SUPERCORP: *MÁS ALLÁ DE LAS ESTRELLAS*

Capítulo 20: Lo siento,Adiós Kara...

Nave Daxamita...

-Una luna más en la nave Daxamita para Lena,Mon-El y la demás tripulación,aunque la Reina Rhea comunico que pronto llegarían a su primer destino,el viaje seguía siendo eterno,pero para cada uno estaba cambiando su vida.

Para Rhea era tiempo bien aprovechado,puesto que planeaba mucho mejor las cosas que le deparaban a su hijo y a Lena y cada vez se le ocurrían ideas más descabelladas.

Lena por su parte,se aburría de ver a Rhea con sus ínfulas de grandeza y poder sobre toda la tripulación incluso de ella aunque no lo quisiera,puesto que de su obediencia dependía la vida de alguien especial para ella y a quien amaba hace mucho,tan solo llevar la mínima contraria,le costaría todo lo que ha estado cuidando desde lejos.

Ningún día desde que partió de la Tierra ha abandonado la esperanza de que entre su amiga Kara Danvers y su ángel guardián Supergirl,encontrarían la forma de ayudarla a regresar.

Admitía que extrañaba a ambas chicas,por un lado estaba Kara,esa amistad incondicional que nació desde que Clark Kent las presentó le sorprendió mucho,han compartido muchas cosas y saben perfectamente que pueden confiar una en la otra y que cuando más lo necesita,así estén pasando por el mejor o peor momento, siempre están para compartirlos.

Por otro lado estaba la increíble y maravillosa heroína de Ciudad Nacional y también del Planeta Tierra, Supergirl,no tan diferente a Kara,pero con su estilo propio.
Supergirl era ese ángel guardián que toda persona quisiera tener y por fortuna cada que estaba en peligro,ahí estaba ella,con su apariencia reservada y callada pero en todo momento noble y con esa manía de anteponer al más débil antes que su seguridad misma,algo que había quedado claro que los Kryptonianos tanto Superman como Supergirl,traían en los genes.
Lena se sentía realmente amada por la vida al tener a estos dos tesoros a su lado y que valoraba demasiado.

Por eso mismo no se daba por vencida en confiar en que regresaría a la tierra y de algún modo romper el pacto que tenía con Rhea y poder declararle su amor por fin a esa persona especial.

En cambio a Mon-El,el viaje le estaba cambiando la vida y los sentimientos por completo,tanto tiempo en el espacio como preso,sin poder escapar y hablar pacíficamente con su madre,solo vigilado por los guardias y el trato amable,respetuoso y tierno de Lena,hicieron que en el joven Príncipe naciera un nuevo sentimiento que nunca pidió y del que ahora no podía escapar.

Desde el día en que Mon-El discutió con su madre,fue el momento en que sus ojos comenzaron a ver a Lena de una manera muy distinta e inusual a como de costumbre la había visto,para Mon-El siempre había sido la mejor amiga de su novia y mujer independiente,fuerte y segura de si misma y de sus decisiones y a pesar de todo,sabia que dentro de esa chica tan inteligente,había un corazón esperando por amor y a ser amado y protegido,virtudes que fueron llamando la atención de este.

Mon-El llegó a su propia conclusión de que estaba harto de pelear con su madre y que todos los acontecimientos que se habían suscitado eran obra del destino y si estaba junto a Lena y no a Kara era otra señal para que siguiera adelante en alguna parte de la galaxia.

Hoy era otro día en la nave Daxamita y era otra ocasión en la que espiaba y admiraba de lejos a Lena,a pesar de estar sumida en sus propios pensamientos,para Mon-El le parecía fascinante cada movimiento y expresión de su bello rostro,todo le parecía perfecto hasta que aparecía la imagen de Kara y todo se volvía tormentoso y culposo.

Había ocasiones en que parecía recapacitar y entrar en razón y simplemente ver a Lena como la amiga cautiva por su madre,otras se sentía un desgraciado por su traición,pero este día algo había cambiado y había tomado una decisión.