02

5.6K 329 146
                                    

T/n

Oh oh, mierda. ¡¿Que hacen aquí?!

Mi corazón se aceleró de un momento a otro, mis manos comenzaron a sudar.
¿Porqué ellos?

De pronto noté que no me prestaban demasiada atención, algunos estaban hablando sobre el menú.
Tal vez no logren reconocerme. Me veo claramente diferente sin mini vestimenta y  el maquillaje.


Cálmate o te descubrirán. Respira.

—¿Que desean ordenar?— pregunté tomando mi libreta y lapicera casi con demasiada fuerza.

—A una chica llamada T/n— dice un el chico de pelo anaranjado.Mi piel se erizó.—Ya le dijimos al otro mesero.


Entonces sí me buscan, pero no parece que se den cuenta que soy yo.

—¿T-t/n?— pregunté.

Eso es, finge demencia.

—Sí, ¿la conoces? Nos dijeron que trabajaba aquí— RM se inclinó un poco hacia adelante y entrecerró sus ojos. Traté de no mostrar ninguna emoción.

—No sé quién es, aquí no trabaja ninguna T/n— dije mientras trataba de actuar lo más creíble que podía.

—Aún no decidimos que ordenar, lo haremos luego.— de repente dijo con voz cortante otro chico de pelo negro y tez blanca. Anoche creo que lo había visto, pero no había hablado.

—Está bien.— me giré, y me retiré lejos de la mesa. Una vez que no me vieron llevé mi mano a mi pecho, justo en la zona donde estaba el corazón. Los latidos retumbaban en mis oídos.

—Eso estuvo cerca...— susurré.

Continué con mis tareas, evité todo los posible acercarme a la mesa en donde se encontraban y poco tiempo después, limpiando una de las mesas, vi que mi jefe fue directo para atender a los chicos.
D

e pronto noté que le entregaron un montón de dinero, mi jefe nisiquiera dudó en tomarlo, de repente levantó la mirada como si buscara algo, apreté mis puntos cuando hizo una seña hacia mí y todos los chicos me miraron.


¡No puede ser! Les dijo que yo era la persona que buscaban ¡Por dinero!

Maldito hijo de...

Miré el reloj, me quedaban 3 minutos para que termine mi turno, así que cuando vi que se ponían de pie y se despedían con mi jefe apuré mi paso hacia los baños para cambiarme.
Nunca me había quitado el uniforme y puesto la ropa tan rápido, una ve, lista me propuse a a salir del baño para escaparme por la puerta de atrás. Mis planes se fueron a la bancarrota cuando alguien me empujó de nuevo dentro del baño y cerró la puerta.

—¡¿Que haces?!— dije enojada pero me quedé congelada al ver de quién se trataba, era el chico pálido de hace unos momentos.

—Eres una chica mala ¿lo sabías?, nos mentiste— puso sus manos en los bolsillos mientras se acercaba lentamente hasta dejarme acorralada contra la pared.

—No sé que quieren, tampoco me interesa, así que déjenme en paz.— dije apenas audible. Estaba muy cerca.

—Debería enojarme por tu mentira, pero vengo a otra cosa.— de pronto colocó sus manos en la pared justo al lado de mi rostro cuando traté de escapar, quedé contra la pared de nuevo.

La Chica Striper [BTS y tú] +18Donde viven las historias. Descúbrelo ahora