¿Coincidencia? no lo creo. (Pausa temporal de tiempo)

Capítulo cinco.

_____.

Aquella señora anciana y fea empezó a hablarme.

- ¡Oye!, querida, ¿No te gustaría trabajar poco y ganar mucho dinero?.

-Ah- hh... -Sólo me quede pensando en que responder a esa pregunta, todo sonaba bastante bien excepto por la estúpida palabra "trabajar".

Aunque me lo proponía con huevos la vieja, como si fuese a vender drogas o a matar gente por dinero, pero, ¿saben qué?...eso no sonaba tan mal. En todas las FanFic que he leído de mis bebés, Wisin y Yandel, los shavos que matan, venden drogas, son de la mafia o mamadas así, jamás los atrapan, consiguen dinero fácil, una hermosa chica y al final se retiran y se hacen "buenas personas". Aunque en el fondo sabía que en la vida real...en la vida real...las cosas no son así, eso nunca lo olviden. No por leer como un morro mata y mata gente por las calles ya se deben creer que es así de fácil, no pendejas, no.

- ¡Oye!, cariño, te estoy hablando. - dijo la mujer un poco molesta por mi estúpida y sensual tardanza.

- Para mi...la neta no. - contesté, pero es que ni yo estaba segura de esa respuesta.

- ¿Porqué no lo piensas mejor? Mira, te daré mi tarjeta. Llámame en cuanto tengas una respuesta segura, piensaló. Por favor.

- Si, si. A pinches huevo.

Por fin la vieja idiota me dejo en paz y entre de nuevo a mi humilde y campesino "hogar".

Bote la tarjeta por algún lado y me dispuse a continuar con mi arduo y campesino trabajo. ¡Exacto!, ver televisión todo en pinshe día. Yo sé por lo general que las chicas pobres, como yo, suelen trabajar para ayudar a su familia, se rompen la espalda chambeando y además estudian...¡Así no se pinches puede!; y como a mí, el 99% de las cosas que pasan me valen verga, pues...ya se imaginarán. ¿Quieren saber que es el otro 1%? Así es, LEER, leer es mi pasión, es mi vida, sin lectura creo que no hay vida. Era la clase de chica que prefería quedarse en casa a leer en lugar de salir a una fiesta.....¿No se la creyeron o sí? Eso ni yo me lo creo. La verdad no es el 99% es el 10000%, todo, todo, todo, la verdad es que a mí me pasa sobrando.

*****

¡Mierda! - pensé. -Qué puta hambre y flojera tengo.

Con toda la lentitud e indisposición del mundo me pare del sofá y caminé hacia la cocina, pero en eso vi a mi estúpida y fea hermana tratando de abrir un paquete con las tijeras.

-Ten cuidado, inútil. No, ¿Sabes qué? mejor no lo tengas, agárralo y hazle como puedas, hasta con los ojos cerrados; a ver si así te clavas las tijeras en tu cabecita de mierda. - dije sólo para molestar a la pendeja ésta.

-Ah, gracias. - contesto Larissmar.

No dije nada más y terminé de preparar mi comida. Fui al comedor, me senté y tragué como pinshe cerdo.

Cuando termine, llamé a mi carnala por teléfono. Si, tal vez estén sorprendidos de que yo, la pinshe _______ culera tenga una "bestie", pero la verdad a mi me vale verga que piensen ustedes.

- ¿Qué pedo pinshe _____? -dijo mi amiga desde el otro lado del teléfono.

- ¿Qué pedo pinshe Chayito? -imite sus palabras, pero esta vez, usando su cagado nombre.

Mi mejor amiga, Chayo, se había "comido la torta antes del recreo"., y ahora pagaba las consecuencias. Pero fuera como fuera ella era mi mejor amiga y yo jamás la dejaría, estaría con ella hasta el final, la seguiré hasta el fin del mundo, por que después de todo ella es mi maravilla. <<Oh sí, Oasis-Wonderwall, perras>>. Para sacar adelante a su familia, puso una cocina económica, "La tía Chayo", un lugar formidable, adoraba comer ahí.

- ¿Que pedo?, ¿Qué necesitas _______?

- Pus al chile necesito alguien a quien joder.

- Ah, perdón ______. Ahora no puedo hablar. Esto de tener 3 pinshes hijos no es fácil.

- Ah, claro. Lo olvidaba. Pinshe morra calenturienta. Por eso yo si uso condón.

- Claro, claro. Bien, adiós ______, lo siento.

- Adiós, y suerte con los chamacos.

Colgé el teléfono y me dirigí a mi "habitación". Pero en el camino me encontré la tarjeta de la vieja loca tirada en el suelo. Me agaché para recogerla. Ni si quiera yo sé porque pinshes hice eso.

Leí la tarjeta. Tenía grabado un nombre en cursiva: Laura.

Y así supe que el nombre de la señora es Laura.

Fui a mi habitación y no sé porque cojones me puse a meditar sobre aquel trabajo que me ofrecieron esta tarde.

Tal vez no era tan mala idea. No tenía nada que perder, ¿O sí?... Sería una buena opción, lo único que me incomodó era que no había dado detalles, eso era...era muy sospechoso.