiempo, te ves hermosa.-dice mientras rasca la parte trasera de su nuca. ¡Eres un maldito idiota!

-cuatro años para ser exacta.-sueno más fría de lo que hubiese querido. Lo odio con todo mi ser.

-no sabes cuánto lamento lo sucedido.-dice y me mira con esos ojos profundos que alguna vez ame con todo mi corazón. Lo odio demasiado y le tengo tanto rencor, por culpa de el Ashton ha pasado días en los cuales está deprimido por no tener un papá, ¿Y quién lo culpa? Es solo un niño.

-No, tu lamentas el no estar conmigo y haberte aprovechado de los millones que herede y la empresa.-y si, lo solté. Con si no hubiese salido en la tele, revistas y periódicos la nueva empresaria más poderosa de Canadá, por favor.