HADES

CAPITULO V : SENSACIONES EXTRAÑAS

Ya en la cascada me encontraba yo , con mi yo interior , todo seguía igual no pareciera que habían pasado 400 años , la cascada tranquila y silenciosa , además el tenue y suave canto de las aves le daba vida a aquel lugar , estaba rodeado por un floral , tan denso como el aire en tierras frías cuando estaba ya ahí me senté en mi lugar preferido aunque de por si ese lugar solo lo visitaba yo , mi lugar era unas piedras en todo el centro del lago , donde caía el agua de la cascada.
El solo sentir ese aire fresco , hacia que me relajara y olvidara todo lo que sucedía a mi alrededor para sumirme en mis pensamientos, aunque no del todo me olvidaba de mi alrededor, solo el hecho de mi despertar , ya se había convertido en un pensamiento principal de esos que nunca salen de la cabeza.
Estaba preocupado por lo Hiphnos había dicho en sus santuario , Zeus o Poseidón estaban detrás de esto, no lo podía creer , ya que ambos están en la prisión de mi querida sobrina Athena , he de admitir que esa chiquilla no es de mi agrado , su piedad sin límite por la humanidad es demasiada , y esto es solo símbolo de debilidad , los dioses debemos mantenernos al margen de las cosas humanas , ser imparciales , si se necesita un castigo hacia ellos por su actuar se aplica , pero Athena es todo lo contrario, ya que interactúa con humanos y cuando cometen errores ella solo los perdona , que desperdicio , Athena es una diosa poderosa pero ese amor por la humanidad , la hace débil.
Todo lo contrario soy yo , solo una vez la humanidad me ayudó , y ya he saldado mi deuda con ellos , pero jamás seré piadoso con ellos , si se equivocan deben pagar aunque entre en un conflicto con Athena , tal vez por eso Zeus y Poseidón son sus prisioneros , ya que aplicaron mi pensamiento , y no solo por eso , Athena además de ser poderosa tienen a su poder un humano el cuál tiene características sobrehumanas y por si fuera poco , porta una armadura bañada por la sangre de ella, que historia.
Creo que a veces agradezco mi indiferencia con las cosas humanas , cosa que no realizan mis hermanos y por ello estan donde están.
Pero prefiero no seguir hablando de eso , el solo hecho de pensar que Athena y su querido caballero personal pudieron derrotar a dos grandes dioses de mi nivel , hace que me preocupe un tanto.
Continuando con mi problema , prefiero también dejarlo a un lado de momento , ya que Thanatos e Hiphnos tienen razón primero debo encontrar mi armadura, entonces tomé el espejo y empecé a mirarlo detenidamente de un momento a otro , mi reflejo se fue convirtiendo en  una imagen de la humanidad , quedé sorprendido al ver que la humanidad si había cambiado demasiado a comparación con mi paraíso , pero…. El cambió solo era físico , mentalmente seguía el mismo pensamiento , egoísta , terco , sentimental , todo seguía igual solo que más moderno , me pareció algo absurdo ya que de nada sirve cambiar por fuera si sigues igual de podrido por dentro.
Algo me sorprendió bastante esta vez de la humanidad , y era que había preocupación por su querido planeta , algo irónico ya que ellos mismos buscaron la perdición del planeta y ahora solo lloran y buscan soluciones rápidas para un problema que existe desde el comienzo de su existencia.
Decidí mejor no seguir viendo ya que me causaba un poco de ira , y decepción , entonces le pedí al espejo que me mostrara donde se encontraba mi espada y como lo dijo Hiphnos,  se encontraba en Roma , Italia pero algo que no había dicho era que se encontraba en un museo de antigüedades , tenía ira pero esta se desapareció cuando observé que en este museo se venera a mis hermanos y a mi , quedé perplejo , había pasado mucho tiempo desde que la humanidad había perdido la fe en mi y en mis hermanos.
Pero algo raro sucedió , durante ese momento de felicidad que fue muy efímero se combinó con algo extraño, era una chica que estaba junto a mi espada, hablaba de ella , una chica alta , blanca como la nieve que pocas veces aparecía en los Eliseos , sus ojos cafés del mismo color del tronco del árbol más precioso del paraíso , su piel se veía suave y delicada como un bebé recién nacido , unos labios… esos labios tan delicados y rojos como la sangre , su pelo negro como la oscuridad de la noche , del mismo color del mío , me quedé hipnotizado como hablaba , tan refinada como un mismo dios , no era como los demás humanos era diferente .
Era increíble verla , pero… que sucede con migo , ¡¡¿QUE ME PASA?¡¡ por que tengo esa sensación tan extraña , me sentí débil por primera vez en mi vida sabiendo que estaba en buenas condiciones, el corazón parecía un rayo igual de veloz , solté el espejo y salí de las cascadas preocupado por esa sensación.
Jamás había sentido algo así , sentí una atracción hacía ella , pero es imposible un dios como yo , no puede perder la cordura por pensamientos mortales , decidí ir de nuevo al palacio , necesitaba contarle a Thanatos lo que había pasado , pero que le digo… que me perdí la concentración al ver una mortal , no sabía que hacer , al llegar al palacio llamé a Thanatos , como era de esperar apareció en un instante.
Cuando llegó no sabía que decir , entonces confíe en que él no me diría nada , al contrario me aconsejaría que hacer , el conoce más de la humanidad que yo.