Amor es Amor

Facundo

Nos divertimos tanto con milagros que me dolía la cabeza de tanto reirme, me dirigí a la cocina a buscar un vaso de agua, ya que en todas las mesas había alcohol. Cuando entré con lo primero que me encontré era con un chico agachado buscando en un estante anda a saber que, pero lo que me llamó la atención era su culo, no era muy grande pero me atraía. De repente chico mi dedo chiquito del pie contra la punta de la mesa y grito del dolor.
El chico se da vuelta -era Martin- Que te pasó? -se me acerca-
-eh yo nada, necesitaba un poco de agua
-sos Matías cierto?
-s..i -tartamudeo pensando en lo que había visto antes, su culo. Mi puta mente no dejaba de pensar en eso-
Abre una heladera gigante que estaba a su derecha y se acerca a mi
-acá tenes tu agua, no tomas alcohol?
-si, pero me dolía un poco la cabeza. Gracias
-mejórate. Me sonríe y se da media vuelta volviendo a lo suyo.
Vuelvo afuera y me acerco a Milagros que justamente estaba con mi hermana
-a qué no saben quien está dentro de la cocina? Les digo riendome
-Pablo? Dice milagros sorprendida
-Si el estuviera seguiría ahí escuchando sus historias. -nos reímos al unísono-
-Quién? -dice mi hermana intrigada-
-Martín, y tiene un muy lindo culo por cierto.

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Volver a la facultad después de un fin de semana tan movido me deprime. Hoy había quedado con Pablo y estaba sin ganas de verlo, un chico tan lindo pero tan tan hablador me la bajaba mucho. Voy a confiar en mi mejor amiga y volverlo a ver, quizás tenga razón y el active.
-buenos días hijo veni a desayunar con nosotros -se acerca mama a mi habitación con un tono de felicidad-

-Bueno Matias, con tu madre tenemos un viaje de una semana y te pedimos por favor que cuides la casa. Mantenete en contacto con nosotros-agregó papá mientras cambiaba la televisión porque estaban dando un informe sobre la homofobia a lo que ignore pero que me dio bronca-
-Buenísimo, milagros y Facu van a quedarse a dormir
-Facundo volvió de sus vacaciones?
-exclama algo contenta mamá-
Facundo era mi amigo desde los 3 o 4 años, fue mi único amigo hombre en toda mi vida creo, el tanto como Milagros me conocían de punta a punta. Y hoy volvía de sus vacaciones en Miami con su novia, el era apenas un año mayor que Mili y yo. Desde que terminó la secundaria viaja a todos lados, sus papás son ricos y el cuando no está viajando ayuda en la empresa familiar.

*****
-es aquel? -grita milagros señalando a un chico-
-no, ahí viene el de remera azul -le giro la cabeza-
Facundo se acerca sólo, sin su novia a lo que me sorprende pero por momento ignoro.
Nos abrazamos los tres y tomamos un taxi a mi casa. En el camino sólo hablamos de como nos extrañabamos y los momentos que habíamos pasado juntos.
-y tu novia? -le pregunto mientras entramos a mi casa-
-deja las valijas en el piso y se sienta en el sillón- me engañó la última semana de vacaciones -nosotros gritamos a unísono "que"- si, la encontré con el encargado del hotel en el cuarto de limpieza de la piscina. La muy zorra me decía que no era lo que pensaba y todas esas pendejadas que decimos cuando estamos en aprietos -nosotros seguíamos boquiabiertos- me fui del hotel y me lleve su ropa, la tiré en barranco y me conseguí otro hotel, me llamó más de cien veces hasta que la bloquie. Y acá estoy.
-Pendeja siempre hubo algo de ella que no me gustaba, si la cruzo la paso por arriba -dice milagros golpeando la mesa-
-te ayudo en eso amiga -agrego- hoy hacemos una fiesta entonces, me la suda si mis papas se enteran, a olvidarte de esa amigo -lo abrazo y milagros empieza a saltar de emoción. Ella y las fiestas son uno-