Kibou no Kakera

capítulo 3

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Un precioso Kimono negro de seda se encontraba sobre su cama listo para ser usado ese día, el color negro solo era de fondo pues se apreciaban mas los detalles bordados en distintos colores por todo este, tenia unas flores raras de distintas tonalidades que iban de violeta a lilas. El obi de la prenda era lila y encima pareciera tener otro más pequeño de color negro.

Le sorprendió que no fuera lo único que se encontraba ahí, sino también un Juban de seda blanca, el cual es el kimono interior, era la primera vez que usaría uno parecido pero cuando siguió su análisis observo un kimono mas ancho, de una tela que lucía bastante resistente color negra pero más en su totalidad, notando que tenia bordados en las orillas con el característico lila.

Luego de vestir la totalidad del kimono, se quedo observando el ultimo y se sorprendió al reconocerlo como un Uchikake, una especie de capa para colocarse encima del kimono. Cuando hubo terminado de alistarse se observo en el espejo, su pálida piel resaltada por los colores oscuros del kimono, sus pupilas jades deslumbrantemente brillantes, el cabello aun no se lo había recogido pero de ello se encargaría Sasori como todos los días.

Al finalizar de analizar su reflejo se dijo a si misma parecía una muñeca de porcelana, y sonríe.

Sasori la trataba como una muñeca de porcelana.

Soltó un suspiro cansado, esa mañana tendría que lidiar con la presencia de Sasuke y su grupo luego de que estos ya hayan pasado dos días en su guardia, esperaba que Itachi ya tuviera el tiempo suficiente para explicarle los pormenores que le concernían al menor de los Uchiha. Lo necesitaba fuera del camino para acabar con Orochimaru, cerró los ojos con cansancio, esperaba que sus fuerzas le alcanzaran para llegar a ver muerto a Tobi, solo eso deseaba antes de que su vida diera fin.

– Hana-sama –Llamo suavemente desde el otro lado de la puerta a quien reconoció como Sasori, al segundo la puerta se abre dando paso a la habitación pero se detiene anonadado por la imagen de la peli rosada.

– Esta hermoso –Repite lo de la noche pasada mientras le regala al chico una amable sonrisa, el sonríe un poco mientras se acerca a ella– ¿Cómo me peinaras hoy? –Pregunta mientras se sienta frente al espejo de una cómoda que se encontraba al otro lado de la habitación.

– Hoy tenía pensado un peinado recogido tradicional para acompañar el lujoso kimono ceremonial –Le explico con serenidad mientras cepillaba la cabellera peli rosada.

– No muy llamativo por favor, ya el kimono es lo suficientemente llamativo –Bromeo con serenidad y calma la mujer mientras miraba a Sasori por el reflejo del espejo, el asiente con lentitud y comienza a peinarla.

Al pasar una hora ya está totalmente arreglada y se dirigía a la sala que estaba al final del pasillo para el almuerzo, ya que todas las mañanas tomaba el desayuno en su habitación. Antes de abrir la puerta ya escuchaba el estruendo que había dentro de la habitación. Sasori le abre la puerta y hace una reverencia para que pase, ella pasa y al presentarse frente a todos, encuentra a los Kibou realizando una reverencia a la entrada de ella en la habitación.

– Ya siéntense de una vez –Dice con una sonrisa la chica– Buenos días –Saluda mientras se dirigía a su puesto en la cabecera de la mesa, a su lado se sienta Sasori luego de ayudarla a acomodarse.

Al lado de Sasori se encontraba Deidara, seguido de Pain, Konan, Juugo y Suigetsu, del otro lado de Sakura estaba Hidan a su lado, luego Kakuzu, Kisame, Itachi, Sasuke.