Capítulo 2

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Por fin en mi casa, pero que le pasaba al estúpido de mi jefe, es atractivo... demasiado diría yo, pero eso no le da el derecho de besarme, no quiero verle mañana, necesito una ducha.

Empiezo a calentar el agua, cuando mi teléfono suena, quien podrá ser?

—Bueno? — contesté extrañada, pues el numero era desconocido.

— Hola preciosa — dijeron del otro lado de la linea, de inmediato reconocí la voz del tarada neanderthal de mi jefe

— Buenas noches señor, que se le ofrece? — dije con un tono fastidiado.

— Sólo quería saber como esta mi hermosa secretaria — escuche su risa burlona detrás del teléfono.

— Pues estoy muy bien — sin usted pensé — ahora si me disculpa estaba por tomar una ducha — dejándole en claro que no quería hablar con el.

— Uff! No puedo ir a acompañarte? — dijo en un tono que no sabia que ni como describirlo, ni en sus sueños!

— No señor, no se que busca con esto, usted tiene novia. — dije tratando de que la conversación ya terminara y hacerlo entender que yo no tendría nada con el.

— Y eso? No porque la tenga significa que no puedo verte o desearte en este caso. — dijo, pero que descarado hombre

— Por respeto a ella — aunque ella no había sido muy educada conmigo no iba a hacer algo así.

— Que respeto ni que nada, te quiero en mi cama y todo lo que quiero lo consigo, tenlo en cuenta. — su tono demandante me atraía.

— Nunca me va a tener en su cama y téngalo muy en cuenta — dije en tono decidido

— Eso lo veremos los dos después, hasta mañana preciosa, y por cierto esos labios los quiero ver chupando mi ver... — colgué antes de que dijera esa vulgaridad, no quiero ir mañana se que seria cobarde pero no lo soy, tengo que ir, además la paga es demasiado buena y necesito el trabajo.

Me acosté, estaba pensando en lo que había pasado en su oficina, besaba demasiado bien, su cuerpo esta de infarto, sus ojos me hipnotizan y se ve tan sexy con su traje, pero que estoy pensando, el tiene novia .

Me acosté dispuesta a dormir, empece a imaginarme como seria tener a mi jefe arriba de mi, besándome, acariciando todo mi cuerpo, se ve que es un hombre con demasiada experiencia yo en cambio no la tenia, era virgen aun, no podía pensar en esas cosas, me decidí a dormir porque mañana tenia que levantarme muy temprano y así fue.

El Ejecutivo - Bill SkarsgardDonde viven las historias. Descúbrelo ahora