Loki de Sakaar

Aquí todos te aman

Todos los personajes de esta historia pertenecen a Marvel

Capítulo 1

Aquí todos te aman

El aterrizaje fue duro, caí entre la chatarra de viejas naves. No pude gritar porque simplemente el dolor me sobrepaso y me limité a mirar aquel extraño cielo tan diferente al de Asgard con sus veinte lunas, despejado como si todo el tiempo fuera verano. Lleve mis manos a mi costado, la herida hecha por Hela sangraba un poco, solo había sido un leve rasguño pero fue suficiente para sacarme del bifrost. Quizás no estaría tan desubicado si mi corazón se pudiera reponer de todas las emociones vividas en menos de sesenta minutos pues ahora resultaba que tenía otra "hermana", Odín murió y mi ilusión fue descubierta justo cuando terminaba de ver mi obra favorita de teatro.

— ¿Eres comida o luchador? — escucho que alguien pregunta.

Loki, aún no es momento de descansar, ahora tienes el triple de problemas—. Ninguno de los dos—murmure levantándome como podía—. No sé qué clase de seres horrorosos sean ustedes pero exijo hablar con el gobernador—ahora que ya estaba parado podía notar las construcciones, solo una de ella resaltaba por su enorme altura y solo era cuestión de usar lógica para saber que ahí el rey estaba—. Llévenme ahí.

— ¿Entonces eres luchador? —volvió a preguntarme mientras varios de su especie comenzaban a rodearme.

Oh vaya, definitivamente era momento de usar mi fiel magia, mis dedos se movieron ansiosos por lanzarles poderosos hechizos y de hecho estaba a punto de hacerlo, hasta que me atraparon en una red y un extraño veneno comenzó a correr por mis venas.

Entonces caí...nuevamente.

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Cuando desperté me encontraba en una peculiar situación, varios duendecillos cepillaban mi cabello y tomaban medidas de mi cuerpo. Les arroje una mirada enojada que muy a mi sorpresa solo les causo pequeñas risitas, supongo que han de estar acostumbrados a recibir tanta furia que ya les comenzó a dar igual.

Intente moverme pero estaba inmovilizado en una silla con colores chillantes, definitivamente el dueño del lugar no tenía un gusto muy refinado ¿Acaso no se podía decidir si pintar todo de rojo o blanco? Sus raras combinaciones solo me provocaban dolores de cabeza intensos, los cuales solo empeoraron mi humor.

—Vas a conocer a su majestad ¡The Grandmaster! —Me dijo con voz aguda una jovencita de 4 ojos— ¡Disfruta el viaje!

Oh vaya, por lo menos logre realizar mi cometido. Al final no fue tan difícil conseguir una audiencia con el rey.

Mi silla comenzó a moverse y pronto todo el panorama cambio, parecía como si estuviera dentro de una pequeña galaxia con cientos de estrellas quemándose. Debo admitir que esto me dejo desconcertado, la tonada de una melosa canción sonó dejándome aún más intrigado e incluso algo perturbado.

No temas, te han encontrado

Estas en casa ya no hay marcha atrás

Nadie abandona este lugar

La situación se puso más bizarra, me sorprende que pueda aumentar hasta este nivel ¿Pero qué lugar es este?

¿Pero qué lugar es este?

La respuesta es Sakaar, rodeado de portales cósmicos.

Sakaar vive en los límites de lo conocido y desconocido.

¡Ah! ¡Gracias por contestar extraña voz femenina!

Es el punto de reunión para todo aquello perdido y sin amor.