Destinos Opuestos

Capítulo 1

Estaba como siempre mirando el nuevo capitulo de mi serie en Netflix , no era raro  pasar las noches así o ir a una fiesta simplemente a comer bocaditos y ver bailar a los demás ; esa era la rutina de Alexia Wilson , esa era mi rutina,  vivo en un departamento con mis mejores amigas , claro que todas somos distintas ,sino seriamos un terrible peligro para la sociedad .

Mía,  era una enamoradiza sin remedio , tenía a todo quien quisiera a sus pies,  pero nunca decidía con cual quedarse; " soy una loca demente que le gusta la explosión " como ella misma dice,  desde que la conocí somos inseparables , nós mudamos juntas cuando nuestros padres nós aburrieron de sus consejos de casarse y tener una linda familia , cosa que no iba con nosotras . Mis padres eran los más raros,  durante toda la secundaria no quisieron que tuviera novio y menos en la universidad , pero claro ellos querían que yo tuviera hijos a los 24,  como iba a tener hijos si ni novio tenía .

Carolina,  era todo lo opuesto a Mía,  ella podía pasarse toda la tarde en el balcón dibujando el atardecer acompañada de una taza de café , la conocí antes que a Mía y es por eso que tengo un fuerte lazo con ella ; se mudo un año después y desde ese momento somos las chicas superpoderosas contra el mundo.

Esa misma noche Mía tenía una cena con uno de sus galanes,  a esa mujer le gustaban los ojos de uno pero las piernas de otro. Muchas veces quiso presentarme a alguien, pero ninguno de sus amiguitos me termina de convencer,  yo no creo en el amor,  ni en nada que se le pareciese,  yo no me quiero casar ni tener hijos,  es más ,odio las relaciones amorosas , lo romántico no va conmigo ; hasta han dudado en que me gusten los hombres ,  pero yo no tengo la culpa de que los libros me hayan generado una gran expectativa sobre ellos.

- Buenas noches con la señorita Alexia Wilson ? - escuché, luego de contestar el teléfono que no paraba de sonar,  nunca nadie me llamaba,  a menos que fuera mi mamá o la línea de telefonía móvil para recordarme que debía pagar.

- Si,  ella habla - conteste, tratando de aclarar la garganta ;  no tenía la culpa de tener la voz de una niña de 6 años.

- Soy la secretaria del señor Smith y le quería avisar que mañana empieza a trabajar con nosotros a las 8 de la mañana , que tenga buena noche -  di pequeños saltitos de la emoción , había conseguido trabajo y si bien no era lo que me gustaba,  era para lo que había estudiado ; sería la nueva jefa de logística ,todo gracias a mis estudios de Administración en Negocios Internacionales , mi pasión siempre fue la actuación pero mi madre decía que los sueños no te dan de comer .

Había tenido un buen empleo, pero se aprovechaban que era joven y me recargaban el trabajo,  cosa que no iba a permitir , era claro que no tenía vida social pero no me perdería mi serie en Netflix!.

Me recosté en mi cama y puse el despertador , los días de levantarse tarde se habían terminado.

Di un salto de la cama cuando me di cuenta que eran las 7 y aun no me había ni cambiado .

- Maldito despertador siempre me haces esto!  -  bufe tirando esa cosa al piso,  me bañe y empecé a buscar algo para ponerme,  cosa que no tenía porque me encantaba las cosas sueltas y odiaba lo tacones en punta, nunca fui alta, cosa que enviadaba de Mía ya que ella parecía modelo de alta costura y yo un simple pigmeo.

De la nada apareció Mía con una sonrisa pícara y una caja.

- No me des las gracias , lo escogí para tí - abrí la caja y era una linda blusa blanca de encaje y una falda negra que combinaba con los zapatos que eran del mismo color,  la ropa era ajustada y no me gustaba mucho , nunca fui una chica de curvas,  es más diría que era de talla grande;  con el tiempo supe aprovechar la situación y pude tener una alimentación balanceada,  pero las humillaciones y las burlas nadie las sacara de mi cabeza,  esos momentos en los cuales me sentía delgada y en forma pero una simple mirada o risa sarcástica hacia que comiera insaciablemente y terminara peor de lo que empecé .

Me coloque la ropa y note que no me veía nada mal,  no quedaba rastro de aquella chica tímida que se dedicaba a leer y soñar con que algún día protagonizaria su propia novela.

- Gracias,  sin tí hubiera ido en pijama - la abracé muy fuerte , no me gustaba dar abrazos pero ella lo merecía.

- Déjate de sentimentalismo , consíguete un jefe millonario e irresistible y vive una historia tipo Cincuenta sombras de Grey  - decía con mirada provocativa,  a ella no le gustaba leer,  preferia ver la adaptación de la película y yo amaba decirle lo que iba ocurrir.

- Ok señorita Grey,  ya me voy porque  sino llegaré tarde - salí corriendo , aunque con esos tacones no se podía,  pude a ver tomado un microbús pero tardaría una eternidad , así que con el dolor de mi corazón tome taxi , me saldría caro pero espero que el sueldo valga la pena.

Llegue 2 minutos antes,  por suerte mi jefe no llegaba y solo estaba su secretaria .

Pase al despacho del señor Smith y cuando estaba a punto de sentarme él llegó.

Me paré rápidamente y estire la mano,  él era un hombre de unos 60 años,  con un rostro que transmitia tranquilidad , yo diría que se parece a mi abuelito.  Era claro que no tendría un romance tipo Grey con el señor Smith.

El me indicó en que área trabajaría , me dedicaría a realizar las compras que los obreros necesitarían,  tendría que buscar al mejor proveedor !.

Me dieron una pequeña oficina,  solo tenia un computador y pequeño sillón color marfil,  lo único que decoraba ese lugar eran las pinturas sobre la pared y aunque ese no era mi estilo,  tampoco estaba tan mal.

July  era la secretaria del señor Smith y no parecía una mala persona,  ella me indicó que debía conocer la planta y aunque yo realizaría las compras , no hablaría con los obreros , solo tenía que comunicarme con el Ing Monreal , no lo conocía pero tendría que hacerlo .

Me dedique a conocer dicho lugar,  era una planta demasiado grande y difícil de conocer a fondo. Empecé a caminar cerca de los obreros  a ver si encontraba al famoso ingeniero pero nadie me daba razón,  mejor dicho nadie me contestaba  , creó que mi voz y mi estatura no daban la certeza de que yo era administradora.

Seguí caminando hasta que uno de esos malditos tacones me traicionó y cuando estaba segura de tener al piso cara a cara,  una mano me tomo de la cintura y en vez de caer sobre el piso , caí sobre él .

Me miraba fijamente y yo rápidamente me paré y empecé a sacudirme hasta mas no poder,  los obreros empezaron a hacer señales de ganador al tipo que me había salvado,  mientras yo debería estar más roja que tomate y pimiento juntos.

- Sigan trabajando muchachos - gritó  con la mirada fija en mi - Esta bien señorita ? - preguntó, viendo que uno de los tacones se había roto.

- Si - afirmé , empecé a caminar hacia las oficinas que no estaban tan lejos pero era imposible hacerlo,  no me gustaba ensuciarme los pies ....Respiré hondo y decidí quedarme sin ninguno de los dos zapatos; pero de pronto las mismas manos me sujetaron y me alzó sobre su espalda,  quede en shock , no sabia si gritarle o agradecerle !

- Que hace ?!! - pregunté , mientras me cargaba frente a la miraba atónita de todos.

- No dejaré que se ensucie - contestó.

Lo dirigí a mi oficina , no voy a negar que ya me estaba acostumbrando a sus brazos.

!Por favor Alexia ,contrólate ! 

Me dejo en la silla y yo no sabia que hacer , él hizo un gesto de salida y sin más se retiró,  no me dio tiempo ni siquiera para agradecerle .