3.- El único pirómano que me importa (Golden sick x lectora)

Beso (8)

No querías seguir llorando...

Pero no podías parar...

No querías llamar la atención de nadie...

Pero lo que Mangle te hizo fue duro...

¿Que debías hacer?

_________Finaliza el descanso_________

Temblaste.

Entraste de nuevo en el despacho de Mangle.

- disculpa... Podría acabar el día de hoy y ya darle la noticia a Golden?- pregutaste con la más mínima esperanza de que te permitiese ver una vez más a Golden.

- haz lo que quieras- dijo indiferente sin ni siquiera mirarte a la cara.

- gracias- musitaste en bajo.

Saliste del despacho una vez más y te encaminaste hacia el cuarto de Golden casi corriendo, recordemos que llegabas tarde y él debería de estar preocupado.

Te limpiste las lágrimas y entraste fingiendo una sonrisa.

- ____!- chilló abrazándote con fuerza- ¿donde estabas? ¿porque tardaste tanto? ¿es acaso que ya no quieres ser mi enfermera?- en la última pregunta  nuevas lágrimas empezaron a caer por tus mejillas- ¿____?- musitó en bajo preocupado.

Lo abrazaste con fuerza y empezaste a llorar en su pecho, él estaba abrumado, solo te devolvió el abrazo y te consoló acariciándole la espalda con suavidad.

- ya, ya, no llores más- pidió el rubio todavía consolandote para que no llorases.- ____, ¿que pasa?- musitó levantando tu mentón suavemente para que lo mirases a los ojos.

- no puedo seguir curandote- lloraste liberandote de su agarre en u mentón para volver a hundir la cabeza en su pecho.

Se tensó y empezó a temblar

- ¿Qui-Quien me curará entonces?- jadeó temblando.

Lo miraste y negaste musitando: "nadie, T-te desecharán". Respondiste sinceramente, no ibas a mentirle.

- dime... Que... No es... Verdad- dijo él siendo rígido en el abrazo, todavía seguía apretandote un poco.

- lo es...- musitaste.- Mangle me dijo que no podía curarte más, que no tenías solución y que no quería que te curase nunca más, me ha cambiado de paciente y ahora... Que ya nadie te cuida...

- calla, calla...- tapó tu boca y se acercó a juntar su nariz con la tuya- tú vas a seguir curandome... Durante las noches- musitó

- pero... Y la escuela?- preguntaste- y cuando dormiré? Y como haré la tarea en el fin de semana?- musitaste en tono de pregunta.

- ¿en el tiempo libre?- preguntó en tono de pregunta.

Negaste.

- ¿los fines de semana?

Negaste de nuevo.

- ¿el domingo y sábado por la noche?- preguntó ladeando la cabeza de lado, todavía seguías en la misma posición, su nariz rozaba la tuya con delicadeza pero algo de ternura. Pero al mismo tiempo estaba cerca de tu boca, solo le quedaba retirar su mano de tu boca...

...

- mm..m...mm- respondiste a duras penas, recordemos que seguías con la boca tapada.

Se rio un poco y te quitó la mano de la boca. Sus labios rozaron los tuyos por un momento, eso te hizo temblar y sonrojarte mucho.

- ¿que decías?- musitó

Notaste su aliento en tu cara y tu cuerpo tembló, tus manos sudaban y estabas pálida y sonrojada. Se extrañó pero después se rio un poco.