Uncontrolled CODE *[SeXing]

01

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Seúl, 2150.

—Aquí unicornio, listo para entrar en acción.

—Aquí Yehet, listo para entrar en acción. — hablo el alto pelinegro vestido de negro, mirando a su compañero.

—Procedan. — respondió el jefe por el intercomunicador.

—SeHun. — llamo el chico de cabello más corto, sonriéndole al más alto. —Juntos.

—Juntos. — respondió el otro, sonriéndole.

Ambos entraron al edificio y empezaron a subir con sigilo hasta llegar al último piso, totalmente alertas a cualquier sonido o movimiento. El inmueble abandonado estaba oscuro, sucio y sin rastro de haber sido la base de un peligroso y poderoso hacker, tal y como les habían dicho por aquella pista dada por una supuesta víctima.

SeHun, el más alto, empuñaba su pistola mirando a todos lados aun cuando YiXing, su compañero, se encargaba de cuidar su espalda. Todo estaba demasiado callado aun cuando habían recibido la advertencia de ser zona de mala muerte y continuos ataques de bestias. Demasiada calma en su trabajo siempre significaba problemas.

Llegaron al último cuarto del edificio, lugar donde la victima les había dicho que operaba "DarknessNoise", el hacker y no hallaron nada relevante más allá de una computadora encendida.

—Señor, hay una computadora encendida. Seguimos sin ningún rastro importante, solo retazos de carne y sangre. — anuncio SeHun mientras YiXing se acercaba a verificar. Después de la respuesta, miro a su compañero. — ¿Algún dato importante?

El azabache presiono una tecla y la pantalla se apagó, dejando aparecer un mensaje.

La verdad y el avance tienen el mismo precio...

Ambos se miraron confundidos, intentando entender la frase. Estaban por hablar cuando apareció otra frase debajo de la primera.

¿Lo van a pagar por ellos?

SeHun chasqueo la lengua, irritado por la aparente burla. —No hay nada más, nos lo llevaremos y volveremos.

YiXing se quedó mirando el aparato, pensativo. — ¿Qué tal si... sabe algo que nosotros no?

—Somos policías, somos los ojos del mundo. — Respondió el otro con fastidio.

El azabache negó. —Somos sus peones, no sus ojos. — vio como SeHun rodaba los ojos y descansaba el arma en su muslo.

—No empieces de nuevo con eso, vámonos ya.

El chico estaba por seguirlo cuando sus ojos pararon en el computador y su rostro palideció en segundos. — ¡SeHun! — grito empujando al alto, que se encontraba cerca de la enorme ventana, haciendo que esta se rompiera y cayera directo al extenso y profundo rio.

Segundos después, el edificio se vio envuelto en llamas y escombros. SeHun contemplo con horror debajo del agua, saliendo y gritando. La explosión acabo con todo, incluido YiXing.

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Oh SeHun y Zhang YiXing, trabajaban para Shallow Breath, la famosa empresa de seguridad anti bestias RedB. SeHun llevaba siete años laborando en la misma mientras Zhang llevaba ocho. Ambos se conocieron cuando los asignaron como compañeros y se enamoraron con el paso del tiempo, volviéndose el mejor equipo que S.B tenia.