Una Bola De Pelos (Viewfinder)

Capítulo 5

¿Les he mencionado que esto se volvió tedioso? Si no lo he hecho, ¡Lo es! ¡¿Porqué me meten en sus asuntos del pasado?!

-¡Esto es una tontería! -Mis orejas se erguiron y la vez que mi cola golpeaba el suelo por enojo mientras mis garras rasguñaban el suelo.-. ¿Porqué debo estar en medio de los conflictos entre Asami y Feilong? ¡Serán malditos!.-Momentos como éstos, no planeo estar en Japón o China, ¡Me iré a Corea! No, ¡Me iré a la otra punta del mundo para que no logren encontrarme jamás de los jamases!

-Deja de quejarte que no te ayudará en tu situación.-. ¿Han escuchado eso que dicen "Hablando del diablo"? Bueno, eso se aplica muy bien en ésta ocasión. Era Feilong escuchando mis incesantes reproches, tanto así que se notaba una vena que quería salir de su frente.

-¡Hmp! -Bufé y me crucé de brazos con el ceño claramente fruncido por mi enojo -Y en gran parte berrinche-.

Un silencio sepulcral reinó en la habitación, sólo se escuchaban las aves cantando y como Feilong vaciaba agua en el pequeño recipiente donde lo bebía.

-¿Porqué hacen esto? -Cuestioné ya más calmado y un poco decaído que se mostró en mis orejas porque cayeron hacía abajo. Mi vista se dirigió al Chino que ante la pregunta quedó con seriedad.

-¿A qué viene la pregunta, Akihito?-Alzó una ceja mirándome interrogante dejando el recipiente con Sake en un mueble al lado.

-Me involucran en sus peleas, ¿No sería mejor saber lo que sucede?.-Siento que ese tono me va a llevar a encontrar cosas que no quiero, pero.... Como dicen, la curiosidad mató al gato.

-Creí que estabas enterado, ya que pasaste gran parte de tu vida con Asami.-Punto para el Chino.- Pero si no te lo dijo fue por una razón, y dejaré que te sigas torturando la cabeza pensando "¿Porqué estoy aquí?", "¿Qué fue lo que pasó?".-Una sonrisa socarrona se asomó en sus labios, y eso me enojaba aún más.-.

—Todos ustedes son desesperantes, bien podrían resolver ésto hablando pero les encanta hacer todo a la mala involucrando gente y sin duda asesinandola.—Enojado iba a seguir con mi reproche pero se fue harto que estuviera quejándome a cada rato.

    No sé aproximadamente cuánto tiempo pasó, pero unos disparos comenzaban a sonar, por reacción fuí a esconderse detrás de un mueble. Escuchaba pasos frente la habitación que estaba, mi cola estaba enrrollada en mi pierna; la puerta fue abierta de golpe haciendo que me encogiera.

    —¡Akihito! —Era la misma voz que Asami, me asomé quedando más tranquilo. Salí de dónde me escondía para ir a abrazarlo.

    —¡Idiota! ¡Te estuve esperando! ¡Idiota idiota idiota! .—Golpeaba suavemente su pecho pero dejé de hacerlo cuando sentí como me rodeaba con sus brazos mientras bajaba mis orejas al sentir las caricias en mi cabello y detrás de mis orejas ronroneando.—

    —Ya estoy aquí, vamos a casa.—Dijo murmurando y yo sólo asentí.