The Royalty

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Narra Haruka

Desde entonces, cada vez que paseo por los alrededores del muro me encuentro con el peli negro, con el cual mantengo largas y divertidas conversaciones, eso hasta que aparece Shiba... ¡No digo que no me agrade! Me agrada bastante, pero... Cada vez que aparece Ryou le presta más atención a él y se pone extremadamente nervioso, lo cual me parece un poco raro... Y por alguna razón me enoja...

Enfurruñada dejé que mi cuerpo cayera junto al de Cat, en esta ocasión.

–Adivinaré... ¿Ryou hablaba y reía con Shiba?–dijo sin quitar el cuaderno de su rostro.

–Si–dije enfurruñada.

–Entiendes que eso que sientes son celos...¿verdad?–dijo en la misma posición de antes.

–¿Celos?–pregunté incrédula.

–Sí. ¿No has considerado que tal vez te gusta aquel chico?

Las palabras de mi amiga me dejaron en el aire. No lo había pensado...ciertamente...

Las horas pasaban y yo no conseguía quitarme esa pregunta de la cabeza: "¿Me gusta Ryou?"

Caminaba perdida en mis pensamientos por los jardines, como siempre, cuando en los muros veo a Ryou.

–Hola Haru–me saludó con su linda sonrisa, al igual que siempre... Me miraba desde arriba del muro, hoy llevaba una sudadera de color negro sobre la camisa blanca de su uniforme, sus pantalones de jeans gris y sus converse negras.

–Hola Ryou...–le saludé de vuelta aún observándolo, analizándolo.

–¿Qué tienes? Pareces en la Luna–dijo con un ligero tono de burla.

–Puede ser, allá es más interesante que aquí –dije mientras me sentaba junto a él y le observaba a los ojos.

–¿Me dejarías aquí sólo?–preguntó haciendo un adorable puchero. Sentí mis mejillas arder un poco al verlo.

–C-claro que no. Eres mi amigo, y me importas mucho como para dejarte aquí –le respondí sincera mirándolo directamente a los ojos. El pareció sorprenderse ante lo que dije y luego se sonrojó.

–T-tú también eres importante para mi... Eres mi primera amiga además de Shiba y Yoishiro...–admitió desviando la mirada sonrojado. Sentí que mi corazón se volvía loco y que mi rostro ardía.

Como pude Sonreí. Me acerqué a él y lo abracé de improvisto. A los segundos me correspondió. Mi corazón no había dejado de latir tan rápido ni un segundo. Creo... Que sí me gusta... Cuando me gustaba... Aquella persona, sentí igual pero...con Ryou es diferente... Es... Más fuerte...

Al separarnos comenzamos a hablar con normalidad. Notaba pequeñas cosas en el pelinegro que antes no había notado. Como que, cada vez que deja de hablar comienza a mordisquear su labio inferior, o lo mal cortado que está su fleco, pero aún así se le ve bien.

Cuando quise darme cuenta ambos estábamos en el césped, muy alejados de ambas escuelas pues comenzamos a caminar mientras hablábamos. Nos sentamos, algo confiada acomodé mi cabeza en el regazo del pelinegro. Él comenzó a acariciar mi cabello, de tal forma que me empezó a dar sueño.

Abrí un poco los ojos para observarlo, él miraba hacia la nada, sus ojos brillaban por la poca luz solar que recibía. Sentí mis mejillas calientes al pensar en que se veía hermoso...

Volví a cerrar los ojos, y para cuando me di cuenta me había dormido...

Narra Ryou

Al dirigir mi mirada hacia Haruka me di cuenta de que estaba dormida. Su expresión era calmada... Mientras la miraba comencé analizar sus rasgos... Sus pestañas son largas y muy negras, sus ojos rasgados, cejas de un grosor intermedio perfectamente curvas. Labios delgados y rosados, mejillas algo rosadas, piel pálida. Su largo cabello naranjo es asombrosamente suave y brillante.