B R I S A

⁞Siete⁞

C A P Í T U L O  7

Giré el pomo alargado de la puerta y entré en la casa de Dino seguida por Edmond.

La canción "Rockstar" de Post Malone era la acompañante perfecta para aquellos que bebían y charlaban.

Las parejas de novios aprovechaban la ocasión para subir a las habitaciones para hacer "cosas", las cuales no me gustaría pensar.

―Debo decir que estoy harto de esa canción, se escucha por todos lados ―se quejó el pelinegro.

Pero antes de poder contestarle me llamaron.

― ¡Ellianne! ―giré a donde escuché que provenía la voz.

Gio se apareció en mi campo de visión.

― ¿Qué sucede Bombón?

Antes de parpadear ya tenía el brazo de Giovanni rodeando mis hombros.

Siseé mientras me apartaba de su lado.

―No vine sola.

La situación le pareció graciosa a Edmond.

―Soy Edmond Moulian. ―extendió su mano hacia Gio.

―Giovanni Brown. ―estrecharon sus manos.

―Bueno, ya que saben el nombre del otro ¿podríamos quitarnos de la entrada? ―solicité, aunque realmente me movería sí o sí.

Ambos chicos rieron como si yo hubiese contado un chiste.

―Aguarda. ― ¿Y ahora que, Giovanni?, pensé ― ¡Dino!

Al escuchar su nombre salido de la boca de su mejor amigo Dino dejó a Luisa ―una chica de mi clase que él estaba cortejando―para venir hasta nosotros.

― ¿Qué sucede bro? ―en un principio se dirigió a Gio pero después sus ojos fueron a parar a mí con una sonrisa pícara―Que guapa.

Giovanni carraspeó.

―Dino ¿por qué no llevas a Edmond a tomar un trago?, que se divierta ―guiñó un ojo.

―No creo que-

― ¡Vamos, linda!, seguro que ya has aburrido a tu amigo, déjame encargarme.

Abrí la boca para negarme pero por segunda vez en el día me interrumpieron.

―No me molesta ir, quédate aquí, yo voy con él ―las tres frases las dijo haciendo énfasis.

―Vale, pero no te me pierdas demasiado ―asintió.

Se dio la vuelta para comenzar a charlar con Dino quien seguramente iba a presentarle chicas.

―No te querías quedar sola conmigo. ―acusó, pasando a ponerse frente a mí.

Giovanni es un compañero con el que comparto dos materias, debo admitir que es guapo y encantador pero al igual que Dino es demasiado "juguetón" con las niñas, no es un patán pero tampoco alguien estable.

―Bingo. ―desvié la mirada de su rostro mientras lo escuchaba reír.

―Eres adorable.

Sentí la garganta seca ante su reciente comentario.