ATRAPADA

Capítulo 3

Suena el despertador de Logan, se va directo a la ducha, mientras tanto yo sigo dormida. Fuera hace un frío...Con lo bien que se está calentita en la cama, intento abrir los ojos pero se me cierran casi involuntariamente como si de persianas se tratasen, trataba de ignorar a Logan ya que no me interesa discutir sobre el tema de anoche a estas horas de la mañana.

Pero nada más salir de la ducha ya comienza a darme lecciones de vida.

—Marlen, no te hagas la tonta, te he pillado mirarme de reojo — Dice con sarcasmo. — Puedes mirar soy todo tuyo.

—Estoy dormida, déjame en paz.

—Sabes que no quiero que vayas esta noche, créeme no sabes lo peligroso que es salir de allí a esas horas.

—Sé que tu profesión te ha marcado, has visto muchas cosas malas pero no creo que me pasé a mí, Susan lleva trabajando años en este turno y jamás tuvo un incidente. Digo interrumpiendo su lección magistral...

—No soy una niña, se cuidarme sola.

—No quiero que pienses que quiero controlarte, yo solo tengo miedo que...

Le interrumpo con un beso... —Sé que sólo quieres protegerme, pero tienes que confiar en mí.

—Está bien...Pero no estaré tranquilo hasta que vuelvas por esa puerta sana y salva.

— ¡Qué exagerado eres! Digo con una sonrisa. Ni que fuera Scarlett Johansson, anda vamos a desayunar que llegas tarde.

Se me hace extraño estar una mañana entera sin hacer nada, podría aprovechar el tiempo pero no tengo nada que hacer.

Hace poco que nos vinimos a Chicago concretamente la ciudad de Illinois, no conozco a mucha gente. Tendré que apuntarme a un gimnasio o algún club de la lectura, donde socialice más. Ya que definitivamente está ciudad será nuestro nido de amor.

Dios mío, mientras estaba pensando en que hacer se me olvidó algo más importante aún, prometí a la señora Smith, la directora del orfanato, visitar a Lily.

Siempre la visito cuando puedo, me recuerda a mí, tan risueña y con tantos sueños en la vida...

De camino al orfanato, suena mi teléfono móvil, es la directora.

—Marlen querida, te llamaba para decir que una familia quiere adoptar a la pequeña Lily.

— ¿En serio?, es estupendo. Merece disfrutar de un entorno feliz.

—Cierto...Pero hay un problema. Lily no quiere irse, rechaza la idea de abandonar el orfanato antes de hablar contigo.

—Dila que no se preocupe, voy de camino.

Es difícil cambiar de contexto familiar tantas veces, primero te dicen que no saben quién es tu familia, o que te han abandonado o lo que es peor...Que tus padres están muertos. Y luego tras acostumbrarte a tratar por hermanos a los demás niños del orfanato y por padres a los cuidadores...De repente te dan la noticia de que tampoco los volverás a ver, porque hay alguien que se quiere hacer cargo de ti.

Eso viene muy grande a una niña tan pequeña, no es fácil. Intentaré hablar con ella, es una oportunidad única...La que yo nunca tuve.

Tras convencer a la pequeña Lily de la suerte que estaba teniendo, accedió marcharse con aquella familia. La prometí que la visitaría. Sus padres adoptivos aceptaron traerla a visitar a los demás niños del orfanato. Estoy tranquila, ya que estará en buenas manos.

Tras tratar de mantenerme ocupada esta mañana por la simple razón de aburrimiento, ahora entiendo lo que es aburrirse. Ya estoy otra vez, con la rutina de siempre. Este turno se me está haciendo eterno. Lo importante es que la operación de la abuela de Susan vaya bien.