Atrapada

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Escondite del Enemigo

Ya había pasado dos días y Estaba sentada en la silla a lado de la pequeña ventana mirando el lugar desierto, ¿Dónde estaba? ¿Qué era esto? Y Darién, mi Darién, estaría sufriendo, Me llevé la mano al pecho, Ni siquiera podía pensar, tan sólo imaginar la palabra romper relacionado con Darién, me revolvía el estómago. Me dirigí a la pequeña cama y me eche, De pronto, oí un ruido en la puerta, me puso en alerta e hizo que me incorporase de nuevo, asustada. La pesada hoja de madera se abrió poco a poco, produciéndose un chirrido por las viejas bisagras, y mi respiración aumentó su ritmo. Y lo hizo aún más cuando la sombra apareció tras ella.

Llevé mi cuerpo hacia atrás y mi espalda se topó con el cabecero.
-Veo que te has despertado -habló, estaba con capucha negra me impedían verle el rostro y el cuerpo, pero por su voz profunda y grave. Esperó un tiempo prudencial, pero no le contesté.
-Ya es hora; me volvió a decir; en ese momento entro Razer, y la sombra hizo una reverencia.
-Todo listo Kaifer-Pregunto Razer mirándome.
-Listo para qué? Exclame
-llego la hora Serenity hoy terminaras con el estúpido de Endymion.
-Que? Grite; no nadie nos separara
-Ya lo sé por eso te dije que tu acabaras con todo, Kaifer; Grito Razer; ya Sabes lo que tienes que hacer.

Kaifer se acercó a mi lado y volvió a lanzarme ese polvo dorado que hizo que mi alma se separara de mi cuerpo encerrándome en una caja de cristal y el usurpador aparezca.
-Muy bien Serenity; buscaras a Endymion y Terminaras con él; dijo Razer con una sonrisa
-Si; respondí-¡QUE NO, NO, NO! grite pegándome al cristal que me apresaba.

Departamento de Darién

Mi cuerpo Usurpado comenzó a caminar hasta llegar al departamento de Darién, ¡No! ¡¿A dónde me llevas ahora?! Grité, dándole golpes al cristal;¡Darién! ¡Chicas! ¡Ayúdenme, por favor!
Sin embargo, me quedé paralizada cuando vi lo que estaba haciendo Mis pies se dirigieron a la puerta, ignorando toda mi inútil resistencia y mis gritos, mi espíritu miró hacia un lado y se volvió a congelar. La espeluznante sombra Kaifer estaba allí, vigilando en la esquina del pasadizo. Había venido para comprobar que todo salía según sus planes. Una vez más, la brisa gélida que me poseía logró hacer tocara el timbre, Luché con todas mis fuerzas durante la espera, tratando de que mis pies usurpados respondiera a mis intenciones y salieran huyendo de allí, de que mis manos se movieran, pero todo era inútil. Lloraba con impotencia y desesperación, Un glaciar extremadamente helado atravesó todo mi ser cuando vi a Darién, Mi Darién abrirme la puerta, porque esa horrible pesadilla se plantó en mi cerebro otra vez y supe con toda certeza lo que iba a ocurrir.

¡No, por favor! ¡No le hagas daño! ¡Haré todo lo que quieras, pero esto no!, chillé, desesperada, pegando mis manos a ese duro cristal que apartaba mi espíritu de mi cuerpo para que la brisa fría usurpara mi puesto. Darién se sorprendió, vi una lágrima en su hermoso rostro mientras mostraba una sonrisa de felicidad al verme.

-¡Serena! ; exclamó emocionado, acercándose a mí El corazón de mi cuerpo espiritual empezó a latir a mil por hora y mi respiración pasó a ser jadeante, de la tensión y los nervios. Mi Darién, mi Darién... ¡Por favor! ¡No podré soportarlo! ¡Si me separas de él, me moriré!, lloré, desconsoladamente. ¡Nos moriremos los dos! Extendió sus brazos para abrazarme.

-No te acerques-le paró mi cuerpo usurpado, interponiendo la mano en su pecho para detenerle.
¡No, Darién! ¡No escuches!, sollocé. Tal vez el hechizo no le surtiera efecto. Eso era mi última esperanza. Su sonrisa alegre se fue apagando lentamente, confusa, al escuchar ese tono de mi voz duro y frío que jamás había utilizado con él.

-Qué pasa?-me pregunto alarmado-Te duele algo, Estas bien
-Ya no quiero estar contigo, No me quiero casar contigo-¡NO! ¡SÍ QUIERO! ¡SÍ QUIERO!, chillé, con todas mis fuerzas, aplastándome contra el cristal. ¡NO!, volví a gritar.
-Qué? Pregunto perplejo.
-No te Amo; ¡NO LO ESCUCHES, DARIEN!, imploré, llorando. ¡ESA NO SOY YO!
-Qué... qué estás diciendo Serena?;sus preciosos ojos azules se tiñeron de confusión.

El Despertar De Sailor CosmoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora