Encuentro Sorprendente.

Viaje espectacular.

  Era la mañana. ____(Tn) se había despertado muy temprano. Sus nervios por el día de hoy la estaban matando. Quería saber cuál sería el plan de Ian, el hombre más hermoso del mundo.

  Estuvo un rato tirada en la cama, moviéndose inquietamente. Decidió levantarse y darse un baño de sumersión. Se relajó por un rato. Cuando ya había estado por una hora, por lo menos, salió y se cambió.

  En ese momento le llegó un mensaje.
"Cariño, te voy a pasar a buscar a eso de las tres ;). Lleva ropa, mayas... (le enumeró varias cosas más) y por supuesto sexy ;). También, elegante. Nos vemos en un rato."
  Ella se sonrojó por lo que le había puesto Ian. Le respondió.
"Jaja, ahora preparo mis cosas, Ian... Espero que estés preparado para lidiar todo un fin de semana con esta hincha... :P"

Esperó a una respuesta que llegó a los dos minutos.
"Mi querida hermosura, lo que más quiero en este momento es pasar todo ese tiempo con vos... Algo más, nunca te digas hincha, porque no lo sos... Beso, me voy a terminar unas cosas."

  Faltaban cuatro horas para que la pase a buscar. Entonces decidió salir a dar una vuelta por el hotel.

  Nunca se había fijado cómo era, porque estuvo muy ocupada con otras cosas; entonces, cuando salió de su habitación, bajó a la recepción y preguntó por algún lugar para tomar algo, se sorprendió por lo hermosa que era el hotel: tenía las paredes color crema, con incrustaciones de lo que parecía ser oro; el techo era de un blanco medio grisáceo; tenía un salón con unas sillas y sillones tapadas con telas blancas; los camareros estaban vestidos muy elegantes. Se acercó a una de las mesas que daba hacia afuera y esperó a que un mesero se arrimar a su lugar. Uno llegó.

Mesero: Hola señorita, aquí le dejo la carta. Cualquier cosa que necesite, no dude en llamarme.

____(Tn): Muchas gracias. -le sonrió en el mismo momento en el que el mesero se retiraba.

  Estuvo un tiempo para decidirse, pero al final pidió un almuerzo completo, moría de hambre: huevos revueltos, tocino, waffles salados, jamón, queso, salame, y muchas cosas más.

  ____(Tn) comenzó a ojear una revista.

  En un momento escuchó como alguien carraspeaba detrás de ella. No le dio importancia hasta que volvió a hacerlo.

  Se dio vuelta y se encontró con unos ojos azules turquesas y una sonrisa resplandeciente. Era Scott.

Scott: Hola, ____(Tn)...

____(Tn): ¡Hey! ¿Cómo estas, Scott?

Scott: -sonrió al ver que se acordaba de su nombre- Bien, y ¿vos?

____(Tn): -sonrió un poco atontada, recordando a Ian.- Increíble... Jaja. -soltó una risa estúpida.

Scott: -frunció un poco el entrecejo- Un hombre, ¿no? -cambió el tono que tenía de felicidad y brillo en los ojos a uno cortante y los ojos oscurecidos.

  ____(Tn) se extrañó un poco, pero no le prestó mucha atención.

____(Tn): Sí... Jaja. -nuevamente esa risa- ¿Se nota?

Scott: -nuevamente frío- Bastante.

  Ahora la que fruncía el entrecejo era ella. "¿A este qué le pasa?" se preguntó.

____(Tn): ¿Todo bien?

Scott: Más que bien. -forzó una sonrisa que no le llegó ni por nada a los ojos.

____(Tn): Aja... Decile eso a tus ojos... -se los señaló con un dedo.

Scott: Estoy bien, sólo que quería invitarte a ir al cine o algo; pero no importa...