Capítulo 1: Encuentros

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Un nuevo comienzo, una nueva vida, en un nuevo mundo.

A sus tiernos dieciocho años, Diana ya había terminado el Bachiller, pero se encontraba en un punto de su vida en el que no tenía muy claro a dónde quería dirigirse. Nunca se le habían dado bien las elecciones, y menos cuando contaba con tantas posibilidades abiertas.

Ella es todo un cerebrito, de esas típicas personas que incluso sufren el acoso de sus compañeros de clase por ser la lista y la preferida de los profesores. Eso había forjado en ella una personalidad callada, que normalmente tendía a la discreción. Si el mundo ignoraba su existencia, no tendría que lidiar con la negatividad de este.

Pero, por otro lado, para una gran mayoría, incluso aquellos que se metían con ella, parecía estar destinada a hacer grandes cosas, a cambiar el mundo, o, en su defecto, revolucionarlo. No se veía en absoluto así, pero a veces, se ahogaba con las altas expectativas que tenían los demás de ella.

Por eso, al recibir una notificación de su, desde hacía pocos días, antiguo instituto para ser miembro de una academia de élite de nueva apertura, vio allí una gran oportunidad. La habían elegido por sus excelentes notas y podría estudiar y convivir con personas que, evidentemente, eran muy superiores a su pequeño círculo social; pero sería perfecto para darse un tiempo mientras decidía en qué carrera universitaria quería entrar, además de que seguiría recibiendo formación, y cumpliría el pequeño sueño de toda personita que tenía la mayoría de edad: independizarse y viajar por el mundo.

Si mal no la habían informado, se dirigiría a una isla en Japón. Nada sabía del idioma de aquel país, pero le explicaron que no tendría ningún problema mientras hablara debidamente inglés, que sería el idioma oficial en el que se impartirían las clases y que se le exigiría a todos los alumnos tener un nivel básico de dicho idioma, por lo que se podría comunicar con todo el mundo que perteneciera a la academia, ya no estaba tan segura de si fuera de esta sería igual, pero no era algo que la preocupase demasiado.

Tampoco le preocuparon los exámenes por los que le hicieron pasar para comprobar que tenía derecho a una plaza en la academia. Como podía elegir las asignaturas de las que se examinaría, escogió aquellas en las que destacaba, quería entrar a como fuera lugar.

Y así, finalmente, recibió una carta certificada de Buddy's Academy, que la felicitaba por su ingreso además de proporcionarle las instrucciones que debía seguir a partir de aquel momento y las extrañas normas por las que se regía aquella institución.

Con la mayoría estaba de acuerdo, pero, ¿qué era eso de elegir un "buddy"? Parecía algo así como un compañero de estudios o alguien con quien convivir durante al menos un año. ¿El objetivo principal de la academia era, entonces, fomentar las relaciones de sus estudiantes? Ella no era la persona con más amigos del mundo, pero haría lo posible por tomarse aquello como un reto, comenzar con una nueva filosofía y ser amable con todo el mundo.

Tenía una semana para elegir compañero de habitación.


-Anexo-

Este capítulo continúa en:

1.1 Evan Katsaros

1.2 Nina Erzherzogin

1.3 Yue Tsukino

1.4 Taniel Harper

1.5 Nicolai Mikhailov

1.6 Adelpho Ricci

1.7 La decisión de la Directora

Nota de la Escritora: Esta novela es un experimento creado para poder seguir tanto la historia de la protagonista {Diana} como la de cada uno de los personajes con los que se relaciona.

Si solo te interesa la ruta de un personaje, lee el capítulo general {que normalmente contendrá un resumen de lo que le acontece a la protagonista con todos y las consecuencias de sus actos} y el de la ruta del personaje que te interese. Siempre se mostrarán en el orden indicado en el anexo de este capítulo.

Se avisará a los lectores siempre que haya contenido sensible {+18} en alguno de los capítulos o las partes, y de cuando un personaje distinto a la ruta original participe en dicha ruta.

Buddy's Academy 【Otome】Donde viven las historias. Descúbrelo ahora