Confesión #24

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Leah

Mark estaba afectado...

Le quise preguntar qué había sucedido pero no me atreví además de que apenas habíamos llegado él se encerró en la habitación, no me dejó entrar, no me quiso hablar... Nada

Horas sin verlo, sin saber cómo estaba, ¡Maldición! Estaba malditamente preocupada

10:37 p.m. No resistí más y me dirigí a la habitación, toqué varias veces la puerta pero no salió, no respondió

-¿Mark? Mark abre la puerta- giré la manilla pero no cedía, me llené de nervios, por más que golpeaba la puerta, nada

"Pobre niño, Ya estará muerto"

-No, no, no-repetía sin parar

"Ríndete, está muerto"

-¡No!-grité y me sujeté la cabeza-¡Mark, abre la maldita puerta!-grité llorando, no podía ni conmigo misma-Por favor...-murmuré

"Él no está, se fue, te dejó"

Me agaché abrazando mis piernas

-Deténganse...-sollocé

La puerta sonó, pero no me levanté, Mark no estaba... Se había ido...

-Leah...-susurró mi nombre, me levanté y lo miré, desaliñado, despeinado, los primeros botones de su camisa sueltos, ojos llorosos...

-¡Imbécil!-empecé a golpearlo mientras las lágrimas caían de mis ojos-¡Creí que habías hecho una estupidez!-me sujetó las manos e intente zafarme, él me miraba sorprendido y arrepentido, me detuve

-Lo siento amor...-me jaló hacía él y me abrazó

-¿Qué sucedió?-pregunté

-Ella estaba cuando ellas murieron... Pero, Marianne no haría eso, ¿Verdad?, no hubiera matado a nuestra pequeña...-estaba más hablando consigo mismo que conmigo

-Mark, mírame-él no me había mirado, solo miraba a la nada, cuando me escuchó me observó-No estás solo

¿A quién se lo decía? ¿A él o a mí? No lo sabía

Me besó, suave, dulce, como la primera vez

-Estuve equivocado, eres lo contrario a ella-se separó mirándome-Tú eres locamente perfecta, y me encanta-me volvió a besar

Pero lo que no sabía, es que la felicidad duraría poco...

"Las mejores fotografías están en nuestros recuerdos

Porque los buenos momentos, pasan sin la cámara

Lo que no esperamos, es que acaben sin más

Sin avisar

Sin esperar

Solo se van

Como las semillas que el viento se lleva

Como las lágrimas que se derraman

Como la felicidad, que se escapa de las manos, como fina arena

Como nosotros, a los cuales la vida se nos va

Sin nada más...

Y los recuerdos son lo único que nos queda al final..."

Atrapada En mi Interior (Novela Psicológica)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora