°˖✧tres✧˖°

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El jueves Midoriya estaba triste tras la hora del almuerzo ya que no había visto al rubio, estuvo esperándole cerca de su mesa pero no hubo ni rastro de él.
Las siguientes clases se le pasaron lentas y sombrías pues echaba de menos al de ojos carmesí.
Midoriya apoyó su cara en su mano y dio rienda suelta a su imaginación; ¿Qué le había pasado a Katsu? ¿Donde estaría? quizás él estaba enfermo y no podía ir a la academia.
Se imaginó cuidando de un Katsuki enfermo, donde Izuku le hacia mimos y le cuidaba dándole amor sin parar hasta que estuviese bien. Soltó un suspiro.

Definitivamente debía dejar de fantasear.

En la última clase los alumnos se juntaron en grupos de cuatro para realizar una actividad, Izuku no estaba en su mejor momento y se mantuvo al margen de lo que hablaban las tres personas a su lado.

-¿Qué opinas tú, Deku-Kun?-preguntó la castaña animada

-¿um?-le dirigió una mirada confusa a la chica- n-no sé-tartumeó nervioso-me da igual-arrastró las palabras rápidas y confusas

-Debemos trabajar todos en equipo para dar lo mejor de nosotros mismos y así conseguir una buena nota, es importante la puntación ya saben que tenemos que dar buena impresión a los profesores y  debemos hacer que nuestros padres se sientan orgullosos de nuestros logros, en definitiva debemos hacer estos ejercicios lo mejor que podamos para obtener un sobresaliente-Iida habló incluso más rápido y confuso que el joven Midoriya

-¿Estas bien?-cuestionó el cuarto miembro en la mesa

-Estoy tan fresco como una rosa ¿por qué no iba a estarlo?

-Eres muy extraño

-Y tú un grosero-respondió el delegado

-¡Chicos!-gritó Uraraka llamando la atención de todos los compañeros, al sentir las miradas directas a su dirección, Midoriya bajó la cabeza y la escondió en sus brazos-dejen de discutir-susurró-tenemos que trabajar en equipo, Iida-kun seguro que sacamos buena nota, Deku-Kun tienes que estar atento y Todoroki tienes que ser más amable.

El último en ser nombrado bufó cansado y comenzó a realizar rápidamente los ejercicios en el cuaderno, realmente no quería estar allí con aquellos tres tipos tan extraños.
Tras discusiones en las que no conseguían ponerse de acuerdo el timbre sonó lo cual indicaba que tenían que llevarse el trabajo a casa, lo cual indicaba también que tenían que verse incluso después de clases, lo cual indicaba que Midoriya no podía fantasear durante toda la tarde con Bakugō y Todoroki tendría que volver a ver a esos pringados otra vez. Aquello no les gustó.

  
                                        ooo

-Bien chicos, antes empecemos antes terminaremos-animó la pequeña de ojos grandes

Se encontraban en una de las bibliotecas cercanas a la academia, todas las tardes se llenaba de alumnos qué o bien no terminaban la tarea en clase o bien estudiaban allí.

Los cuatro muchachos estaban absortos en los ejercicios ayudándose entre ellos como un buen grupo, incluso Izuku que había perdido un poco la vergüenza con los dos chicos.
Una hora más tarde cerraron sus cuadernos y comenzaron a recoger sus cosas para marcharse a casa.

-Hasta mañana chicos-se despidió Todoroki, dio dos pasos hasta que se vio alarmado cuando Midoriya le jaló del brazo sentándolo de nuevo en la silla-¿Qué haces?-cuestión frunciendo el ceño al ver como el peliverde parecía esconderse tras él

La mano del de ojos esmeraldas fue elevada recta con su dedo índice señalando hacia la entrada en un extraño e incontrolable temblerique.

-Uraraka-susurró-Es Katsuki

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