Hometown Glory

Maraton 8/10

La tensión entre nosotros cambió en ese momento, había algo que nos acercaba el uno al otro. 

¿Realmente quieres hacer esto?

Miró a mis labios, y accidentalmente mire los suyos. El espacio entre nosotros fue poco a poco cada vez más pequeño, y pronto nuestros rostros estaban a pocos centímetros de distancia. Las mariposas en mi estómago se sentían salvajes, nunca me había sentido así antes, no con Liam de todos modos. Esto realmente va a pasar? 

¿Iba a besar a Liam? No me pareció mal, sin embargo, se sentía muy bien. Sus labios estaban a punto de unirse con los míos, cuando una de las tazas se cayó de la mesa haciendo que se rompiera y el chocolate caliente salió por todas partes. Salté de inmediato y me le quede mirando a la taza quebrada, en el piso. 

—Que demo..- Empecé pero entonces la otra taza, también se cayo de la mesa, haciéndome gritar. Liam se levantó y envolvió sus brazos alrededor de mí, ya que el reloj se cayó de la pared y se hizo añicos en el suelo. 

—¿Qué está pasando?— Grité. El no dijo nada en lugar de eso me sacó de la casa lo más rápido posible, y corrió por el camino al final de mi césped en el jardín. Me temblaban las manos, mis ojos estaban muy abiertos de asombro, ¿qué fue eso?

—Eso definitivamente no era el viento— le susurré.

Harry

Esto fue todo, se había olvidado de mí, ella no me quiere más, ya no significaba nada para ella. Se sentía como si alguien acabara de patearme duro en el estómago, y luego arrancaron mi corazón. Yo, Lenny y Scarlett estábamos en la puerta de la cocina, viendo a Liam y Skye acercarse cada vez más el uno al otro. Yo quería que ella fuera feliz, yo quería que ella superara la perdida, pero no pude ayudar a mi lado celoso. La idea de ellos dos juntos me hizo sentir como yo no era nada, era el único que podía hacerla feliz, yo la amaba, pero su corazón pertenecía a otra persona ahora. Me volví a Lenny, que tenía lágrimas en sus ojos, sus manos temblaban tanto que las apretaba. Eché un vistazo a Scarlett y luego ella se acerco a Lenny. 

—Lenny, estás bien?— Preguntó Scarlett, dando un paso adelante. 

—Yo la odio, y lo odio— dijo en voz baja y antes que yo o Scarlett pudiéramos detenerla, ella ya había corrido y empujó la taza de la mesa. Skye un salto hacia atrás y miró a la taza rota, ella estaba sorprendida.

—Que demo- comenzó Skye, pero Lenny se había ido por la otra taza, empujándola con todas sus fuerzas y enviándola volando por la habitación, Skye gritó en voz alta. Liam se levantó y rodeó sus brazos alrededor de ella, tratando de sacarla de la habitación.

—¡Te odio!— Gritó Lenny. 

—Lenny, Lenny para! ¡Basta!— Ordenó Scarlett, tratando de controlar a Lenny

—No te puede oir, no vamos a hacer una diferencia. Cálmate. 

Lenny sacó el reloj de la pared y se rompió en mil pedazos. Yo no sabía qué hacer, yo estaba en shock total en lo que Lenny había hecho. Liam había logrado sacar a Skye con seguridad fuera de la casa, Lenny lanzó su rostro entre sus manos y comenzó a llorar, ella se había calmado por fin. Suspiré con alivio y me dirigí a Lenny y Scarlett, mirando alrededor por el daño que había hecho, sin tener idea de lo que Skye y Liam estaban pensando en estos momentos. Las cosas no se mueven por sí mismas, y eso es lo parecía ahora. 

—Lenny, ¿qué estás haciendo?— Preguntó Scarlett.

—Estaba a punto de besarla— murmuró rápido, temblando de ira. 

—Él no te conoce. 

—Ya lo sé!— Gritó Lenny. 

—Entonces ¿por qué destruiste todo?—

—Debido a que la odio. Odio a Skye. 

—Porque ella iba a besar a Liam? No puedes meterte en la vida de los demás. Estás muerta. No estaba destinado— Scarlett le dijo a Lenny sin preocuparse por sus sentimientos— Quiero decir, piensa en Harry, el ama a Skye, pero él no se vuelve loco y los asusta— Mi estómago se redujo, lo que Scarlett dijo era cierto. Yo y Skye nunca estuvimos destinados a ser algo más. 

—Tienes razón— le susurré. Scarlett se dio la vuelta mientras Lenny se tranquilizaba —¿Qué? 

—Yo y Skye nunca estuvimos destinados. Nunca lo seremos. 

—Bueno, tu situación es un poco diferente— Explicó, rascándose su cuello con nerviosismo— Ya ves, tu muerte no estaba en el destino. Alguien te mató, así que ... alguien se interpuso en tu camino. Lo mismo conmigo— Se señaló ella misma— Pero con Lenny, no fue asesinato. 

—Yo misma me mate!— Gritó Lenny.

—Lenny, te ahogaste al caer en un lago. No trates de ocultar tu torpeza.

—Como sea, yo quiero un Pringle— suspiró, frotando su vientre y camino a través de la pared, desapareciendo y dejándome a mí y Scarlett solos. 

—Juro que a veces se piensa que ella está viva— Scarlett se rió, luego se puso seria —¿Estás bien? 

—¿Por qué no lo estaría?

—Yo sé que la quieres, Harry— Ella caminó hacia mí. Me encogí de hombros y mire al suelo. Su mano mi mejilla, haciéndome saltar un poco

—A veces la gente se enamoran entre sí, pero no están destinados a estar juntos.