Escondiendo la verdad 「BTS 」

Capítulo XXI: El plan

Alrededor de una hora más o menos había pasado desde que Namjoon y Yoongi desaparecieron en uno de los dormitorios en la parte posterior. La casa estaba extrañamente silenciosa, lo cual era raro dado que siete personas habitaban el pequeño departamento. Jin se sentó en la cocina, sumido en sus propios pensamientos. Incluso cuando Hoseok se excusó para ir a su habitación, Jin respondió suavemente pero no se había movido de su lugar.

Quería vigilar o, eso es lo que se dijo a sí mismo que quería hacer. En realidad, fue lavado en pensamientos intrincados que plagaron su mente. ¿Qué tipo de hyung era él? ¿Por qué todas estas cosas le habían sucedido a los miembros más jóvenes?

Dejando escapar un exhausto suspiro, decidió preocuparse por eso más tarde. Levantó su teléfono para ver la hora. Eran las once y cuarto. No había forma de que Hyonu llegara tan tarde, ¿verdad? Levantándose de la silla en la que estaba descansando durante la última hora, se asomó a la sala para ver a los dos miembros más jóvenes.

La cabeza de Taehyung estaba apoyada en el hombro de Jungkook. Su cabello se extendía en la cara del menor, sin embargo, a este último no parecía importarle demasiado. Jin casi pensó que los dos estaban dormidos si no fuera por la mirada fija de Jungkook en la cara de Taehyung. Jin no pudo evitar reírse para sí mismo. Jungkook a veces podía ser tan torpe y sobreprotector con Taehyung, y sinceramente era realmente adorable.

Decidiendo que no habría señales de Hyonu por el resto de la noche, Jin giró hacia su habitación solo para ser sorprendido por el estridente sonido del timbre. Sobresaltado, la cabeza de Jin se sacudió hacia la entrada principal, su corazón latía con fuerza en su pecho. No había forma, ¿cierto?

Hoseok se les unió rápidamente mientras hacía un trabajo rápido para salir de la habitación. Su cabello estaba húmedo, su ropa en un estado similar. Él probablemente se estaba duchando.

—Ustedes dos, vayan a la cama...—susurró Jin, sin apartar la vista de la entrada, como si hacerlo pudiera hacer que la persona del otro lado tuviera acceso a su apartamento.

Desde el sofá, Jungkook visiblemente se estremeció, sus ojos ya estaban abiertos y alerta mientras rodeaba con sus brazos a un Taehyung todavía dormido.

—Dije: Vayan. A. La. Cama.—Jin gruñó, girando la cabeza para hacer que Jungkook se moviera con firmeza.

Finalmente comprendiendo, Jungkook despertó a Taehyung con una suave palmada en la mejilla. El mayor de los dos lo miró perezosamente, preguntando con curiosidad que era lo que Jungkook necesitaba de él. Básicamente levantando a Taehyung, no queriendo prolongar el tiempo de el que esperaba en la puerta, los dos más jóvenes desaparecieron en la habitación compartida de Hoseok con un suave clic de la puerta. Se escuchó otro estridente anillo desde el timbre. El sonido casi parecía resonar en toda la casa tranquila por lo silencioso que estaba. Con un suspiro estremecido, sus nervios aún bastante alterados por todos los eventos que habían tenido lugar, Jin se arregló la camisa antes de dirigirse a la puerta.

Mirando a través de la mirilla, confirmó que sí, que era Ma Hyonu parado frente a su departamento.

Tomando nota de la paciente calma que el hombre tenía con él, Jin decidió que era mejor abrir la puerta justo cuando vio que el mayor tocaba el timbre una vez más.

Inclinando la cabeza dócilmente, Jin ofreció un débil "hola" antes de pararse a un lado para dejarlo entrar. La cara de Hyonu se iluminó una vez que se abrió la puerta, y él sonrió, aceptando la oferta silenciosa de Jin y entró. Se quitó los zapatos, miró a su alrededor como si no hubiera estado allí en años mientras sus ojos inspeccionaban su entorno.